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Todavía no se ha terminado la discusión alrededor del partido que Coquimbo Unido y Defensa y Justicia, de los colombianos Raúl Loaiza y Mauricio Duarte, tenían que haber disputado el pasado jueves. La semifinal de la Copa Suramericana tuvo que posponerse, luego de que tres jugadores del equipo argentino dieran positivo por COVID-19.
Las autoridades chilenas aislaron a toda la delegación de Defensa y Justicia (34 personas entre futbolistas, cuerpo técnico y auxiliares) y fue por esta razón que la Conmebol aplazó el encuentro cuando faltaban apenas horas para disputar el partido.
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El problema no se quedó ahí. Según el gobierno chileno, la confirmación de los casos positivos en el equipo argentino exigía una cuarentena estricta para todo el plantel o, en su defecto, que el juego se disputara fuera de su territorio.
Por eso, siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias, Conmebol, el máximo ente del fútbol suramericano, decidió que la ida de las semifinales de la copa se realizara en Asunción, capital de Paraguay, donde Coquimbo Unido jugará en condición de local.
Sin embargo, la delegación chilena ha reclamado oficialmente los puntos del partido y alega que los estatutos del torneo le darían la victoria al equipo, pues los argentinos no se presentaron a jugar el partido.
Conmebol, por su parte, aclaró en un comunicado que la norma indica que la causal de anulación del encuentro especifica que el equipo que se presente con menos de siete jugadores para disputar el partido automáticamente pierde por tres goles, y aclaró que este no era el caso, pues se trataba de una situación excepcional.
Todo llegó hasta la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP), cuyo presidente, Pablo Milad, manifestó su preocupación por la situación a través de un video publicado en redes sociales. Milad declaró que la Asociación del fútbol chileno apoyaba los reclamos de Coquimbo Unido ya que su único objetivo es garantizar la equidad deportiva.
Es un caso parecido al que se enfrentan Boca Juniors y Santos en la semifinal de la Copa Libertadores. Según varios medios argentinos, el club brasileño habría afrontado el juego que se disputó en La Bombonera el pasado miércoles con dos jugadores positivos por COVID-19. Razón por la cual, y a la espera de la confirmación de la situación, el equipo argentino presentaría una queja formal ante Conmebol para que le den los tres puntos.
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Por ahora, el juego entre Coquimbo Unido y Defensa y Justicia se disputará este martes a las 5:15 p.m., hora colombiana. En la ida de la otra semifinal de la Copa, Lanús, del colombiano Alexis Pérez, derrotó a Vélez Sarsfield 1-0 y jugará el partido de vuelta este miércoles como local.
En los próximos días, Conmebol tendrá que dar respuesta al reclamo de los chilenos ya que la vuelta de la semifinal está programada para disputarse este sábado y la resolución del conflicto entre chilenos y argentinos puede ser crucial para definir uno de los finalistas de la Copa Suramericana.