Consecuencias que tendría la Premier con la salida del Reino Unido de la UE
Esta decisión genera un problema para todos los futuros fichajes. La actual normativa establece que todos los futbolistas que procedan de fuera de la Unión Europea han de haber disputado un mínimo de partidos con su selección nacional.
Redacción Deportiva
La Premier League se ha caracterizado por ser una de las ligas europeas más poderosas. Durante los mercados de pases siempre es protagonista ofreciendo contratos multimillonarios a figuras y prospectos del fútbol mundial. Pero la decisión de no seguir siendo parte de la Unión Europea acaba con todo esto. Trae consecuencias importantes para el balompié de ese país. Son 332 jugadores de las diferentes ligas inglesas y escocesas – cien de ellos en la Premier –, los clubes deberán asumir la normativa general que rige la inmigración laboral, por lo que se dejarán de beneficiar de la “ley Bosman”, gracias a la cual los jugadores pueden negociar nuevos contratos directamente con sus clubes y los equipos.
“La esencia del deporte tuvo que adaptarse a los negocios, nadie puede negar el gran impacto que ha causado el Caso Bosman en el fútbol europeo”, dijo secretario general de la UEFA, Lars-Christer Olsson, en declaración a la federación europea. Con estas condiciones, las diferentes ligas británicas a partir del viernes tendrán dos tercios de los jugadores sin cumplirían los criterios para jugar, según datos del Observatorio de Fútbol CIES, entre ellos estarían las dos relevaciones del año en la Premier League: Kanté y Payet.
Una de las reglas que tiene el fútbol de este país y que pone más trabas a los jugadores foráneos que no forman parte de la Unión Europea es el de tener cierto porcentaje de números disputados con su selección nacional en un periodo de tiempo de tres años. Lo anterior aunque no se cumpla puede ser apelado – así pasó en casos como los de Willian con Chelsea y Phillipe Coutinho con Liverpool –.
La abogada especializada en inmigración deportiva, María Patsalos, explicó para el diario Express de Inglaterra: “bajo las reglas actuales, jugadores como Dimitri Payet o N’Golo Kante serían despojados de la oportunidad de jugar en el Reino Unido pues sus actuaciones internacionales no llenarían los requisitos de la FA (Football Association)”.
Pero ante las declaraciones de María Patsalos, Robert Oxley, de Vote Leave, se mostró en desacuerdo y señaló que “las leyes de libre movimiento han dañado al fútbol británico. Fuera de la UE, el jugador local crecería y podríamos elegir entre el mejor talento foráneo. Sería más fácil fichar extranjeros”. El británico se muestra a favor de las decisiones de la FA, que está centrada en proteger legislativamente el talento autóctono, contrario a lo que hace la global Premier, que firmó un contrato televisivo de 7.000 millones de euros hace un año y gastó en fichajes otros 1.500.
Otro inconveniente que aparece en el fútbol británico es el de dejar de apostar por futuras promesas internacionales. Según el artículo 19 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA solo está permitido el traspaso de jugadores menores de edad –y mayores de 16 años– en el territorio del Espacio Económico Europeo lo que evitaría que jugadores jóvenes y promesas de países fuera de Inglaterra llegaran a la Premier League.
Pero las consecuencias no son únicamente en lo futbolístico, el transporte también se encarecería. Las agencias de viajes ya han advertido los paquetes de viaje, para el turismo en general y para asistir a partidos internacionales en particular, aumentarían de precio, según recogen diferentes medios británicos. Sin formar parte de la UE, el acuerdo que permite a cualquier europeo moverse con libertad por el continente dificultará la movilidad de los fanáticos. “Es una decisión devastadora para el fútbol inglés”, aseguró en una carta la vicepresidenta del West Ham, Karren Brady, preocupada por el futuro que se avecina.
La Premier League se ha caracterizado por ser una de las ligas europeas más poderosas. Durante los mercados de pases siempre es protagonista ofreciendo contratos multimillonarios a figuras y prospectos del fútbol mundial. Pero la decisión de no seguir siendo parte de la Unión Europea acaba con todo esto. Trae consecuencias importantes para el balompié de ese país. Son 332 jugadores de las diferentes ligas inglesas y escocesas – cien de ellos en la Premier –, los clubes deberán asumir la normativa general que rige la inmigración laboral, por lo que se dejarán de beneficiar de la “ley Bosman”, gracias a la cual los jugadores pueden negociar nuevos contratos directamente con sus clubes y los equipos.
“La esencia del deporte tuvo que adaptarse a los negocios, nadie puede negar el gran impacto que ha causado el Caso Bosman en el fútbol europeo”, dijo secretario general de la UEFA, Lars-Christer Olsson, en declaración a la federación europea. Con estas condiciones, las diferentes ligas británicas a partir del viernes tendrán dos tercios de los jugadores sin cumplirían los criterios para jugar, según datos del Observatorio de Fútbol CIES, entre ellos estarían las dos relevaciones del año en la Premier League: Kanté y Payet.
Una de las reglas que tiene el fútbol de este país y que pone más trabas a los jugadores foráneos que no forman parte de la Unión Europea es el de tener cierto porcentaje de números disputados con su selección nacional en un periodo de tiempo de tres años. Lo anterior aunque no se cumpla puede ser apelado – así pasó en casos como los de Willian con Chelsea y Phillipe Coutinho con Liverpool –.
La abogada especializada en inmigración deportiva, María Patsalos, explicó para el diario Express de Inglaterra: “bajo las reglas actuales, jugadores como Dimitri Payet o N’Golo Kante serían despojados de la oportunidad de jugar en el Reino Unido pues sus actuaciones internacionales no llenarían los requisitos de la FA (Football Association)”.
Pero ante las declaraciones de María Patsalos, Robert Oxley, de Vote Leave, se mostró en desacuerdo y señaló que “las leyes de libre movimiento han dañado al fútbol británico. Fuera de la UE, el jugador local crecería y podríamos elegir entre el mejor talento foráneo. Sería más fácil fichar extranjeros”. El británico se muestra a favor de las decisiones de la FA, que está centrada en proteger legislativamente el talento autóctono, contrario a lo que hace la global Premier, que firmó un contrato televisivo de 7.000 millones de euros hace un año y gastó en fichajes otros 1.500.
Otro inconveniente que aparece en el fútbol británico es el de dejar de apostar por futuras promesas internacionales. Según el artículo 19 del Reglamento sobre el Estatuto y la Transferencia de Jugadores de la FIFA solo está permitido el traspaso de jugadores menores de edad –y mayores de 16 años– en el territorio del Espacio Económico Europeo lo que evitaría que jugadores jóvenes y promesas de países fuera de Inglaterra llegaran a la Premier League.
Pero las consecuencias no son únicamente en lo futbolístico, el transporte también se encarecería. Las agencias de viajes ya han advertido los paquetes de viaje, para el turismo en general y para asistir a partidos internacionales en particular, aumentarían de precio, según recogen diferentes medios británicos. Sin formar parte de la UE, el acuerdo que permite a cualquier europeo moverse con libertad por el continente dificultará la movilidad de los fanáticos. “Es una decisión devastadora para el fútbol inglés”, aseguró en una carta la vicepresidenta del West Ham, Karren Brady, preocupada por el futuro que se avecina.