El saldo en rojo de la Liga Femenina 2021
Basados en un informe publicado por Acolfutpro, presentamos un balance de lo que fue la quinta edición del campeonato y hablamos con algunos expertos sobre las estadísticas negativas que dejó este torneo.
Paula Casas Mogollón
Andrés Osorio Guillott
Casi que a regañadientes se reconoce que lo importante es que siga viva la Liga Femenina en Colombia. Pese al retroceso en la edición del presente año -ganada por el Deportivo Cali-, se mantiene un espacio en el calendario que obliga a los clubes, o eso es lo que se pretende, a tener a mujeres futbolistas en su plantel y así continuar trabajando en ese objetivo común de fortalecer y mejorar las garantías del torneo y a su vez las condiciones para que las personas que le apuestan al desarrollo del campeonato puedan vivir de esta competencia.
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Casi que a regañadientes se reconoce que lo importante es que siga viva la Liga Femenina en Colombia. Pese al retroceso en la edición del presente año -ganada por el Deportivo Cali-, se mantiene un espacio en el calendario que obliga a los clubes, o eso es lo que se pretende, a tener a mujeres futbolistas en su plantel y así continuar trabajando en ese objetivo común de fortalecer y mejorar las garantías del torneo y a su vez las condiciones para que las personas que le apuestan al desarrollo del campeonato puedan vivir de esta competencia.
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Fernando Jaramillo, presidente de la Dimayor, dijo hace un mes que “no ha sido fácil encontrar patrocinio para el fútbol femenino. He venido trabajando en eso desde que llegué a la Dimayor y realmente al día de hoy, amén del apoyo del Gobierno que nos ha dado y de unos recursos de la Federación y de nuestro patrocinador BetPlay, pues no hemos podido encontrar de verdad alguien del sector privado que crea en el proyecto del fútbol femenino”. Jaramillo, además, explicó que el 13 de febrero el Ministerio del Deporte entregó $1.500 millones para la Liga Femenina, de los cuales la Federación Colombiana de Fútbol devolvió $600 millones. “Creo que la Liga Femenina tiene que ser sostenible en el tiempo... No necesariamente debemos depender de los recursos del Ministerio”, apuntó.
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Y pese a esa dificultad que determina una buena parte del buen desarrollo de esta Liga, este año uno de los pocos avances se dio gracias al apoyo de Bavaria, bajo la marca Águila, pues este respaldo de la empresa privada significó el aporte del “50 % de sus recursos destinados a la promoción y activación del fútbol profesional colombiano para la visibilización exclusiva del fútbol femenino”, decía el comunicado de la empresadonde se informó que, además, generaría “comunicación equitativa, exposición y cubrimiento del fútbol masculino y femenino”, que se vio con la transmisión de la mayoría de los partidos en televisión.
Sebastián González, abogado deportivo y representante, dijo que “sin el interés de entes privados es muy difícil consolidar una Liga que garantice los derechos laborales de las futbolistas, pues sin esos recursos los equipos no podrán pagar prestaciones sociales, primas, cesantías y demás condiciones naturales de un trabajador. Así que hay que modelar cosas de otros países, como México por ejemplo, pues allá hay patrocinadores independientes que solo apoyan la Liga Femenina, lo que promueve la visibilidad del campeonato”.
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Patricia Vanegas, quien fue parte de la primera selección de Colombia femenina y es experta en marketing deportivo, afirmó que “el modelo ya está, ya es exitoso en masculino y puede ser exitoso en femenino. Aquí el tema o las trabas están internamente, están en cómo se administran esos recursos que se consiguen, qué montos se están vendiendo y cuál es la expectativa de ingresos que tiene la Dimayor del torneo, porque los clubes están a la espera realmente de que se venda un torneo para que les den a ellos unos recursos para mantener el proyecto”. Uno de los objetivos de los equipos, en cuanto a la parte financiera, es conseguir un proyecto a mediano o largo plazo, en el que exista una financiación completa, como se ha vendido el fútbol masculino tradicionalmente: “Los proyectos son a cinco o diez años, entonces esos patrocinios hacen una sostenibilidad importante. En el femenino no sé por qué no son de dominio público los contratos que se han hecho tanto con Águila como con la Liga BetPlay”, apuntó.