Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
El pasado 2 de junio, luego de 31 años, Francisco Maturana volvió en un mar de ilusión al primer club que dirigió. Tras cinco meses pálidos al mando del Once Caldas, el entrenador chocoano fue destituido de su cargo.
“La junta directiva ha decidido de manera unilateral dar por terminado el contrato de trabajo suscrito con el profesor Francisco Maturana García a partir de la fecha. Para la institución es motivo de orgullo haber tenido al frente del equipo a un hombre de sus cualidades humanas y profesionales, que tanto le han aportado al fútbol colombiano”, dicta el comunicado oficial del club.
“Soy consecuente con mi discurso y fiel a mis principios. Yo no renuncié, a mí me sacaron, me echaron o como lo quieran llamar”, señaló en rueda de prensa Francisco Maturana.
Desde el comienzo no se veía un buen ambiente entre el director técnico, la directiva y el plantel, pues luego de un mes de trabajo el oriundo en Quibdó aseguró en rueda de prensa que “el producto no es digerible, no me siento bien. Entrar en detalles sería un acto de deslealtad, tanto con los jugadores como con los directivos. En el momento que yo vine estaba ilusionado con un proyecto de éxito. Al principio, con el presidente hablamos de refuerzos como Adrián Ramos, Rodallega o ‘Teo’, me fui emocionando; pero esto es lo que hay”.
Herney Duque y Juan Carlos Henao estarán al frente del equipo s en la última jornada de la Liga Águila.
Maturana fue el entrenador del primer equipo colombiano que ganó la Copa Libertadores, Atlético Nacional, en 1989. Además, comandó una de las mejores selecciones Colombia de la historia: el recordado equipo de la década del 90. Y fue campeón con el combinado tricolor de la Copa América de 2001. También ganó el rentado doméstico con el América de Cali, en 1992.
Atrás quedó su gran hoja de vida, que se vio opacada por el bajo nivel del Once Caldas. Maturana se acaba de convertir en el noveno técnico, de los 20 que empezaron la Liga Águila, en dejar su cargo.