Liga de Quito venció 1-0 este jueves al brasileño Fluminense en el partido de ida de la Recopa Sudamericana, el certamen que enfrenta a los ganadores de las copas Sudamericana y Libertadores del 2023.
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Cuando el encuentro parecía liquidado en la capital ecuatoriana, el paraguayo Alex Arce le dio el triunfo al cuadro albo en el minuto 90 con un tanto que generó polémica y llevó a la revisión del VAR por la sospecha de una posición adelantada.
Un centro y un toque de taquito de Arce pusieron adelante en la serie al equipo de Liga, que respira aliviado por la leve ventaja con la que disputará la revancha. El duelo que definirá al campeón de la Recopa se jugará el próximo 29 de febrero en el Maracaná.
Los ecuatorianos, campeones de la Copa Sudamericana, salieron con uñas y dientes, pero olvidaron afilar la puntería. Sus intenciones de sacar una buena diferencia de goles se diluyeron con remates desviados de Ezequiel Piovi y de Sebastián González, figuras clave en el primer tiempo junto con José Quintero.
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La falta de definición no fue el único problema de los albos, que en esta ocasión estuvieron dirigidos por el argentino Adrián Gabarinni por falta de acreditación de su DT, el español Josep Alcácer. La peor pesadilla del rey de copas ecuatoriano se hizo carne en Fábio, el arquero de reflejos rápidos y manos de acero para frenar los embates del rival.
Liga de Quito llegó cerca de una veintena de ocasiones al arco de Fluminense, que pretende conquistar su primera Recopa. Los ecuatorianos ya se alzaron con ese título en 2009 y 2010.
No hay offside. Debut y gol para el paraguayo Alex Arce que le dio la victoria agónica a Liga de Quito sobre Fluminense por la Recopa Sudamericana. pic.twitter.com/Zl1CVvvsJM
— Pablo Giralt (@giraltpablo) February 23, 2024
San Domínguez
El Flu tras un arranque feroz, vio disminuidas sus fuerzas y debió replegarse en el segundo tiempo para intentar salvar el empate con miras a recuperar lo perdido en su fortín. El gol de Arce fue un balde de agua fría para el equipo que había resistido lo peor de la tormenta.
La cancha mojada por una fuerte lluvia que duró casi todo el partido fue una traba para los agotados jugadores del equipo brasileño, quienes enfocaron sus fuerzas en proteger su arco. La fuerza de los ecuatorianos apenas les permitió hacer cuatro remates directos al arco del experimentado Alexander Domínguez.
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El potente remate esquinado de Matheus Martinelli en el 72 fue el último intento de los tricolores por llevarse el gol de visitante, pero la alargada figura de Domínguez bloqueó toda esperanza. Guga en el 45+5 y Jhon Arias en el 30 también hicieron su parte para derrotar al rey de copas ecuatoriano, pero cada balón fue a dar a las manos del guardameta.
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