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El delantero colombiano venía de jugar un año en el Villarreal, club en el que estuvo cedido por el dueño de sus derechos deportivos, el Atlético de Madrid. Con el submarino amarillo anotó cuatro goles en treinta partidos repartidos en la liga española y la Europa League, pero su desempeño no logró convencer al técnico Diego Pablo Simeone para dejarlo en el equipo colchonero.
Después de haber llegado a Europa, volver a Suramérica parecía un retroceso, a pesar del prestigio y la tradición de su nuevo club. Pero el jugador nacido en Barranquilla, profesional desde 2013 con el Deportivo Cali, asumió el reto como la oportunidad perfecta para triunfar en un país que respira fútbol y en el que a los jugadores se les exige, especialmente a los extranjeros.
Y a punta de goles se ha ganado el cariño de la afición y el respeto de sus colegas. Tanto que se convirtió en el máximo anotador en la era del técnico Marcelo Gallardo, probablemente la más exitosa en la historia del club de la banda cruzada.
En 126 partidos oficiales, Borré, como le dicen, ha logrado 46 anotaciones, muchas de ellas claves para la conquista de cinco títulos, entre ellos la histórica Copa Libertadores de 2018, nada menos que ante Boca Juniors.
El aporte de Rafa, sin embargo, no se limita a mandar balones al fondo de la red. Es un delantero de mucha movilidad y sentido colectivo, generador de espacios en las zagas contrarias, pasegol y primer defensa cuando se pierde la pelota.
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En su año de estreno en River marcó apenas ocho veces, pero su estilo convenció a Gallardo, quien autorizó la compra del 50 % de su pase, por US$7 millones. Ahora, después de haber ganado además una Recopa Suramericana, dos Copas de Argentina y la Supercopa Argentina, River pretende comprarle al Atlético un 25 % más de los derechos, para poder decidir el futuro del jugador, con contrato hasta finales de junio y con una cláusula de rescisión de US$35 millones, la más alta del plantel.
Con apenas 25 años, Santos Borré está en el mejor momento de su carrera y siente que está listo para volver al Viejo Continente, ya con mayores pergaminos para triunfar. Pero antes quiere poner un trofeo más en su vitrina: el de la Copa Libertadores 2020, cuya primera semifinal jugarán hoy, desde las 7:30 p.m. por ESPN, River Plate y Palmeiras de Brasil, en Buenos Aires. La vuelta será la próxima semana, en São Paulo.
El equipo millonario ha ganado en cuatro ocasiones el torneo continental, las dos más recientes bajo la batuta de Gallardo y con participación colombiana, en 2015 de Éder Álvarez Balanta y Teófilo Gutiérrez y en 2018 de Santos Borré y Juan Fernando Quintero.
En cuartos de final pasó por encima del Nacional de Uruguay, al que le ganó los dos partidos: 2-0 en casa y 6-2 en Montevideo.
Palmeiras llega a esta instancia invicto desde el arranque del torneo, con una excelente campaña de ocho triunfos y dos empates. Eliminó en la etapa previa al Nacional de Paraguay (1-1 y 3-0) y busca llegar a su quinta final de Libertadores. Celebró su único título en 1999 frente al Deportivo Cali en la definición por penaltis, y cayó en las ediciones de 1961, 1968 y 2000.
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En la otra semifinal, que comienza mañana en La Bombonera, desde las 5:15 p.m., también habrá duelo entre campeones del torneo. Boca Juniors, ganador seis veces (1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007) y con los colombianos Frank Fabra, Jorman Campuzano, Edwin Cardona y Sebastián Villa en la nómina, se las verá con el Santos, que celebró en 1963, 1963 y 2011.
En River sería alternativa el delantero cartagenero Jorge Carrascal, otra de las joyas que ha pulido Marcelo Gallardo. El jugador de 22 años llegó a Núñez en 2019 y ha logrado consolidarse en el primer equipo gracias a su calidad y desequilibrio, aunque apenas ha marcado cinco goles oficiales.
Gracias a sus buenas actuaciones ha recibido ofertas de Europa y Asia, pero la dirigencia de River anunció que solo lo dejará ir a cambio de 20 millones de euros.
Tantos Rafael Santos Borré como Jorge Carrascal han participado en los procesos de las selecciones menores de Colombia. Y aunque estuvieron en el radar de Carlos Queiroz, finalmente, por diversas razones, no estuvieron en el plantel que comenzó la eliminatoria.
Ahora, para quien asuma el cargo de técnico de la tricolor para el camino a Catar 2022 y la Copa América de junio, parece una obligación tenerlos en cuenta por el excelente nivel que exhiben en el club millonario.
“Tengo mi cabeza puesta en River y en el duelo contra Palmeiras, que es muy importante, porque nuestro sueño es ganar la Libertadores; después veremos qué pasa con mi futuro y si estará en la selección, que es una aspiración que siempre está ahí”, aseguró Santos Borré, el hombre gol de la era Gallardo en River.