Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Al espigado Adolfo Valencia nunca le dio duro cambiar el calor de su natal Buenaventura por el frío de Bogotá. Fue a probarse con Millonarios, pero lo enviaron de vuelta a la ciudad puerto. Cuando tenía 19 años, su futuro fue albirrojo. Deslumbró a Diego Édison Umaña en un partido amistoso contra el equipo profesional de Santa Fe, y se quedó para convertirse en ídolo cardenal.
Le puede interesar: más de la selección de Colombia y toda la información deportiva
En 1988, justamente en un clásico capitalino contra el club que no le había dado la oportunidad, el delantero comenzó su carrera en primera división. Con sus goles, zancadas y gambetas se dio a conocer en el balompié colombiano y, entre otros logros, protagonizó la histórica goleada 7-3 sobre Millonarios en 1992.
El poderoso Bayern Múnich alemán se fijó en él y se convirtió en el primer colombiano en jugar en la Bundesliga, donde también anotó golazos que lo llevaron al Atlético de Madrid. No obstante, sus mejores recuerdos son con la camiseta de la selección de Colombia, con la que brilló en el aún rememorado 5-0 ante Argentina, el 5 de septiembre de 1993, y en otros encuentros que no salen de sus pensamientos.
Mundialista en Estados Unidos 1994 y Francia 1998, hoy en día no deja de ver fútbol y de analizarlo con la calma con la que definía cuando tenía a los arqueros rivales enfrente. En diálogo con El Espectador, destacó las virtudes del actual combinado nacional, que viene de empatar sin goles ante Uruguay y Brasil, y que el jueves enfrentará a Ecuador.
¿Qué análisis hace del partido de Colombia contra Brasil?
Colombia fue un equipo muy ordenado. Sabíamos a la clase de rival que nos íbamos a enfrentar. Por algo va de primero, por sus grandes jugadores y su excelente forma de jugar.
¿Cómo le ha parecido el juego del equipo en lo que va de este nuevo ciclo de Reinaldo Rueda?
El profe lo está haciendo bien. Lo que pasa es que estos partidos de eliminatoria son de mucha garra y desespero, porque a medida que se va jugando son menos puntos los que van quedando en disputa. Pero lo único que a mí me preocupa es el tema de los goles, porque el equipo juega bien. Se para muy bien atrás, en el medio también funciona bien, pero arriba creamos muchas opciones y no las concretamos.
(Francisco Maturana: “A la selección Colombia procuro no verla”)
Como un delantero histórico de la selección de Colombia, ¿qué puede decir sobre cómo trabajar con los atacantes para que eso mejore?
El tema es trabajar día a día y ser más repetitivos en los trabajos de definición. Se trata de agarrar confianza en los entrenamientos para ser más efectivos en los partidos. Pero ellos saben cómo hacerlo, no son jugadores aficionados, son profesionales y tienen gran experiencia. Estos partidos son muy importantes, pero hay que tener más tranquilidad frente al arco. Ese es el único problema que veo, pero de resto hay jugadores buenos, con entrega por la selección. Hay que mejorar muy poquito. Por ejemplo, no quiero dar nombres, pero algunos entran inseguros y, cuando uno llega a la selección, el éxito se logra gracias a la confianza.
¿Alguna vez sintió esa falta de confianza en su paso por la selección?
No, porque el anhelo de todo jugador de fútbol es llegar a la selección. Si uno llega, tiene que dar y rendir al máximo, porque ahí están los mejores. Uno tiene que llegar, ponerse la camiseta y jugar aún mejor de como lo hace en su club, porque la selección es la mejor vitrina que tiene el jugador y, además, es representar al país. Entonces, valoro mucho el esfuerzo que hacen Luis Díaz y Wílmar Barrios. A ellos se les nota la entrega, al igual que al portero David Ospina. También destaco la llegada de Carlos Cuesta, que es mucho jugador: entró y se quedó con el puesto con personalidad y fútbol, aprovechando la oportunidad.
Lea también: Las escuelas que han marcado la historia del fútbol colombiano
¿Y qué análisis hace del fútbol local, que no entrega muchos jugadores convocados a la selección?
El fútbol colombiano siempre ha sido así, lo que pasa es que venimos del tema de la pandemia, que afectó muchísimo a los clubes y hasta ahora todo se está organizando nuevamente respecto a su economía y lo demás. Así que no critico a los clubes colombianos, porque se están recuperando. Recién están abriendo los estadios. Por ejemplo, Santa Fe va mejorando, y así es en los otros clubes. Y a medida que mejoren subirá el nivel de nuestra Liga y quizá tendremos más jugadores del campeonato local en la selección para los partidos de eliminatorias, que son muy bravos.
El siguiente que se viene es Ecuador, que ya goleó a Colombia en esta eliminatoria: ¿qué clase de rival podría ser?
Ecuador va a venir a ganar, porque es rival directo nuestro y necesita sumar puntos. Va a ser muy duro, no podemos perder, porque cada día habrá menos partidos y, por ende, menos puntos para ganar. Hay varios equipos pegados en la tabla, a excepción de Brasil y Argentina, que ya están un poco más tranquilos. Estos partidos son como finales. Colombia no puede perder, se tiene que jugar la vida frente a Ecuador.