El daño colateral de las copas de Asia y África al fútbol de élite
Este fin de semana comienzan dos certámenes que probarán la capacidad de los futbolistas que sueñan con la gloria continental y la de sus clubes para suplir su ausencia.
Daniel Bello
Este 2024 será un año especialmente cargado para los seleccionados nacionales. Los futboleros de América, Asia, África, Europa e incluso Oceanía verán a los combinados de sus respectivas regiones batirse a duelo para consagrarse como campeones. Por primera vez en la historia, los cinco continentes celebrarán sus principales certámenes en la misma temporada.
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Este 2024 será un año especialmente cargado para los seleccionados nacionales. Los futboleros de América, Asia, África, Europa e incluso Oceanía verán a los combinados de sus respectivas regiones batirse a duelo para consagrarse como campeones. Por primera vez en la historia, los cinco continentes celebrarán sus principales certámenes en la misma temporada.
Este fin de semana arrancan dos de esos eventos continentales. Este viernes, en Catar, anfitrión del pasado Mundial, comenzó la XVIII edición de la Copa Asiática, y el sábado por la tarde, en Costa de Marfil, tendrá su puntapié inicial la Copa Africana de Naciones.
Lo particular de ambos torneos es que, a diferencia de los otros certámenes de selecciones, estos se llevan a cabo entre enero y febrero, lo cual interrumpe el calendario de los jugadores que pertenecen a las ligas más importantes de Europa. Como se trata de una ventana internacional avalada por FIFA, los clubes no pueden negarse a prestar a sus futbolistas.
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Por ejemplo, Liverpool, líder de la Premier League, se quedará sin su principal figura en las próximas semanas: el egipcio Mohamed Salah, máximo artillero junto a Erling Haaland del rentado inglés y líder de asistencias. Tampoco estará Wataru Endo, que tiene una gran oportunidad de consagrarse campeón continental con Japón.
“Decir que les deseo suerte sería mentira. Sería muy feliz si quedan eliminados en la fase de grupos”, dijo Jürgen Klopp en tono de broma cuando le preguntaron por las ausencias de Salah y Endo. En los próximos días los Reds lucharán por conservar la punta —en tres semanas hay un duelo clave ante Arsenal— y avanzar en la Carabao Cup.
Los Gunners, en cambio, se quedarán sin el japonés Takehiro Tomiyasu y el egipcio Mohamed Elneny, bajas que no son dolorosas para Mikel Arteta, pues ambos son suplentes. En medio de este panorama, Manchester City tiene una ligera ventaja, pues no tiene en su plantilla jugadores africanos ni asiáticos.
Otro que se ve preocupado en la Premier es el Tottenham, bastante golpeado por las lesiones. Luego de perder a varios cracks como James Maddison e Ivan Perisic, se quedará sin el coreano Heung-Min Son, cuarto en la tabla de artilleros del rentado inglés.
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En el caso de la Copa Asiática, ligas como las de Catar, Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita —las tres que más jugadores aportan al certamen— no se ven afectadas porque sus campeonatos contemplan esta ventana internacional en su calendario.
De las cinco grandes de Europa, la menos afectada es la de Italia, que pese a que tendrá 21 calciatori, entre ellos el nigeriano Victor Osimhen (Nápoli), en territorio marfileño, apenas tendrá un representante en Asia: el iraní Sardar Azmoun (Roma). La historia para Alemania en suelo catarí es diferente, pues varios de los seleccionados candidatos como Japón, Corea del Sur y Australia tienen como base jugadores de la Bundesliga.
Alemania, Francia, Inglaterra, Turquía, España y Bélgica son los seis países europeos que superaron la barrera de 30 futbolistas prestados entre ambas competiciones, la mayoría de ellos en la Copa Africana de Naciones, especialmente por los franceses, que en total —teniendo en cuenta jugadores de cualquier división de ese país— suman 99 representantes en los dos certámenes continentales.
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El caso de los españoles toca agarrarlo con pinzas pues, aunque aportan 37 jugadores, varios juegan en equipos de menor nivel. Por ejemplo, la selección de Guinea Ecuatorial tiene 11 futbolistas basados en ese país, pero solo dos están en Primera División. Clubes como Real Madrid, Girona y Barcelona, los tres primeros de La Liga, no cuentan con africanos ni asiáticos en sus filas.
Las selecciones llamadas a consagrarse este año en el continente donde se originó la humanidad tienen en común que la base de sus equipos se formó en Europa, sobre todo en territorio francés, incluso varias de sus figuras nacieron allá. Uno de los principales candidatos, Senegal, vigente campeón, tiene 12 integrantes de su plantilla en la primera división francesa.
En la Ligue 1 no hay equipo que no sufra bajas por prestar jugadores. El PSG, por ejemplo, no podrá contar con el marroquí Achraf Hakimi ni el coreano Lee Kang-In. Los más desbandados son Lorient —que pelea por no descender— y Marsella, que fueron obligados a prescindir de ocho y siete jugadores respectivamente.
Además del City, en la Premier League no pierden jugadores Newcastle United ni Luton Town. El más afectado de ese campeonato es el Nottingham Forest, que prestó seis jugadores a la Copa Africana de Naciones: tres marfileños, dos senegaleses y un nigeriano.
Se vienen días de ilusión para los futbolistas de dos continentes que no suelen tener mucho protagonismo. Para sus clubes serán unas semanas largas. A América y Europa el turno de competir les llegará entre junio y julio. Por un lado, sus jugadores tienen la ventaja de tener un calendario más amigable, pero, por el otro, verán disminuidos sus tiempos de descanso.