¿Alguna vez ha sentido un hormigueo incómodo en las manos que parece no desaparecer? Aunque puede ser pasajero, como quedarse dormido sobre un brazo, en otros casos, las manos dormidas son un llamado de atención de su cuerpo. Este fenómeno, conocido médicamente como parestesia, puede ser causado por una variedad de factores que van desde compresiones nerviosas temporales hasta condiciones médicas más complejas.
En este artículo, exploraremos, junto con expertos de la Clínica Mayo, las posibles causas del adormecimiento de las manos, señales de alarma y cuándo es hora de buscar ayuda profesional.
Sigue a Cromos en WhatsApp¿Qué causa el adormecimiento de las manos?
El adormecimiento en las manos ocurre cuando los nervios encargados de enviar señales al cerebro se ven comprometidos. Esto puede deberse a daño, irritación o compresión de un nervio, generalmente en el brazo o la muñeca. Un ejemplo común es el síndrome del túnel carpiano, una condición que afecta a millones de personas debido al uso repetitivo de dispositivos electrónicos.
Sin embargo, este síntoma no siempre tiene causas evidentes. Enfermedades crónicas como la diabetes también pueden ser responsables, ya que suelen dañar los nervios periféricos. Aunque el entumecimiento relacionado con la diabetes comienza típicamente en los pies, eventualmente puede afectar las manos.
En casos más raros, el origen podría estar en el cerebro o la médula espinal. Condiciones como esclerosis múltiple, accidentes cerebrovasculares o incluso tumores pueden manifestarse inicialmente con entumecimiento en las extremidades. Por esta razón, los expertos enfatizan la importancia de prestar atención a síntomas adicionales, como debilidad o pérdida de función en las manos.
Algunas causas adicionales incluyen:
- Lesiones traumáticas: como fracturas o daño en el plexo braquial.
- Deficiencias nutricionales: la falta de vitamina B12 puede alterar la función nerviosa.
- Enfermedades autoinmunes: trastornos como la esclerosis múltiple o el síndrome de Guillain-Barré.
- Exposición al frío extremo: la congelación puede dañar los nervios y generar entumecimiento.
El diagnóstico adecuado requiere una evaluación detallada. Los médicos suelen recurrir a pruebas como estudios de conducción nerviosa, resonancias magnéticas o análisis de sangre para identificar la causa exacta antes de proponer un tratamiento.
Te puede interesar: ¿Navidad de infarto? Así es como las fiestas pueden afectar tu salud cardiovascular
De esta forma, las manos dormidas son un síntoma que no debe subestimarse. Aunque en la mayoría de los casos se deben a factores benignos como una mala postura o un uso excesivo de las extremidades, también pueden ser un indicativo temprano de problemas médicos subyacentes. Mantener una buena comunicación con su cuerpo y acudir a un especialista cuando el entumecimiento persista o se combine con otros síntomas es fundamental para proteger su salud.
¿Y usted, qué tan bien conoce el lenguaje de su cuerpo? Una consulta a tiempo puede marcar la diferencia entre una simple incomodidad y la prevención de un problema mayor.
