"Antes estaba preso de las apariencias, ahora soy libre": Jhon Viáfara
El exfutbolista de la selección colombiana, campeón de la Copa Libertadores con Once Caldas, concedió una entrevista antes de ser extraditado este jueves a los Estados Unidos hablando de su vida en la cárcel. Está escribiendo un libro.
Redacción deportes
Este jueves será extraditado a Estados Unidos el exfutbolista del Once Caldas y de la Selección Colombia Jhon Viáfara. El exjugador es solicitado por la Corte Distrital para el Distrito Este de Texas para que responda por dos cargos de concierto para fabricar y distribuir drogas hacia ese país.
El exjugador, que deberá responder ante una Corte Distrital de Texas por supuestamente hacer parte de una red de tráfico de drogas, antes de su extradición, dialogó con el canal Win Sports.
¿Cómo es el día a día de Jhon Viáfara?
Me levanto 7:30 a.m, que es la contada, hasta las 9:00 vamos al gimnasio y tomamos el desayuno. Luego jugamos un torneo de fútbol que hemos organizado. Todo el día jugamos, tomamos el almuerzo después del día hasta las cuatro de la tarde que es la contada. Y tipo 6:30 p.m volvemos a la celda y yo me pongo a leer y a escribir mi libro.
¿Qué ha sido lo más difícil de este proceso?
La familia y las dietas alimenticias que se pierden acá. Toda la vida he vivido bajo un régimen, unas concentraciones. Acá lo he aplicado: ser un buen compañero, buen amigo, a no pasar las líneas del manual de convivencia. Extraño la alimentación que uno no tiene lujos.
¿Qué significa la libertad para usted?
Preso estuve, libre estoy. Ahora ando en chanclas, en la calle no podía hacer eso. En la calle estaba preso de las apariencias, de no poder sentarme con alguien. Aparentando algo que no estaba a mí. Pero tocaba que aferrarse a un sistema, acá sí tengo esa libertad.
¿Se ha reencontrado con Dios?
Ese fue mi error, me dejé llevar por la fama, por el sistema. Dios estaba en un tercer lugar, ahora no. Ahora una aprecia el amor, una botella de agua y eso es lo más bonito que he aprendido acá. Dios ha estado conmigo y en este lugar no es la excepción.
¿De qué trata el libro que está escribiendo?
Hablo de mi vida, las llevo al presente que estoy viviendo. Hago muchas comparaciones, cuando no apreciabas un amigo, lo más esencial que es tener el agua afuera. Acá te preocupas por eso, de que no te falte agua. Son muchos ejemplos, de gente y personajes que nunca pensé conocer. Compartir celda con hombres que han marcado historia, de guerra, batalla. Después de compartir camerino con Messi y ahora con alguien que ha estado en guerra en nuestro país y que él me cuente sus historias. Son cosas que debo contarle al país.
¿Está a horas de ser extraditado, también hablará de eso en el libro?
Claro, a mí no me ha pesado nada. Cuando he jugado mal lo he dicho, cuando me he equivocado, también. Nunca me ha pesado la lengua.
¿Ve fútbol en la cárcel?
Acá gracias a Dios teníamos televisor. Me han tratado muy bien, también debo resaltar el trato de mis compañeros y la guardia, me trataron como un ser humano. Sigo viendo la liga, nos dieron una hora más para ver la final del América. Nos divertimos mucho, una experiencia bonita.
Este jueves será extraditado a Estados Unidos el exfutbolista del Once Caldas y de la Selección Colombia Jhon Viáfara. El exjugador es solicitado por la Corte Distrital para el Distrito Este de Texas para que responda por dos cargos de concierto para fabricar y distribuir drogas hacia ese país.
El exjugador, que deberá responder ante una Corte Distrital de Texas por supuestamente hacer parte de una red de tráfico de drogas, antes de su extradición, dialogó con el canal Win Sports.
¿Cómo es el día a día de Jhon Viáfara?
Me levanto 7:30 a.m, que es la contada, hasta las 9:00 vamos al gimnasio y tomamos el desayuno. Luego jugamos un torneo de fútbol que hemos organizado. Todo el día jugamos, tomamos el almuerzo después del día hasta las cuatro de la tarde que es la contada. Y tipo 6:30 p.m volvemos a la celda y yo me pongo a leer y a escribir mi libro.
¿Qué ha sido lo más difícil de este proceso?
La familia y las dietas alimenticias que se pierden acá. Toda la vida he vivido bajo un régimen, unas concentraciones. Acá lo he aplicado: ser un buen compañero, buen amigo, a no pasar las líneas del manual de convivencia. Extraño la alimentación que uno no tiene lujos.
¿Qué significa la libertad para usted?
Preso estuve, libre estoy. Ahora ando en chanclas, en la calle no podía hacer eso. En la calle estaba preso de las apariencias, de no poder sentarme con alguien. Aparentando algo que no estaba a mí. Pero tocaba que aferrarse a un sistema, acá sí tengo esa libertad.
¿Se ha reencontrado con Dios?
Ese fue mi error, me dejé llevar por la fama, por el sistema. Dios estaba en un tercer lugar, ahora no. Ahora una aprecia el amor, una botella de agua y eso es lo más bonito que he aprendido acá. Dios ha estado conmigo y en este lugar no es la excepción.
¿De qué trata el libro que está escribiendo?
Hablo de mi vida, las llevo al presente que estoy viviendo. Hago muchas comparaciones, cuando no apreciabas un amigo, lo más esencial que es tener el agua afuera. Acá te preocupas por eso, de que no te falte agua. Son muchos ejemplos, de gente y personajes que nunca pensé conocer. Compartir celda con hombres que han marcado historia, de guerra, batalla. Después de compartir camerino con Messi y ahora con alguien que ha estado en guerra en nuestro país y que él me cuente sus historias. Son cosas que debo contarle al país.
¿Está a horas de ser extraditado, también hablará de eso en el libro?
Claro, a mí no me ha pesado nada. Cuando he jugado mal lo he dicho, cuando me he equivocado, también. Nunca me ha pesado la lengua.
¿Ve fútbol en la cárcel?
Acá gracias a Dios teníamos televisor. Me han tratado muy bien, también debo resaltar el trato de mis compañeros y la guardia, me trataron como un ser humano. Sigo viendo la liga, nos dieron una hora más para ver la final del América. Nos divertimos mucho, una experiencia bonita.