Santiago Buitrago y su sensacional podio en la Lieja-Bastoña-Lieja
El ciclista bogotano de 23 años sigue demostrando su versatilidad y rinde tanto en carreras de tres semanas como en clásicas de un día.
Por nivel, historia y tradición, hay cinco competencias de un día que gradúan a los ciclistas como leyendas. Después de las tres grandes carreras por etapas: Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España, los títulos de los cinco monumentos son los más deseados por la mayoría de los pedalistas. Recorridos largos, quebrados, por carreteras secundarias y muchas veces bajo condiciones climáticas adversas, porque se disputan entre el final del invierno y el comienzo de la primavera europea, hacen de esas pruebas verdaderos martirios para los participantes.
Lea también: Martha Bayona se colgó dos medallas de plata en la Copa Mundo de Pista, en Canadá
Y aunque hasta hace apenas una década los colombianos que corrían en equipos internacionales ni siquiera participaban, poco a poco los escarabajos han adquirido protagonismo. Tanto que el tercer lugar que consiguió este domingo Santiago Buitrago en la Lieja-Bastoña-Lieja, en Bélgica, no fue del todo una sorpresa.
El bogotano de 23 años escoltó nada menos que al belga Remco Evenepoel y al británico Tom Pidcock, dos especialistas. Fue la sexta ocasión en la que un colombiano subió al podio en un monumento. El primero en lograrlo fue Rigoberto Urán, tercero en el Giro de Lombardía en 2008, 2012 y 2016, el año de la única victoria de los nuestros, la de Esteban Chaves. En esa misma competencia Egan Bernal fue tercero en 2019. Todavía no hemos logrado figuración importante en las otras tres grandes clásicas: la Milán-San Remo, el Tour de Flandes y la París-Roubaix.
“Vamos paso a paso”
Santiago Buitrago —el segundo de tres hermanos: Gissel Vanessa es la mayor y Josué, el pequeño— heredó el amor por el ciclismo de su padre Héctor Gustavo y su tío Pedro, dos boyacenses apasionados por el deporte y admiradores de Lucho Herrera, quienes le inculcaron el amor por las bicicletas.
Lea también: Millonarios sumó en Santa Marta y sigue cerca de la punta de la Liga BetPlay
Santiago comenzó a correr a los 12 años. Subía al Alto del Vino y al de Patios, o hacía circuitos de ciclomontañismo en el sector de Tuna Alta, en Suba, cerca de su casa. Mientras rodaba bajo la lluvia se imaginaba las narraciones radiales y hasta se emocionaba cuando simulaba un embalaje y cruzaba la meta levantando las manos.
Después se vinculó al equipo de la Fundación Esteban Chaves, en donde se dio cuenta de que en verdad tenía pasta de campeón. Estuvo una temporada en la escuadra de AV Villas y fue fichado por el Team Cinelli italiano. Con apenas un año en el Viejo Continente, el Bahrain-McLaren se fijó en él y lo fichó en 2020. El año pasado ganó una etapa y finalizó segundo en la clasificación general del Saudi Tour antes de presentarse ante la élite del ciclismo mundial al lograr una victoria parcial en el Giro de Italia.
Esta temporada fue tercero en la Vuelta a Andalucía y ahora tercero en la Lieja-Bastoña-Lieja justo dos semanas antes del comienzo del Giro, su gran objetivo de la campaña.
Lea también: Voces desde el tablón, retrato de las barras bravas en Colombia
“Estoy muy feliz con mi actuación, sigo en muy bien nivel, pero vamos paso a paso. Hay que seguir trabajando y las victorias llegarán”, dijo este domingo al bajar del podio en Lieja.
Con calma, mesura y madurez, el bogotano comienza a comprobar que no solo tiene cómo estar al lado de los mejores, sino con qué ganarles. Eso sí, prefiere mantener un perfil bajo. “Prefiero ir paso a paso. Vamos por buen camino, pero todavía hay mucho por aprender. Ya veremos qué pueda pasar en el futuro”, dice.
🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador
Por nivel, historia y tradición, hay cinco competencias de un día que gradúan a los ciclistas como leyendas. Después de las tres grandes carreras por etapas: Tour de Francia, Giro de Italia y Vuelta a España, los títulos de los cinco monumentos son los más deseados por la mayoría de los pedalistas. Recorridos largos, quebrados, por carreteras secundarias y muchas veces bajo condiciones climáticas adversas, porque se disputan entre el final del invierno y el comienzo de la primavera europea, hacen de esas pruebas verdaderos martirios para los participantes.
Lea también: Martha Bayona se colgó dos medallas de plata en la Copa Mundo de Pista, en Canadá
Y aunque hasta hace apenas una década los colombianos que corrían en equipos internacionales ni siquiera participaban, poco a poco los escarabajos han adquirido protagonismo. Tanto que el tercer lugar que consiguió este domingo Santiago Buitrago en la Lieja-Bastoña-Lieja, en Bélgica, no fue del todo una sorpresa.
El bogotano de 23 años escoltó nada menos que al belga Remco Evenepoel y al británico Tom Pidcock, dos especialistas. Fue la sexta ocasión en la que un colombiano subió al podio en un monumento. El primero en lograrlo fue Rigoberto Urán, tercero en el Giro de Lombardía en 2008, 2012 y 2016, el año de la única victoria de los nuestros, la de Esteban Chaves. En esa misma competencia Egan Bernal fue tercero en 2019. Todavía no hemos logrado figuración importante en las otras tres grandes clásicas: la Milán-San Remo, el Tour de Flandes y la París-Roubaix.
“Vamos paso a paso”
Santiago Buitrago —el segundo de tres hermanos: Gissel Vanessa es la mayor y Josué, el pequeño— heredó el amor por el ciclismo de su padre Héctor Gustavo y su tío Pedro, dos boyacenses apasionados por el deporte y admiradores de Lucho Herrera, quienes le inculcaron el amor por las bicicletas.
Lea también: Millonarios sumó en Santa Marta y sigue cerca de la punta de la Liga BetPlay
Santiago comenzó a correr a los 12 años. Subía al Alto del Vino y al de Patios, o hacía circuitos de ciclomontañismo en el sector de Tuna Alta, en Suba, cerca de su casa. Mientras rodaba bajo la lluvia se imaginaba las narraciones radiales y hasta se emocionaba cuando simulaba un embalaje y cruzaba la meta levantando las manos.
Después se vinculó al equipo de la Fundación Esteban Chaves, en donde se dio cuenta de que en verdad tenía pasta de campeón. Estuvo una temporada en la escuadra de AV Villas y fue fichado por el Team Cinelli italiano. Con apenas un año en el Viejo Continente, el Bahrain-McLaren se fijó en él y lo fichó en 2020. El año pasado ganó una etapa y finalizó segundo en la clasificación general del Saudi Tour antes de presentarse ante la élite del ciclismo mundial al lograr una victoria parcial en el Giro de Italia.
Esta temporada fue tercero en la Vuelta a Andalucía y ahora tercero en la Lieja-Bastoña-Lieja justo dos semanas antes del comienzo del Giro, su gran objetivo de la campaña.
Lea también: Voces desde el tablón, retrato de las barras bravas en Colombia
“Estoy muy feliz con mi actuación, sigo en muy bien nivel, pero vamos paso a paso. Hay que seguir trabajando y las victorias llegarán”, dijo este domingo al bajar del podio en Lieja.
Con calma, mesura y madurez, el bogotano comienza a comprobar que no solo tiene cómo estar al lado de los mejores, sino con qué ganarles. Eso sí, prefiere mantener un perfil bajo. “Prefiero ir paso a paso. Vamos por buen camino, pero todavía hay mucho por aprender. Ya veremos qué pueda pasar en el futuro”, dice.
🚴🏻⚽🏀 ¿Lo último en deportes?: Todo lo que debe saber del deporte mundial está en El Espectador