Britney Spears con su padre Jamie Spears
Muchos fueron los desagradables detalles que salieron a la luz sobre el caso de Britney Spears.
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Pero las pruebas no cesan: un ex agente del FBI junto con la investigadora privada Sherine Ebadi confirmaron durante la reciente audiencia que se llevó a cabo este 19 de enero, que el padre de Britney Spears habría vigilado y espiado a su hija de manera ilegal a través de dispositivos que instaló en su habitación mientras permanecía bajo su tutela.
Alex Vlasov, un exempleado de la empresa de seguridad Black Box Security, fue interrogado y aseguró en un informe del New York Times que efectivamente el padre de Britney Spears estaba constantemente monitoreando a su hija a través de los dispositivos de seguridad ofrecidos por la compañía.
La empresa no solo instaló cámaras, sino micrófonos y dispositivos para poder escuchar todo lo que ocurría en la habitación de Britney de forma totalmente encubierta.
Esto implicaría que todos los momentos en los que la famosa cantante estuvo trabajando en su proceso legal, su información también estuvo en riesgo.
Esto lo confirmó Vlasov también en el mismo informe, en el que corrobora que las conversaciones de Britney con su abogado fueron espiadas constantemente.
Las pruebas contra Jamie Spears
El manejo financiero de las cuentas de Britney Spears por parte de su padre Jamie está hoy bajo lupa e investigación.
Gracias a un proceso legal determinado desde 2008, Britney pudo salir favorecida en su audiencia a favor de su libertad durante el pasado 2021, en la que su padre, Jamie Spears, dejaría de figurar como su tutor legal y ceder nuevamente el control sobre su patrimonio, sus contratos, entre otros.
Su padre tenía una tutela legal desde hace más de 13 años para controlar y tener el dominio de todos los movimientos financieros de su hija.
Esto quiere decir que durante todos estos años Britney Spears nunca pudo ni siquiera comprarse un café sin autorización, supervisión y vigilancia, aún con su propio dinero.
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El movimiento Free Britney
Aquel video viral en el que un chico lloraba pidiendo que dejaran a Britney en paz quizás hoy pueda ser visto bajo otra luz.
Fueron precisamente sus fans los que mucho más adelante en este proceso lograron visibilizar los abusos de poder a los que la cantante era sometida.
Muchos se burlaban de este video hace varios años y, sin embargo, es claro que la famosa ídolo pop fue siempre un blanco de presiones constantes, con el agravante de que ahora se sabe que tampoco tenía un resguardo en su núcleo familiar más íntimo.
En sus declaraciones, luego de su libertad, Britney afirmó: “(…) Estoy aquí para defender personas que sufren de discapacidades reales, de enfermedades reales. Yo soy una mujer fuerte y solo puedo imaginar lo que este sistema le ha hecho a estas personas.”
“Tengo la esperanza de que mi historia pueda tener un impacto y cambiar este sistema corrupto”, afirmó la cantante.
