Endrick Felipe, la joya de Brasil, habló sobre Messi y del duelo contra Argentina

Endrik Felipe llegó a la convocatoria de la selección de Brasil con una sonrisa inmensa y un montón de comparaciones con Pelé; con una maleta de mano gris, con rombos negros, pequeños; con una camisa tipo polo blanca adornada con dos líneas verdes delgadas y una línea roja en medio, en las mangas, y un pequeño cuello del mismo color.

Vistiendo un pantalón negro, liso, y unos zapatos blancos, que hacían juego con su camisa. Llegó con la idea de hacer historia, de ayudar a su selección a ir a un nuevo mundial; y con el sueño de mantener la historia de Brasil en mundiales intacta, pues la canarinha es la única selección que ha ido a todas las ediciones del torneo, la única selección en ganar 5 veces el título, la que ostenta el récord de máximas victorias conseguidas, 76; la más orgullosa, la más radical y la más exigente.

Endrick llegó a la selección de su país con 17 años, siendo campeón Paulista con Palmeiras y habiendo ya conseguido también ganar la Supercopa de Brasil. Llegó con el compromiso de jugar contra la selección de Colombia y contra la selección de Argentina en dos fechas de eliminatorias duras, extenuantes y exigentes, con los ánimos del equipo derrumbados, con sensaciones de indiferencia y debilidad, con zozobra y letargo, pero también con el deseo de cumplirle a su país, a sí mismo y a sus fanáticos.

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Debutó al minuto 36 del segundo tiempo contra Colombia, en un partido adormilado y esquizofrénico, con el marcador en contra tras los dos goles de Luis Diaz y el tanto tempranero de Gabriel Martinelli. Entró al campo cuando todo parecía perdido, cuando los cánticos del estadio lograban silenciar cualquier réplica.

Endrick Felipe entró al Metropolitano con 17 años, 3 meses y 27 días, y se convirtió en el cuarto jugador más joven en debutar con la canarinha, dejando atrás a Ronaldo “El Fenómeno”, y quedando por detrás de Philippe Coutinho, Edú y Pelé, que debutó en 1957 contra Argentina, con apenas 16 años 8 meses y 14 días.

Ahora, luego de la derrota, donde apenas pudo rozar el césped por 10 minutos, no queda nada para reprochar. Brasil se encuentra quinto en la tabla clasificatoria, pero aún quedan demasiados partidos, muchos minutos, e incontables oportunidades.

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Tanto Endrick como sus compañeros ya piensan en Argentina, que viene herida tras la sorpresiva derrota contra Uruguay, que acabó con su invicto de 25 partidos sin perder en eliminatorias sudamericanas. Uruguay, que es verdugo perenne de los grandes equipos y de las estadísticas; que acabara también con el invicto de Brasil en este mismo certamen, cuando la verdeamarela acumulaba 37 partidos sin perder.

“Messi es fenomenal, el mejor del mundo hoy y poder jugar contra él, verlo de cerca, será maravilloso” dijo Endrick, con una sobriedad imposible, para continuar diciendo que, “Pelé sigue siendo único y nadie va a llegar cerca de lo que él hizo”.

“Siempre será O’Rei” concluyó, para disipar cualquier duda o malinterpretación, y añadiendo al final que siempre quiso jugar con el Real Madrid, que Cristiano Ronaldo es su ídolo y que está orgulloso de saber que defenderá los colores del equipo merengue.

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Brasil juega contra Argentina por la sexta fecha de las eliminatorias mundialista el martes 21 de noviembre en el estadio Maracaná a las 7:30 pm. Lionel Messi, Lionel Scaloni y el plantel que salió campeón del mundo en Catar y campeón de América buscarán derrotar por primera vez a Brasil en unas eliminatorias en casa de los canarinhos, cosa que jamás en la historia ha ocurrido.

La última vez que se enfrentaron en casa de la canarinha por eliminatorias, rumbo a Rusia, la albiceleste terminó perdiendo 3-0, con goles de Coutinho, Neymar Junior y Paulinho.

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Endrik Felipe llegó a la convocatoria de la selección de Brasil con una sonrisa inmensa y un montón de comparaciones con Pelé; con una maleta de mano gris, con rombos negros, pequeños; con una camisa tipo polo blanca adornada con dos líneas verdes delgadas y una línea roja en medio, en las mangas, y un pequeño cuello del mismo color.

Vistiendo un pantalón negro, liso, y unos zapatos blancos, que hacían juego con su camisa. Llegó con la idea de hacer historia, de ayudar a su selección a ir a un nuevo mundial; y con el sueño de mantener la historia de Brasil en mundiales intacta, pues la canarinha es la única selección que ha ido a todas las ediciones del torneo, la única selección en ganar 5 veces el título, la que ostenta el récord de máximas victorias conseguidas, 76; la más orgullosa, la más radical y la más exigente.

Endrick llegó a la selección de su país con 17 años, siendo campeón Paulista con Palmeiras y habiendo ya conseguido también ganar la Supercopa de Brasil. Llegó con el compromiso de jugar contra la selección de Colombia y contra la selección de Argentina en dos fechas de eliminatorias duras, extenuantes y exigentes, con los ánimos del equipo derrumbados, con sensaciones de indiferencia y debilidad, con zozobra y letargo, pero también con el deseo de cumplirle a su país, a sí mismo y a sus fanáticos.

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Debutó al minuto 36 del segundo tiempo contra Colombia, en un partido adormilado y esquizofrénico, con el marcador en contra tras los dos goles de Luis Diaz y el tanto tempranero de Gabriel Martinelli. Entró al campo cuando todo parecía perdido, cuando los cánticos del estadio lograban silenciar cualquier réplica.

Endrick Felipe entró al Metropolitano con 17 años, 3 meses y 27 días, y se convirtió en el cuarto jugador más joven en debutar con la canarinha, dejando atrás a Ronaldo “El Fenómeno”, y quedando por detrás de Philippe Coutinho, Edú y Pelé, que debutó en 1957 contra Argentina, con apenas 16 años 8 meses y 14 días.

Ahora, luego de la derrota, donde apenas pudo rozar el césped por 10 minutos, no queda nada para reprochar. Brasil se encuentra quinto en la tabla clasificatoria, pero aún quedan demasiados partidos, muchos minutos, e incontables oportunidades.

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Tanto Endrick como sus compañeros ya piensan en Argentina, que viene herida tras la sorpresiva derrota contra Uruguay, que acabó con su invicto de 25 partidos sin perder en eliminatorias sudamericanas. Uruguay, que es verdugo perenne de los grandes equipos y de las estadísticas; que acabara también con el invicto de Brasil en este mismo certamen, cuando la verdeamarela acumulaba 37 partidos sin perder.

“Messi es fenomenal, el mejor del mundo hoy y poder jugar contra él, verlo de cerca, será maravilloso” dijo Endrick, con una sobriedad imposible, para continuar diciendo que, “Pelé sigue siendo único y nadie va a llegar cerca de lo que él hizo”.

“Siempre será O’Rei” concluyó, para disipar cualquier duda o malinterpretación, y añadiendo al final que siempre quiso jugar con el Real Madrid, que Cristiano Ronaldo es su ídolo y que está orgulloso de saber que defenderá los colores del equipo merengue.

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La última vez que se enfrentaron en casa de la canarinha por eliminatorias, rumbo a Rusia, la albiceleste terminó perdiendo 3-0, con goles de Coutinho, Neymar Junior y Paulinho.

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