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No mucha expectativa había general el debut del Júnior de Barranquilla en la Copa Libertadores de América. Ni si quiera sus hinchas llenaron las tribunas del estadio Metropolitano de Barranquilla. Es como si supieran cómo iba a ser el final. Al frente, el campeón de Brasil, el Palmeiras, el mismo equipo que en su última visita a esa cancha consiguió una goleada 0-3. Y esta vez nuevamente los brasileños se llevaron los tres puntos. Ganaron 0-2 gracias a un tanto de Gustavo Scarpa y otro de Marcos Rocha.
La idea inicial del técnico Luis Fernando Suárez fue la de un equipo ofensivo, con dominio de balón y que metiera en su propio arco al rival. Por eso, en la mitad de la cancha, ubicó al argentino Fabian Sambueza, al chileno Matías Fernández y al colombiano Luis Díaz. Delante de ellos, el delantero Teófilo Gutiérrez. Una alineación agresiva, como para buscar grandes cosas en el debut.
Pero cuando parecía que Júnior iba construyendo paso a paso el triunfo, la defensa falló y al minuto 11 fue sorprendida en un rápido ataque de los brasileños, que terminaron anotando por un derechazo dentro del área de Gustavo Scarpa.
Júnior intentó reaccionar. Le apostó a su estilo de los últimos tiempos, el del toque, la movilidad y el buen trato del balón. Sin embargo, falló en los últimos metros. El más incisivo fue Luis Díaz, mientras que Fernández, Sambueza y Teo, no estuvieron en su noche.
De hecho, cuando más se necesitaba de la experiencia de Teo, falló y en un acto infantil terminó haciendo una dura falta sin balón dentro del área de Palmeiras y vio la tarjeta roja. Así que los costeños se quedaron con 10 hombres a falta de 15 minutos por jugar. Perdían y estaban con uno menos.
Pero la posibilidad del empate estaba vivía, por eso el técnico Suárez insistió con el juego ofensivo y metió a Palmeiras en su arco, sin embargo, en un contragolpe, el equipo dirigido por Luis Felipe Scolari encontró el 2-0 final, tras asistencia de Miguel Borja y gol de Marcos Rocha.
Júnior comenzó mal, perdió en casa y eso es algo que en este tipo de torneos no se puede permitir. Sin embargo, hay mucho por recorrer y tiempo por corregir. Lo cierto es que una cosa es la Liga local y otra la Copa Libertadores, en la que se enfrentan equipos tan poderosos como Palmeiras, que aunque no tenga grandes nombres, rimbombantes, es una potencia del fútbol de su país.
El próximo miércoles 13 de marzo, Júnior visitará a San Lorenzo de Argentina, en Buenos Aires, por su parte, Palmeiras recibirá a Melgar de Perú.