Barcelona vs. River, la final esperada en el Mundial de Clubes
Para que se dé ese partido en la instancia definitiva, el equipo español y el argentino tendrán que superar en semifinales a Guangzhou Evergrande, de China, y Sanfrecce Hiroshima, de Japón, respectivamente.
Redacción deportiva
Un gol en el descuento del brasileño Paulinho dio la victoria (2-1) al Guangzhou Evergrande frente al América de México, que se había adelantado en el marcador y tuvo controlado el encuentro hasta 10 minutos antes del final. Después, en el mismo recinto, el Sanfrecce Hiroshima no dio opción al TP Mazembe congoleño, al que derrotó por un claro 3-0, con goles de Tsukasa Shiotani (44), Kazuhiko Chiba (56) y Takuma Asano (78).
En un estadio de Nagai desangelado, con menos de media entrada (unos 20.000 espectadores), estos clubes asiáticos lograron el pase para enfrentarse a los dos grandes aspirantes al triunfo en el Mundial de Clubes, River Plate y Barcelona, que entrarán en juego este miércoles y jueves, cuando buscarán la clasificación a la gran final del certamen.
“La final contra el Barcelona está en boca de todos. Lo bueno de todo esto es que ellos han tenido un partido antes y vienen de empatar los dos últimos en la Liga”, señaló Leo Ponzio, jugador de River Plate, quien seguramente será titular en el juego semifinal de este miércoles, ante los japoneses. “Competencia y posibilidades hay para todos. Tenemos una semifinal que por nombre y por historia somos favoritos, pero que será difícil”, añadió el jugador de 33 años tras el primer entrenamiento del equipo en Osaka, tras cinco días de concentración en Tokio.
El equipo millonario tuvo un extraordinario 2015, en el que se coronó campeón de la Copa Libertadores de América y por eso se ganó el derecho a participar en este Mundial de Clubes. Claro que el presente del conjunto argentino no es el mejor. En el más reciente torneo argentino no luchó entre los de punta y en la Copa Sudamericana cayó en semifinales ante Huracán, que a la postre terminaría perdiendo el título frente a Independiente Santa Fe, de Colombia.
Claro que el plantel está fuerte, el técnico Marcelo Gallardo cuenta con jugadores de muchísima experiencia que sabrán manejar la presión y por qué no, dar la sorpresa ganando por primera vez en la historia un campeonato de esta índole.
El uruguayo Carlos Sánchez se animó a bromear. “El morbo está ahí, instalado en todos lados. Sería ideal terminar con un River-Barcelona”, dijo el volante que afirmó que en los últimos días ha estado en contacto con su amigo y coterráneo Luis Suárez. “Hablo todo el tiempo con él, pero son bromas que quedan entre nosotros. Él quiere ganar y yo también”, dijo antes de salir corriendo al autobús, que le esperaba para partir.
Por su parte, el Barcelona, máximo favorito a ganar el campeonato, llegó ayer a Japón con el objetivo de levantar el quinto título del año, tras coronarse entre otros, en la UEFA Champions League, certamen que le dio el cupo a este Campeonato Mundial.
Luis Enrique ha convocado a 23 jugadores para este torneo. Los diecinueve disponibles, más los lesionados Neymar da Silva y Douglas Pereira, quienes podrían recibir el alta médica en los próximos días, y dos jugadores del Barça B: Gerard Gumbau y Sergi Samper.
Arda Turan y Aleix Vidal, que no pueden jugar con su nuevo equipo hasta 2016 por culpa de la sanción de la FIFA, también han viajado para estar al lado de sus compañeros.
El único futbolista de la primera plantilla que se ha quedado en Barcelona es Rafinha Alcántara, que debe seguir con el proceso de recuperación de su grave lesión de rodilla.
La expedición que llegó a tierras niponas está encabezada por una numerosa representación de la junta directiva y por el secretario técnico, Robert Fernández.
También forman parte de la expedición el secretario general del deporte de la Generalitat de Cataluña, Ivan Tibau, y el presidente de la Federación Catalana de Fútbol, Andreu Subies.
En Japón, el Barcelona se entrenará hoy, mañana y el miércoles en el Mitsuzawa Stadium de Yokohama y el jueves se medirá en semifinales al Guangzhou Evergrande chino, equipo que es dirigido por el brasileño Luis Felipe Scolari. Tanto la final, como el partido por el tercer y cuarto puesto, se jugarán el domingo 20.
Un gol en el descuento del brasileño Paulinho dio la victoria (2-1) al Guangzhou Evergrande frente al América de México, que se había adelantado en el marcador y tuvo controlado el encuentro hasta 10 minutos antes del final. Después, en el mismo recinto, el Sanfrecce Hiroshima no dio opción al TP Mazembe congoleño, al que derrotó por un claro 3-0, con goles de Tsukasa Shiotani (44), Kazuhiko Chiba (56) y Takuma Asano (78).
En un estadio de Nagai desangelado, con menos de media entrada (unos 20.000 espectadores), estos clubes asiáticos lograron el pase para enfrentarse a los dos grandes aspirantes al triunfo en el Mundial de Clubes, River Plate y Barcelona, que entrarán en juego este miércoles y jueves, cuando buscarán la clasificación a la gran final del certamen.
“La final contra el Barcelona está en boca de todos. Lo bueno de todo esto es que ellos han tenido un partido antes y vienen de empatar los dos últimos en la Liga”, señaló Leo Ponzio, jugador de River Plate, quien seguramente será titular en el juego semifinal de este miércoles, ante los japoneses. “Competencia y posibilidades hay para todos. Tenemos una semifinal que por nombre y por historia somos favoritos, pero que será difícil”, añadió el jugador de 33 años tras el primer entrenamiento del equipo en Osaka, tras cinco días de concentración en Tokio.
El equipo millonario tuvo un extraordinario 2015, en el que se coronó campeón de la Copa Libertadores de América y por eso se ganó el derecho a participar en este Mundial de Clubes. Claro que el presente del conjunto argentino no es el mejor. En el más reciente torneo argentino no luchó entre los de punta y en la Copa Sudamericana cayó en semifinales ante Huracán, que a la postre terminaría perdiendo el título frente a Independiente Santa Fe, de Colombia.
Claro que el plantel está fuerte, el técnico Marcelo Gallardo cuenta con jugadores de muchísima experiencia que sabrán manejar la presión y por qué no, dar la sorpresa ganando por primera vez en la historia un campeonato de esta índole.
El uruguayo Carlos Sánchez se animó a bromear. “El morbo está ahí, instalado en todos lados. Sería ideal terminar con un River-Barcelona”, dijo el volante que afirmó que en los últimos días ha estado en contacto con su amigo y coterráneo Luis Suárez. “Hablo todo el tiempo con él, pero son bromas que quedan entre nosotros. Él quiere ganar y yo también”, dijo antes de salir corriendo al autobús, que le esperaba para partir.
Por su parte, el Barcelona, máximo favorito a ganar el campeonato, llegó ayer a Japón con el objetivo de levantar el quinto título del año, tras coronarse entre otros, en la UEFA Champions League, certamen que le dio el cupo a este Campeonato Mundial.
Luis Enrique ha convocado a 23 jugadores para este torneo. Los diecinueve disponibles, más los lesionados Neymar da Silva y Douglas Pereira, quienes podrían recibir el alta médica en los próximos días, y dos jugadores del Barça B: Gerard Gumbau y Sergi Samper.
Arda Turan y Aleix Vidal, que no pueden jugar con su nuevo equipo hasta 2016 por culpa de la sanción de la FIFA, también han viajado para estar al lado de sus compañeros.
El único futbolista de la primera plantilla que se ha quedado en Barcelona es Rafinha Alcántara, que debe seguir con el proceso de recuperación de su grave lesión de rodilla.
La expedición que llegó a tierras niponas está encabezada por una numerosa representación de la junta directiva y por el secretario técnico, Robert Fernández.
También forman parte de la expedición el secretario general del deporte de la Generalitat de Cataluña, Ivan Tibau, y el presidente de la Federación Catalana de Fútbol, Andreu Subies.
En Japón, el Barcelona se entrenará hoy, mañana y el miércoles en el Mitsuzawa Stadium de Yokohama y el jueves se medirá en semifinales al Guangzhou Evergrande chino, equipo que es dirigido por el brasileño Luis Felipe Scolari. Tanto la final, como el partido por el tercer y cuarto puesto, se jugarán el domingo 20.