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El Chelsea del portugués José Mourinho no pudo pasar del empate a uno en casa este miércoles ante el Schalke 04 en su primera partido esta temporada en la Liga de Campeones.
El español Cesc Fàbregas abrió el marcador en el minuto 11 para los "blues", que trataban de cerrar el duelo en la segunda parte cuando el holandés Klaas-Jan Huntelaar los sorprendió con el 1-1.
Mourinho optó por confiar de inicio para su ataque en el marfileño Didier Drogba, una leyenda en Stamford Bridge a sus 36 años.
El hispano-brasileño Diego Costa, que arrastra molestias musculares, estuvo en el banquillo gran parte del duelo tras su exhibición del pasado sábado en la liga ante el Swansea, cuando marcó un triplete (4-2), y no pudo cambiar el signo del encuentro cuando saltó al campo en el minuto 74.
Los "blues" abrieron el encuentro comprometidos con la presión en la zona de tres cuartos para tratar de impedir la salida del balón de los alemanes, y esa táctica dio frutos poco después de los diez minutos de juego.
Cesc recuperó un balón en un lance en el que los alemanes reclamaron falta, y Eden Hazard se hizo con el cuero a pocos metros del área del portero Ralf Fährmann.
El belga volvió a cruzar el balón para Cesc, que entraba por la izquierda y lanzó un tiro que fue a parar a la red e hizo subir el 1-0 al marcador.
La presión avanzada del Chelsea propició durante el primer tiempo diversas ocasiones por parte del Schalke, para enfado de Mourinho, que gesticulaba en la banda.
El portero belga Thibaut Courtois demostró una vez más sus reflejos bajo los palos al desviar primero con los puños un disparo lejano del alemán Max Meyer.
Su compatriota Julian Draxler, poco después, encaró en solitario al guardameta tras una jugada personal, pero su disparo acabó saliendo desviado.
Ya en la segunda parte, con ventaja en el marcador, los de Mourinho bajaron una marcha y se limitaron a esperar un contragolpe para rematar al rival.
El holandés Klaas-Jan Huntelaar, sin embargo, desbarató los planes de los locales al aprovechar en el minuto 62 una cabalgada personal de Draxler para sellar el 1-1.
El encuentro volvía a estar abierto y el Chelsea trató de volver a tomar la delantera con la entrada de Costa, en estado de gracia en las últimas semanas.
La defensa de los alemanes, sin embargo, resultó un muro demasiado elevado para los locales, que se tuvieron que conformar con la igualdad en el marcador cuando el árbitro marcó el final del encuentro.