Partidazo en Barranquilla: Colombia empató ante Brasil

Juan Fernando Quintero es el camino. Con él hay creatividad y se juega mejor. Este domingo, una vez más, lo demostró en el estadio Metropolitano de Barranquilla, donde fue el cerebro de las ideas y ejecuciones ofensivas de una selección de Colombia con la que apenas tuvo poco más de diez minutos el pasado jueves en un compromiso de bajo nivel colectivo contra Uruguay.

Le puede interesar: más de la selección de Colombia y toda la información deportiva

Hoy estuvo 73 minutos, en los que jugando entre centro y derecha se inventó pases que solo él ve y que solo él se atreve a dar. Intentó con remates de media distancia que asustaron a Alisson y sus toques deleitaron a los asistentes al Roberto Meléndez. Se entendió con Radamel Falcao García, quien también hizo un buen compromiso y salió aplaudido.

Otro que merece letras es Carlos Cuesta, el defensor de 22 años del Genk belga, quien se ganó el puesto contra Chile y no lo va a soltar. Siempre está correctamente perfilado y ubicado, luce impasable y, además, sabe dar pases certeros hacia adelante. Delante de él, Wílmar Barrios, el que siempre juega bien. Es el eje del mediocampo. Releva a todos, recupera y pasa bien.

Y, atrás de todos, el salvador de siempre: David Ospina, que con sus atajadas evitó la caída de la portería nacional en un partidazo entre dos selecciones que buscaron adueñarse de la pelota y del dominio, que no fueron mezquinas y no jugaron a empatar. Que brindaron espectáculo en ambos campos y que cuentan con esos gambeteadores que derrumbas las planificaciones tácticas.

(¡Un respiro para Colombia! Bolvia le ganó a Perú en La Paz)

Luis Díaz volvió a eludir a varios contrincantes y multiplicó los ya acostumbrados elogios hacia él. Del otro lado, Neymar demostró que es uno de los mejores del mundo: entiende conceptualmente el juego y utiliza sus habilidades para romper defensas. En Brasil lo hace con sus constantes combinaciones con el talentoso Lucas Paquetá.

Fue 0-0, pero hubo múltiples opciones de gol y de emociones cerca de los arcos, gracias a que en el verde césped estuvieron los que mejor entienden el juego y mejor tratan la pelota en pro de las acciones ofensivas. Incluso, los que ingresaron desde el banco. De hecho, Duván Zapata tuvo la oportunidad de tomar revancha de la ocasión perdida ante Uruguay y por poco anota en una jugada que se inventó. Y también le sirvió a Santos Borré un balón que terminó en la tribuna.

Brasil, la líder de la eliminatoria con 28 puntos y cero partidos perdidos, recibe el jueves a Uruguay. Colombia, con 15 unidades y todavía en la quinta posición (repechaje), será local a las 4:00 p. m. contra Ecuador, combinado que decretó la salida del portugués Carlos Queiroz tras el humillante 6-1 en Quito. La lección vuelve a ser que el “10″ es el camino.

Alineaciones:

Colombia:

Brasil:

Juan Fernando Quintero es el camino. Con él hay creatividad y se juega mejor. Este domingo, una vez más, lo demostró en el estadio Metropolitano de Barranquilla, donde fue el cerebro de las ideas y ejecuciones ofensivas de una selección de Colombia con la que apenas tuvo poco más de diez minutos el pasado jueves en un compromiso de bajo nivel colectivo contra Uruguay.

Le puede interesar: más de la selección de Colombia y toda la información deportiva

Hoy estuvo 73 minutos, en los que jugando entre centro y derecha se inventó pases que solo él ve y que solo él se atreve a dar. Intentó con remates de media distancia que asustaron a Alisson y sus toques deleitaron a los asistentes al Roberto Meléndez. Se entendió con Radamel Falcao García, quien también hizo un buen compromiso y salió aplaudido.

Otro que merece letras es Carlos Cuesta, el defensor de 22 años del Genk belga, quien se ganó el puesto contra Chile y no lo va a soltar. Siempre está correctamente perfilado y ubicado, luce impasable y, además, sabe dar pases certeros hacia adelante. Delante de él, Wílmar Barrios, el que siempre juega bien. Es el eje del mediocampo. Releva a todos, recupera y pasa bien.

Y, atrás de todos, el salvador de siempre: David Ospina, que con sus atajadas evitó la caída de la portería nacional en un partidazo entre dos selecciones que buscaron adueñarse de la pelota y del dominio, que no fueron mezquinas y no jugaron a empatar. Que brindaron espectáculo en ambos campos y que cuentan con esos gambeteadores que derrumbas las planificaciones tácticas.

(¡Un respiro para Colombia! Bolvia le ganó a Perú en La Paz)

Luis Díaz volvió a eludir a varios contrincantes y multiplicó los ya acostumbrados elogios hacia él. Del otro lado, Neymar demostró que es uno de los mejores del mundo: entiende conceptualmente el juego y utiliza sus habilidades para romper defensas. En Brasil lo hace con sus constantes combinaciones con el talentoso Lucas Paquetá.

Fue 0-0, pero hubo múltiples opciones de gol y de emociones cerca de los arcos, gracias a que en el verde césped estuvieron los que mejor entienden el juego y mejor tratan la pelota en pro de las acciones ofensivas. Incluso, los que ingresaron desde el banco. De hecho, Duván Zapata tuvo la oportunidad de tomar revancha de la ocasión perdida ante Uruguay y por poco anota en una jugada que se inventó. Y también le sirvió a Santos Borré un balón que terminó en la tribuna.

Brasil, la líder de la eliminatoria con 28 puntos y cero partidos perdidos, recibe el jueves a Uruguay. Colombia, con 15 unidades y todavía en la quinta posición (repechaje), será local a las 4:00 p. m. contra Ecuador, combinado que decretó la salida del portugués Carlos Queiroz tras el humillante 6-1 en Quito. La lección vuelve a ser que el “10″ es el camino.

Alineaciones:

Colombia:

Brasil: