Paula Rodríguez
Por: Carlos Torres Tangarife.
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El elemento Hg que solías ver en la mitad de la tabla periódica –en la columna 12, fila 6, cuadro ochenta–, que era tan fácil de memorizar, hoy está dañando los ríos. Cuando el agua se contamina con mercurio, las consecuencias se pueden resumir en una cadena alimenticia muy básica, como las que aprendimos en el colegio.
Empieza por unos explotadores que usan mercurio para extraer oro del Atrato. Al entrar en contacto ambos metales, se forma una amalgama que luego debe ser quemada para separar el mercurio de la piedrita dorada. Dicho mercurio inevitablemente cae al fondo del río, en donde bacterias lo transforman en metilmercurio, que es capturado por zooplancton y fitoplancton, y devorado posteriormente por peces. Primero uno pequeño, que luego será tragado por otro más grande. El último pez, que puede ser una tilapia o un atún, queda cargado de esa sustancia química. Este proceso se llama bioacumulación. Al final de la cadena está el hombre, que quizás es un habitante de ese mismo municipio o alguien de alguna ciudad lejana, que va al supermercado y compra un pescado para preparar a la hora del almuerzo.
Paula Rodríguez trabaja hace dos años en WWF, una organización que lidera proyectos para acabar con la degradación del medio ambiente. Graduada de la Universidad de los Andes, estudia los efectos del mercurio en el Pacífico colombiano. Para empezar esta entrevista, se remonta a la bahía de Minamata, en Japón, lugar que le da nombre al convenio que busca eliminar la utilización de esta sustancia en el mundo.
Hubo 1.126 casos de intoxicación reportados entre el 2013 y el 2015 en Antioquia, Chocó, Bolívar, Córdoba y Sucre.
¿Por qué se llama Convenio de Minamata?
Porque fue el primer caso documentado de contaminación por mercurio en una población. Minamata es una bahía en Japón en la que la empresa Chisso vertió 81 toneladas de mercurio entre 1932 y 1969. Al principio, sus habitantes notaron las consecuencias en su sistema nervioso, y en las generaciones posteriores nacieron bebés con malformaciones. Es usual que las personas afectadas sufran de polimorfismo.
¿Las madres y los padres transmiten el mercurio a sus hijos?
Si comes pescado contaminado y desarrollas una concentración elevada, puedes transmitir la concentración a tu hijo a través de la placenta. Han nacido niños con retraso mental, tal como sucedió en la bahía de Minamata. El gobierno de Japón construyó un hospital para tratar a las víctimas del mercurio, y cerró la planta que estaba arrojando la sustancia química al mar. Incluso hoy, todavía hay japoneses con malformaciones, la mayoría nacidos en los setenta. Su situación sacó la problemática a la luz y de ahí nació el convenio, que busca proteger la salud y el ambiente.
¿Colombia firmó el Convenio?
En el 2013 lo suscribieron varios países, entre ellos Colombia. El mecanismo de ratificación es distinto en cada país. En nuestro caso, cualquier convenio debe pasar por revisión de varios ministerios antes de ir al Congreso. Para que entrara en vigor, es decir, para que las naciones iniciaran la implementación de las acciones, debían ratificarlo 50 países. La meta ya se cumplió, de hecho hay 83 en la actualidad. Colombia no lo ha ratificado aún. Puede demorar más o menos un año, porque son cuatro sesiones en el Congreso y hasta ahora solo se ha aprobado la primera.
¿Qué significa su ratificación?
Con la ratificación del Convenio de Minamata los países miembros no podrán importar mercurio. Hoy en día cualquier persona puede hacerlo. Te metes a Amazon y puedes comprar 30 gramos de mercurio, un kilo, lo que quieras te lo mandan a casa. Es legal y fácil. Una vez que llega el mercurio, se utiliza en minería legal e ilegal. Colombia no lo produce. No es solo que la minería use el mercurio, sino que es la que más lo utiliza. Aquí, el 50% termina en la industria minera. Los bombillos ahorradores también lo tienen, como las amalgamas dentales y los termómetros. El Convenio de Minamata establece planes para que las naciones dejen de fabricar estos productos, para que los reemplacen y, por supuesto, para que no haya más producción e importación de mercurio.
Después de China e Indonesia somos el tercer país del mundo que más daño genera por liberaciones de mercurio. ¿Cuál sería nuestra bahía de Minamata?
En WWF el trabajo sobre el mercurio en la región del Pacífico se ha hecho en el marco del proyecto GEF de Biodiversidad y Minería, que busca salvaguardar los ecosistemas de la costa Pacífica colombiana de los impactos que está generando la minería. En esa zona, más del 90% de la extracción de oro es ilegal. Sus consecuencias han sido devastadoras especialmente en las cuencas de los ríos Atrato y San Juan. Sin embargo, se encuentran afectaciones en la región Pacífica de los departamentos del Valle, Cauca, Nariño, Antioquia y Chocó.
¿Cómo se extrae el oro de estos territorios?
Se hace minería con retroexcavadoras y dragas. Los explotadores succionan el lecho del río con las dragas y estos sedimentos succionados pasan por unas rampas inclinadas que contienen el mercurio que amalgama el oro. Después, cogen este material para quemarlo. Evaporan el mercurio y así recuperan el oro. La minería del Pacífico, en su gran mayoría es de aluvión, lo cual quiere decir que está en los valles de inundación en los ríos. En estos valles de inundación estaban las terrazas de cultivos de las comunidades. Los mineros acaban con el río o lo que queda de él, y adicionalmente aumentan la sedimentación en detrimento del pescado. Ya no encuentras la misma cantidad de peces de hace unos años.
Usted viaja con alguna frecuencia al Chocó, ¿qué ha visto?
Chocó es un bosque húmedo tropical, como el Amazonas. No hay ganadería, por eso su principal fuente de consumo es el pescado, que en algunos casos está contaminado con mercurio. Este no es soluble en agua o tiene una solubilidad muy baja, por lo que, si tomas una muestra, es difícil detectarlo. Ese mercurio cae a los sedimentos del río y los peces más pequeños se lo comen. Luego vienen los peces más grandes, que son carnívoros y se comen a los peces más chiquitos. El mercurio se va bioacumulando en su sistema. Al final de la cadena alimenticia estamos nosotros. O sea que, cuando comemos un pescado, comemos todo el mercurio que este ha consumido.
Aparte de la bioacumulación del mercurio en el pescado, ¿de qué otro modo hay riesgo de contaminarse?
En los municipios mineros echan el mercurio a los sedimentos, que es donde está el oro. Después lo llevan a unos sitios que llaman fundidoras, donde evaporan el mercurio, que va al aire, y recuperan el oro. En Quibdó hay muchas de estas fundidoras ubicadas frente a escuelas, consultorios médicos y barrios. Llegas al centro y ves un montón de personas que inhalan este aire con altas concentraciones de mercurio. En las fundidoras se hace la fundición del oro que proviene de las minas legales e ilegales. Cuando se vende y se exporta, no hay una forma de trazar de dónde proviene. Un joyero en Suiza no puede saber su origen.
¿En la comunidad hay consciencia de esta situación?
Cada vez hay más, pero no es un problema exclusivo de los habitantes del Pacífico, porque finalmente en estas zonas en que se hace minería ilegal es donde se realiza pesca comercial. Mucho de ese pescado termina en otros lugares. Sin embargo, en las ciudades grandes uno come pescado pero puede encontrar más oferta gastronómica. La velocidad a la que ingirieres mercurio es más baja, mientras que en los municipios ribereños o marítimos del Pacífico están comiendo pescado la mayoría de veces. Hay mineros y gente de la comunidad que creen que la contaminación es puro cuento. El mercurio es un enemigo silencioso: empiezas a perder campo visual y, como dije anteriormente, afecta tu sistema nervioso.
¿Cómo se mide la concentración de mercurio en el cuerpo?
La Organización Mundial de la Salud sostiene que es peligroso estar por encima de dos partes por millón. Partes por millón es una medida de concentración. En Quibdó se han registrado personas con más de 100 partes por millón. El problema de una actividad ilegal, como la extracción de oro sin permiso, termina recayendo sobre el sistema de salud, que no está preparado para lidiar con este problema.
¿Hay manera de eliminar el mercurio del organismo?
Hay un procedimiento médico llamado quelación, que, en resumen, es un medicamento para que tu cuerpo elimine rápido el mercurio, pero es muy agresivo con los riñones y el hígado. Los que tienen una concentración muy alta son sometidos a este remedio. Si la concentración está entre dos y diez partes por millón, los médicos recomiendan dejar de comer pescado o intentar dejar los pescados carnívoros. Cuando haces mediciones a los peces en los ríos, encuentras que entre más arriba estén en la cadena alimenticia, es decir, entre más carnívoro sea el animal, tiene una concentración más alta de mercurio, pues este se acumula y se biomagnifica. El cuerpo lo elimina a una tasa muy baja y, si todos los días estás comiendo pescado, la probabilidad de que lo expulses es mínima.
"El mercurio es un enemigo silencioso: empiezas a perder campo visual y luego afecta tu sistema nervioso".
El atún es uno de los peces más carnívoros.
En la cadena trófica está bastante arriba, por eso bioacumula más mercurio.
¿Qué recomienda a los lectores?
Un consumidor de pescado de criadero, de pesca responsable, no tiene grandes concentraciones de mercurio. Yo me hice la prueba y tenía 3,7 partes por millón, o sea, estaba por encima de lo establecido por la OMS. Y eso que yo vivo en Bogotá. Mi ingesta de pescado no era muy alta. Insisto en que la clave es averiguar la procedencia del pescado. Las mujeres embarazadas y los niños pequeños deben tener una vigilancia mayor.
¿Deberíamos reducir el consumo de pescado en general?
Yo reduje el consumo de pescado del que no tenía certeza de su procedencia. Para el que vive en Bogotá, Medellín y Cali es fácil, porque tiene más opciones, pero en el andén del Pacífico se reducen las fuentes de proteína. Es importante saber que no solo es un tema que atañe a las personas que viven en las zonas mineras. Igual, el pescado se comercializa en el resto del país, porque el mercado está en las capitales. Hay que estar atento a los síntomas, no solo por el pescado, sino por otras fuentes de contaminación por mercurio. Si se te rompe un bombillo fluorescente, de los ahorradores, no es que te vayas a morir. En caso de que se te rompa, hay que ventilar un poco el lugar, sobre todo si hay niños. Hay que llevar estos bombillos a los contenedores especiales que hay en almacenes de cadena. Ninguno debería terminar en un relleno sanitario. Por ejemplo, las pilas contaminan los acuíferos cuando se empieza a descomponer la basura.
¿Hubo cambios en usted una vez que redujo la ingesta de pescado?
Un año después me volvieron a tomar la muestra y el resultado fue 0,87; es decir, no tenía una parte por millón. Si te hacen la prueba y tienes 30 o 40 partes por millón, debes ir al médico.
¿Qué tipo de prueba realizan en el laboratorio?
Hay distintos tipos de contaminación por mercurio. El que ingieres con el pescado es mercurio orgánico. Para determinar si tienes de contaminación de este tipo, te quitan un pedazo de pelo cerca de la nuca, para su posterior análisis. El mercurio que inhalas es inorgánico y, para saber la cantidad que tienes, deben hacerte un análisis en sangre y en orina.
¿Cuál es el efecto del mercurio en la selva chocoana? ¿Su daño es irreversible?
El impacto en el ambiente aún no se ha cuantificado, pero es grande. El daño a los ríos es enorme y las implicaciones ambientales en un ecosistema como estos, donde además hay tantas especies que solo existen allí, son graves. Adicionalmente, aún no sabemos, como país, cuánto nos costará remediarlo ni de dónde saldrán esos recursos.
¿La situación es para alarmarse?
En las zonas mineras es necesario tomar conciencia de las implicaciones de la utilización del mercurio; ese es el mensaje que debemos trabajar, más que hacerse la prueba. Cada vez hay más información disponible. La gente antes decía "eso no es tan grave, mire que estamos comiendo pescado y aquí estamos”. Si vas a Quibdó, en algunos restaurantes te ofrecen pescado de criadero, lo que antes no era común. Ahora lo hacen justamente por la contaminación con mercurio. Sale costoso.
¿La solución es la ratificación del Convenio de Minamata?
Una de las cosas buenas que tiene la ratificación del convenio es la asistencia técnica. Puedes compartir experiencias con otros países que tengan la misma problemática. Compartes información para saber cómo le sacas el mercurio al río. Es un problema que no ha sido estudiado a profundidad. Hay un ejemplo de biorremediación: siembras alguna planta que tenga afinidad con el mercurio, pero luego tienes que llevarla a una celda especial, por tratarse de un residuo peligroso, como las baterías y los bombillos. Estoy hablando de una planta que no sea invasora, porque, de lo contrario, cambiarías un problema por otro; también puede que la planta le guste a un animal de la zona, y eso sería un problema, porque terminarías contaminando a esta especie con mercurio; y no puedes quemarla porque liberarías el mercurio a la atmósfera.
¿Hay una ley colombiana que enfrente el uso y el abuso del mercurio?
Existe la Ley 1658, conocida como Ley de Mercurio, que limita a cero la utilización de esta sustancia en minería a partir del 2018. De igual modo, apunta a que en el 2023 no se utilice en otras actividades, como la fabricación de bombillos y de amalgamas dentales. La ley es un complemento del Convenio de Minamata y establece plazos para la minería y a la industria. Por su parte, el convenio involucra también elementos como termómetros y compuestos con mercurio añadido. Uno creería que, cuando se terminen de establecer los plazos que exige la ley y entre en vigencia el convenio, se empezará a reducir la utilización indiscriminada de mercurio.
Foto: David Schwarz.