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El Tour de Francia, la carrera más emblemática del ciclismo mundial, afronta a partir de mañana su última semana de competencia. La lucha por la punta la han protagonizado el líder Jonas Vingegaard (Jumbo-Visma) y Tadej Pogacar, su principal perseguidor.
Segundo a solo diez segundos del ‘maillot’ amarillo, el esloveno busca revancha tras haber cedido la corona el año pasado al danés. En entrevista con la AFP el pedalista del UAE Team Emirates confirmo que habría “firmado” tener esta situación a estas alturas de la prueba.
Si le hubieran dicho antes de la salida que estaría a diez segundos del líder antes de la tercera semana, ¿qué habría hecho?
“Habría firmado ! (...) Tras dos semanas de carrera, la falta de competición (debido a sus fracturas en una muñeca) no cuenta. Mi muñeca me duele todavía, pero no pedaleamos con las manos. Y las piernas están bien”.
Parece que usted sufre menos por el calor que el año pasado y que ataca menos también.
“Cada año, voy encajando mejor las altas temperaturas. Pero no se puede decir que me gusten mucho las subidas de media hora a una temperatura de entre 35 y 40°C. (...) El año pasado tenía tanta desventaja que quería de cualquier manera acercarme e intenté acciones estúpidas.
🎽Jerseys after Stage 15 / Maillots distinctifs après l’étape 15
— Tour de France™ (@LeTour) July 16, 2023
💛Jonas Vingegaard
💚@JasperPhilipsen
🔴@giuliocicco1
👶@TamauPogi #TDF2023 pic.twitter.com/mQvaveqb38
Este año, estoy en otra situación, más cerca en la clasificación general. No coloco minas en todos los sitios. Solo una vez, para ganar (en Cauterets-Cambasque), me empleé a fondo para recuperar algunos segundos. La situación es diferente a la del año pasado”.
¿Qué se puede esperar de esta tercera semana?
“Dependerá mucho de la contrarreloj (del martes). Pero seguro que en las etapas del Col de la Loze, el miércoles, y del Markstein, el sábado, no habrá piedad. Esas etapas decidirán el Tour. (...) Mirando el perfil, la 17ª etapa del miércoles parece la más terrible, pero la vigésima y penúltima etapa, el sábado, también influirán en el resultado final.
Puede ser la más dura del Tour al final de todo. Si sigue esta lucha apretada por el liderato y hay una diferencia a superar, pueden pasar muchas cosas. Puede haber ataques desde muy temprano, que harán más difícil la etapa”.
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