Millonarios venció a Envigado y se afianza dentro de los ocho de la Liga

El gol es un éxtasis. Eduardo Galeano lo definió como el orgasmo del fútbol. Es delirio. La razón por la que el hincha va al estadio a alentar. Llegar a él es toda una epopeya. Muchas veces se impone el orden táctico, en el que prima el cero en la portería. Todos los equipos sufren para llegar al gol. Por eso hay que aprovechar cada espacio, cada oportunidad como si fuera única. Eso fue lo que hizo Ayron del Valle en la noche de este viernes, que le sirvió a Millonarios para sumar su cuarta victoria consecutiva como local en la Liga Águila. Todas por el mismo marcador: 1-0.

El delantero del cuadro albiazul estaba parado en el lugar correcto, en el momento preciso. Al minuto 53 Macallister Silva levantó un tiro libre de costado, peinó Andrés Cadavid, bajó Matías de los Santos, quien remató de derecha. El balón se estrelló rebeldemente con el palo y el rebote le cayó a la pierna derecha del número 16. Del Valle no perdonó. De primera mandó el balón al fondo de la red y puso a vibrar las gargantas de los miles de hinchas del equipo capitalino.

Ese tanto fue el premio a la constancia, a la insistencia. A lo largo del primer tiempo Millonarios fue el equipo que propuso, el de las ideas, el que más lo intentó. Maxi Núñez fue el jugador que tuvo las oportunidades más claras: al minuto 15 tras una mala salida de Envigado, Felipe Banguero metió un centro que le quedó al argentino. Intentó sorprender al arquero Santiago Londoño, pero el guardameta estaba bien ubicado y sin mayores inconvenientes paró el disparo del delantero. Después al minuto 37, se juntaron Harold Mosquera y Macallister Silva. Este último filtró un balón para Núñez, quien solo frente al portero definió por encima de los tres palos.    

El equipo capitalino era el de la posesión, pero a pesar de esto Envigado supo pararse atrás. Con una doble línea de cuatro evitó que el dominio de los locales se tradujera en el marcador. Además de las llegadas del argentino, los naranjas no permitieron más libertades. Sin embargo, cuando tenían el balón no eran peligrosos, lo perdían rápidamente. Apenas se acercaron en una oportunidad. Fue al minuto cuatro por intermedio de Cristian Arrieta. El lateral no conectó bien y la pelota llegó fácil a las manos de Vikonis.

Después del gol de Millonarios, Envigado se sacudió. Demostró que tenía con qué complicar a los embajadores. Lo hicieron. Se acercaron con Michael López y Gerardo Reyes. El equipo se soltó, empezó a generar peligro, aprovechó la ventaja que le dio el cuadro azul, que perdió la posesión del balón. La doble línea de cuatro se quebró totalmente. Los embajadores se metieron atrás y buscaron sorprender por intermedio del contragolpe. Así generaron dos aproximaciones importantes, pero ambas terminaron por fuera de los tres palos. 

El encuentro finalizó 1-0 para los dirigidos por Miguel Ángel Russo, quienes llegaron a 22 puntos en la Liga Águila y se ubican en la cuarta posición parcialmente. Su próximo encuentro será contra el Atlético Huila en Neiva. Por su parte, Envigadosufrió su segunda derrota consecutiva se mantiene en la décima posición con 17 puntos, a uno del octavo. Números que pueden variar con el pasar de la jornada, que tiene como partido aplazado el encuentro entre Tolima y Medellín.

El gol es un éxtasis. Eduardo Galeano lo definió como el orgasmo del fútbol. Es delirio. La razón por la que el hincha va al estadio a alentar. Llegar a él es toda una epopeya. Muchas veces se impone el orden táctico, en el que prima el cero en la portería. Todos los equipos sufren para llegar al gol. Por eso hay que aprovechar cada espacio, cada oportunidad como si fuera única. Eso fue lo que hizo Ayron del Valle en la noche de este viernes, que le sirvió a Millonarios para sumar su cuarta victoria consecutiva como local en la Liga Águila. Todas por el mismo marcador: 1-0.

El delantero del cuadro albiazul estaba parado en el lugar correcto, en el momento preciso. Al minuto 53 Macallister Silva levantó un tiro libre de costado, peinó Andrés Cadavid, bajó Matías de los Santos, quien remató de derecha. El balón se estrelló rebeldemente con el palo y el rebote le cayó a la pierna derecha del número 16. Del Valle no perdonó. De primera mandó el balón al fondo de la red y puso a vibrar las gargantas de los miles de hinchas del equipo capitalino.

Ese tanto fue el premio a la constancia, a la insistencia. A lo largo del primer tiempo Millonarios fue el equipo que propuso, el de las ideas, el que más lo intentó. Maxi Núñez fue el jugador que tuvo las oportunidades más claras: al minuto 15 tras una mala salida de Envigado, Felipe Banguero metió un centro que le quedó al argentino. Intentó sorprender al arquero Santiago Londoño, pero el guardameta estaba bien ubicado y sin mayores inconvenientes paró el disparo del delantero. Después al minuto 37, se juntaron Harold Mosquera y Macallister Silva. Este último filtró un balón para Núñez, quien solo frente al portero definió por encima de los tres palos.    

El equipo capitalino era el de la posesión, pero a pesar de esto Envigado supo pararse atrás. Con una doble línea de cuatro evitó que el dominio de los locales se tradujera en el marcador. Además de las llegadas del argentino, los naranjas no permitieron más libertades. Sin embargo, cuando tenían el balón no eran peligrosos, lo perdían rápidamente. Apenas se acercaron en una oportunidad. Fue al minuto cuatro por intermedio de Cristian Arrieta. El lateral no conectó bien y la pelota llegó fácil a las manos de Vikonis.

Después del gol de Millonarios, Envigado se sacudió. Demostró que tenía con qué complicar a los embajadores. Lo hicieron. Se acercaron con Michael López y Gerardo Reyes. El equipo se soltó, empezó a generar peligro, aprovechó la ventaja que le dio el cuadro azul, que perdió la posesión del balón. La doble línea de cuatro se quebró totalmente. Los embajadores se metieron atrás y buscaron sorprender por intermedio del contragolpe. Así generaron dos aproximaciones importantes, pero ambas terminaron por fuera de los tres palos. 

El encuentro finalizó 1-0 para los dirigidos por Miguel Ángel Russo, quienes llegaron a 22 puntos en la Liga Águila y se ubican en la cuarta posición parcialmente. Su próximo encuentro será contra el Atlético Huila en Neiva. Por su parte, Envigadosufrió su segunda derrota consecutiva se mantiene en la décima posición con 17 puntos, a uno del octavo. Números que pueden variar con el pasar de la jornada, que tiene como partido aplazado el encuentro entre Tolima y Medellín.