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Todos los equipos quieren depender de sí mismos para alcanzar los objetivos. Jugar con la mente en varias canchas es un estrés adicional en la ruta rumbo a la consagración y esa es la situación a evitar para Arsenal, que siente a Manchester City respirándole en la nuca desde hace varias fechas. Por eso mismo, esta tarde, los gunners deben sortear la presión de jugar contra el vigente campeón como visitante y conseguir un resultado épico que les impida quedar a merced de lo que hagan los dirigidos por Pep Guardiola en lo que resta del campeonato.
Hace un par de fechas, parecía que el camino hacia el trono de la Premier League, la liga más importante y competitiva del mundo, estaba resuelto a favor de los londinenses. Durante un extenso tramo de la temporada, Arsenal fue constante y un líder solitario. Aunque se llevó los tres puntos en plazas difíciles y tuvo un arranque sin precedentes en su historia reciente, esa versión de solidez y contundencia se disipó en las más recientes jornadas.
Los puntos perdidos contra rivales que parecían accesibles dejaron a los gunners con 75 unidades, cinco más que el City, su perseguidor, que tiene dos partidos menos. Por eso es tan importante para ellos conseguir una victoria este miércoles en el Etihad Stadium. Desde la temporada 2003-2004 —en la que fueron campeones invictos—, la hinchada del Arsenal no sentía tan cerca el trofeo.
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En ese contexto, se entiende por qué los resultados recientes han sido tan dolorosos para los londinenses. Abril fue un mes complicado, pues quedaron eliminados de la Europa League (por penaltis contra el Sporting de Lisboa) y dejaron escapar victorias contra el colero Southampton (3-3) y West Ham (2-2), duelo en el que Bukayo Saka falló un penalti que podría haber derivado en una victoria clave.
El reto de Arteta
“Va a ser un partido importantísimo, pero, si me preguntas si va a decidir la Premier, la respuesta es no”, afirmó Mikel Arteta, estratega de los gunners desde diciembre de 2019. “Tenemos que jugar un partido perfecto”. Esa postura contrasta con la de Guardiola, quien aseguró: “Si le ganamos a Arsenal, el destino está en nuestras manos”.
Con el riesgo de que todo por lo que han luchado en el último año se reduzca a un desenlace sin títulos, el DT de Arsenal trabajó bastante en la semana para devolverles la confianza a sus dirigidos y aún cree que romperá la hegemonía del City de Guardiola, que ha conquistado cinco de las últimas seis ediciones de la liga inglesa.
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El historial entre ambos entrenadores españoles está inclinado a favor de Pep. Desde que el ahora entrenador gunner dejó de ser asistente técnico del catalán y firmó con el cuadro londinense, sus equipos se han enfrentado nueve veces, con un registro de ocho victorias para los de Mánchester y una sola para Arteta, que data de julio de 2020.
El presente rojiblanco es por lo menos irregular, ya que viene de tres empates seguidos y no gana por Premier League desde el 1.° de abril. Ese panorama contrasta con el de su rival, que lleva seis victorias, varias de ellas por goleada, al hilo. Con esos antecedentes, los mancunianos son los favoritos a quedarse con el triunfo y quedar más cerca de la cima de la liga.
A esto se suma que tienen al delantero del momento: Erling Haaland. En lo que va de la temporada, el noruego ha anotado 48 goles (32 de ellos solo en la liga inglesa), viene de marcar en cuatro de sus últimos cinco partidos y es el máximo artillero no solo del campeonato inglés, sino también de la Liga de Campeones.
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En caso de caer derrotado, Arsenal aún se puede refugiar en un tropezón de los ciudadanos, escenario verosimil para los de Gaurdiola por el exigente calendario que deben afrontar. Mientras que los londinenses pueden concentrarse solo en la PL, los mancunianos deben preparar la semifinal de la Champions con Real Madrid y la final de la FA Cup contra Manchester United.
El margen de error para lo que resta de temporada es mínimo para ambos. Mientras Guardiola deberá darle rodaje a su extensa nómina para cumplir con todos los exigentes compromisos que tiene por delante, Arteta podrá usar a sus inicialistas habituales para alcanzar el objetivo de cerrar con broche de oro su mejor campaña al frente de la institución. Con nombres jóvenes como Martin Odegaard, Bukayo Saka y Gabriel Martinelli, el equipo más ganador de la capital británica aspira a poner fin a una espera de casi 20 años.
La lucha por el tercer lugar de la Premier League también está emocionante, pues Newcastle y Manchester United están empatados con 59 unidades cada uno, siendo mejor la diferencia de gol de los primeros. Ya descartados de la lucha por el título, ambos combinados se pelean por un cupo directo a la fase de grupos de la próxima edición de la Liga de Campeones.
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