Brasil, el rival a vencer en la Copa América Femenina

La selección femenina de Colombia ha demostrado un gran nivel en los primeros encuentros de la Copa América Femenina y se perfila como una de las candidatas al título. Sin embargo, para lograrlo hay una prueba muy difícil primero: derrotar a Brasil, la potencia regional.

La selección femenina de Colombia ha demostrado un gran nivel en los primeros encuentros de la Copa América Femenina y se perfila como una de las candidatas al título. Sin embargo, para lograrlo hay una prueba muy difícil primero: derrotar a Brasil, la potencia regional.

El país vecino es quien marca la parada en el balompié y la rama femenina no es la excepción. De allí viene Marta Vieira da Silva, una de las más relevantes exponentes en la historia de este deporte. Por desgracia, la selección brasileña no pudo contar con ella por una lesión.

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En su lugar han alzado la mano varias jugadoras de calidad excepcional, entre ellas, destaca Adriana Leal da Silva, volante de Corinthians que le anotó dos tantos a Argentina en la primera fecha de la Copa América y otros dos a Urugay en la segunda.

Brasil arrancó con todo en esta edición del torneo continental. En el partido contra su rival de toda la vida, Argentina, se impusieron por 4-0. En la segunda jornada también golearon. Su víctima esa vez fue Uruguay, que cayó por tres tantos contra ninguno.

Hasta el momento, no hubo un rival que les haya representado un peligro o siquiera les haya generado alguna ligera preocupación. Contra Venezuela y Perú, los adversarios que aún deben enfrentar en el Grupo B, el pronóstico indica que lloverán goles.

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Detrás del gran funcionamiento de la verdeamarela está Pia Sundhage. La entrenadora sueca dirigió la selección mayor de su país y también a Estados Unidos. Con las norteamericanas ganó dos oros olímpicos y fue subcampeona del mundo en 2011. Toda una eminencia dentro de la rama femenina.

Ella fue la encargada de llevar a cabo el recambio generacional del gigante de Sudamérica. El trabajo no era fácil, tuvo la tarea de relevar a la histórica delantera Cristiane y a la veterana volante Formiga, grandes nombres de la selección durante la última década.

El primer cambio en el once habitual fue en la portería. En las últimas tres ediciones de la Copa América Femenina quien resguardó el arco brasileño fue Bárbara. La veterana portera de 34 años, y con pasado en el fútbol europeo, fue relevada por Lorena Silva, jugadora de Gremio.

Hasta el momento, la presentación de Lorena ha sido positiva. En dos salidas ha mantenido el cero en su arco. Por su puesto, eso se debe también a la gran defensa del equipo, pero no se pueden omitir las ocasiones de alto riesgo en que la guardameta supo responder.

La defensa mezcla experiencia con juventud. El nombre más destacado es Tamires, la lateral izquierda es clave no solo a la hora de recuperar el balón, sino también para generar peligro. La zurda de 34 años ha conquistado la Copa Libertadores Femenina en dos ocasiones. En la banda derecha hay una pelea por el puesto entre Fe Palermo y Antonia.

En la zaga central Sundhage se decidió por la veterana Rafaelle y la joven Tainara. Ambas de gran portento físico y mucha seguridad para salir jugando con los pies. En la estrategia brasileña el pelotazo está prohibido.

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En el mediocampo, la entrenadora sueca tuvo que enfrentar la ausencia de Marta con Angelina y Ary Borges en la mitad, y con Adriana y Kerolin por los costados. El torneo de Adriana ha sido excepcional. Pese a no ser la principal referencia de ataque en el conjunto brasileño, es la goleadora del torneo con cuatro anotaciones.

Las responsables de hacer los goles son Bia Zaneratto y Debinha. Ellas luchan por tomar el testigo de Crsitiane, quien en su etapa como jugadora de la selección anotó 96 goles en 151 partidos.

Por lo pronto, el arranque de ambas ha sido acorde al rendimiento del equipo. Debinha, la principal carta ofensiva, lleva dos goles en dos partidos. Zaneratto, la segunda delantera, marcó uno y dio dos asistencias.

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El presente de las brasileñas solo se puede equiparar con Colombia. Ambas selecciones son las únicas que llevan puntaje ideal a esta altura del torneo. Sin embargo, en la estadística, la canarinha gana por poco, ya que, a diferencia de las locales, ha conservado su arco en cero y ha sido más efectiva a la hora de anotar.

Salvo que ocurra algo extraordinario, Brasil disputará la final del torneo en Bucarmanga el próximo 30 de julio. Colombia, que aún debe implementar algunos ajustes, es el único equipo que parece ofrecer resistencia a una selección que está un escalón por encima de las demás.

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