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Desde que Juan Pablo Montoya se convirtió en figura del automovilismo mundial, a finales de los años 90, muchos niños colombianos comenzaron a soñar con ser pilotos profesionales.
Hoy, decenas de jóvenes talentos recorren el duro camino hacia la gloria y disputan una silla en las categorías de formación en Europa y Estados Unidos.
Y en ese grupo hay varias mujeres, entre las que se destaca Tatiana Calderón, una hermosa bogotana que cumplirá 19 años el próximo 10 de marzo, quien quedó sexta el año pasado en la temporada de la Star Mazda, en Norteamérica, y en 2012 participará, con el equipo de Emilio de Villota Motorsport, en el European Open de Fórmula Tres.
A pesar de su juventud, ya es una experta al volante. Maneja competitivamente desde los ocho años, cuando su papá, Alberto, le compró un kart.
“Me gustó y me di cuenta de que lo hacía bien. Después comencé a competir y a obtener buenos resultados, hasta que decidí que esto era lo mío, que quiero llegar lejos en el automovilismo, porque es mi vida. Por ahora no tengo un plan B para mi futuro”, comenta apasionada antes de admitir que el hecho de ser mujer en un ambiente generalmente masculino llama la atención, pero no es ninguna ventaja.
Ha ganado cuatro títulos nacionales de kartismo y participado en tres mundiales de categoría Rotax. Logró en 2008 el título de la región este de los Estados Unidos y fue subcampeona del Radical European Challenge en 2009.
“La verdad es que pasé muy rápido de los karts a los autos de fórmula y había muchas cosas que no sabía. El año pasado en la Star Mazda aprendí muchísimo. Mi confianza cambió, pues trabajé mucho en el conocimiento del carro, en la técnica del frenado, en la interpretación de los datos estadísticos, la lectura de los gráficos, cosas que antes no sabía”, explica emocionada la piloto, quien es apoyada por Kia y JAC Motors.
Eso lo saben sus padres, quienes más la han respaldado en su carrera. “Siento que puedo llegar a vivir de esto. Correr en la Fórmula Uno es muy difícil, aunque no imposible, pero hay otras categorías que también son interesantes. En Estados Unidos hay muchas opciones, porque en Europa el círculo es más cerrado”.
Sin embargo, su talento le abrió las puertas del European Open de Fórmula Tres, pues brilló con luz propia en las carreras de prueba que corrió la temporada pasada.
“En Colombia hay mucho talento, pero para mejorar hay que salir. Uno no se puede quedar compitiendo 20 años en el mismo autódromo”, dice. Luego aclara que “en la pista no hay diferencias entre hombres y mujeres. Tal vez nosotras tenemos más instinto de conservación que ellos, nos cuidamos más”.
Sin embargo, es agresiva en carrera y está dispuesta a darlo todo por conquistar sus sueños. “Tengo tiempo y ahora estoy dedicada ciento por ciento a esto. Sé que tengo oportunidades a la vuelta de la esquina y no las voy a desaprovechar”.