Este domingo, en la Liga de Bolivia, ocurrió una jugada que le da la vuelta al mundo y ha generado gran polémica en redes sociales. Durante el duelo entre Bolívar y Oriente Petrolero, el delantero Gilbert Álvarez decidió fallar a propósito un penalti en un gesto de juego limpio tras la lesión de un rival.
Apenas a los cuatro minutos del partido, el defensor de Bolívar, Anderson de Jesús Santos, se lesionó y cayó fuera del campo. Sin embargo, los jugadores de Oriente Petrolero reanudaron rápidamente el juego con un saque de banda, lo que resultó en un penalti provocado por John García tras una caída en el área. El árbitro sancionó la pena máxima, mientras que los jugadores locales protestaban.
En un acto de deportividad, Álvarez decidió fallar intencionalmente el penalti, recibiendo el aplauso de los jugadores de Bolívar, quienes valoraron el gesto que pudo haber cambiado el rumbo del encuentro. Finalmente, Oriente Petrolero perdió 2-0, y varios usuarios en redes sociales opinan que ese penalti fallido pudo haber alterado el resultado del compromiso.
“Sentí que hice lo correcto. Trato de ser leal, especialmente cuando un colega se lesiona. Marcar ese penalti habría ido en contra de mis principios y valores”, declaró Álvarez al diario Los Tiempos de Bolivia.
Este acto de fair play llega poco después de la controversia en las Eliminatorias, cuando el chileno Eduardo Vargas anotó el gol del empate ante Bolivia tras la lesión del arquero Carlos Lampe, en un partido que terminó 2-1 a favor de los bolivianos.
En cuanto a la clasificación, Bolívar es líder del torneo con 30 puntos, seguido de cerca por The Strongest, a tres unidades. Oriente Petrolero, por su parte, ocupa el séptimo lugar con 20 puntos y acumula dos partidos sin ganar.
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