La montaña rusa de James Rodríguez: el viaje de un ídolo entre éxitos y caídas
Desde su salida de Real Madrid, el 10 ha pasado por cinco clubes sin alcanzar la estabilidad ni recuperar el brillo que lo convirtió en una estrella mundial.
Kevin Stiven Ramírez Quintero
Nadie lo vio venir. James Rodríguez parecía destinado a convertirse en leyenda en el fútbol mundial. Su calidad y talento nunca estuvieron en duda; era un genio con la pelota. Desde niño, tuvo la magia en sus pies y el atrevimiento de soñar en grande.
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Nadie lo vio venir. James Rodríguez parecía destinado a convertirse en leyenda en el fútbol mundial. Su calidad y talento nunca estuvieron en duda; era un genio con la pelota. Desde niño, tuvo la magia en sus pies y el atrevimiento de soñar en grande.
A los 14 años, debutó como profesional con Envigado en 2006, dejando claro que estaba hecho para cosas grandes. En 2008, su talento lo llevó a Banfield, un modesto club argentino al que, contra todo pronóstico, guió hacia su primer y único título de liga en 2009, convirtiéndose en un ídolo para sus hinchas.
Su talento lo llevó a Europa, donde se unió al Porto, un equipo con figuras como Radamel Falcao y Freddy Guarín. Allí, James no solo creció como jugador, sino que se consolidó como una estrella al ganar todos los títulos locales posibles y una Europa League. Era imparable.
En la selección, su ascenso fue igual de acelerado. Capitán y campeón del Torneo Esperanzas de Toulón en 2011, figura en el Mundial Sub-20 ese mismo año y debutante con la selección de mayores en una inolvidable victoria ante Bolivia en La Paz. Colombia lo adoptó como su figura, y James no decepcionó. Fue el alma de la Tricolor en las Eliminatorias rumbo a Brasil 2014 y luego, en el Mundial, se consagró. Seis goles, la bota de oro, un premio Puskás por ese golazo a Uruguay, y la sensación de que estábamos presenciando el nacimiento de una leyenda que trascendería generaciones.
Era lógico que los gigantes de Europa pelearan por su firma. Y aunque James tuvo ofertas del PSG y el Manchester City, eligió a Real Madrid. Quería la gloria absoluta. Con la camiseta número 10, se presentó como la gran joya del club blanco, y en su primera temporada cumplió: 17 goles, 18 asistencias y un lugar en el once ideal junto a Cristiano Ronaldo, Karim Benzema y Gareth Bale. Su talento era innegable, y su futuro parecía tan brillante como su zurda.
Pero entonces, el guion cambió, y su luz comenzó a apagarse. Todo parecía marchar bien hasta que las diferencias con Zinedine Zidane marcaron el principio del fin en el Real Madrid. El 11 de julio de 2017, se oficializó su cesión al Bayern Múnich por dos temporadas con opción de compra, donde tuvo un resurgir bajo la dirección de Carlo Ancelotti.
En el gigante alemán, James mostró destellos de su talento, siendo parte del equipo principal e incluso marcándole un gol al Real Madrid en la Champions League. Sin embargo, ya no brillaba igual. Las lesiones, la falta de adaptación a la cultura alemana y las tensiones con los entrenadores comenzaron a pasar factura.
Aunque tuvo la posibilidad de fichar por Atlético de Madrid, esta opción nunca se concretó, y terminó regresando a Real Madrid, donde apenas jugó ocho partidos, anotando un gol y dando una asistencia, en lo que fue un cierre gris a su etapa en el club blanco, del que se despidió en septiembre de 2020.
La travesía inestable de James Rodríguez
Luego de varios partidos sin jugar en el Madrid, James llegó al Everton en septiembre de 2020, reencontrándose con Carlo Ancelotti, quien le devolvió algo de brillo a su juego. En 26 partidos con los “Toffees”, James anotó seis goles y dio ocho asistencias. Pero su estadía en Inglaterra fue corta. Cuando Ancelotti regresó al Real Madrid y Rafa Benítez asumió como técnico del Everton en junio de 2021, James perdió protagonismo. El español le dijo que no lo tendría en cuenta, y el colombiano cerró su ciclo en Goodison Park en busca de un nuevo comienzo.
En septiembre de 2021, James dejó Europa tras más de una década. Firmó con el Al-Rayyan de Catar, donde, aunque mostró chispazos de su talento, las lesiones y la falta de continuidad limitaron su impacto. En 16 partidos, anotó cinco goles y dio siete asistencias. En septiembre de 2022, tras una charla con Néstor Lorenzo en busca de recuperar su lugar en la selección de Colombia, rescindió su contrato con el club catarí y regresó al fútbol europeo.
El 15 de septiembre de 2022, James fichó por el Olympiacos de Grecia, aceptando una significativa rebaja salarial y un contrato por un año con opción a extenderlo. Sin embargo, los problemas con un técnico interino lo llevaron a rescindir su contrato el 13 de abril de 2023. En total, jugó 23 partidos con el club helénico, anotando cinco goles y aportando seis asistencias.
Tras varios meses sin actividad, James firmó con el São Paulo en julio de 2023, despertando grandes expectativas en uno de los clubes más históricos de Brasil. Aunque aportó dos goles y cuatro asistencias en 22 partidos, su paso por el fútbol brasileño no cumplió con las expectativas y rescindió su contrato. Pese a ello, brilló como el mejor jugador de la Copa América 2024, siendo el cerebro de la Colombia subcampeona, con un gol y seis asistencias.
En busca de un retorno a la élite, James sorprendió al mundo al fichar por Rayo Vallecano en septiembre de 2024. Regresó a Madrid, esta vez con el modesto club de Vallecas. Sin embargo, no estuvo en los planes del técnico Íñigo Pérez. En LaLiga disputó solo seis partidos, uno como titular, y jugó un partido de Copa del Rey ante el Unionistas de Salamanca, donde dio su única asistencia. Acumuló apenas 205 minutos, sin lograr anotar. Su paso por el Rayo terminó en diciembre de 2024 con la sexta rescisión de contrato de su carrera, la cuarta relacionada con diferencias con entrenadores.
Desde su salida del Real Madrid en 2020, James jugó 94 partidos de clubes en cuatro años, anotando 18 goles y dando 28 asistencias. Su trayectoria reciente refleja un declive inesperado para un futbolista de su calibre, marcado por problemas de adaptación, lesiones y conflictos con entrenadores como Zinedine Zidane, Rafa Benítez, Luis Zubeldía e Íñigo Pérez.
Hoy, a los 33 años, James Rodríguez es agente libre, y su futuro es incierto. Clubes como Boca Juniors de Argentina, América de México, equipos de la MLS o incluso el Junior de Barranquilla suenan como posibles destinos. Sin una cláusula de rescisión de por medio, las negociaciones ahora se centrarán únicamente en su contrato.
En una carrera que comenzó en 2006 con Envigado, James ha disputado 511 partidos, anotado 121 goles y dado 156 asistencias. Ha ganado 26 títulos con equipos como Banfield, Porto, Mónaco, Real Madrid y Bayern Múnich. Con la selección de Colombia, suma 29 goles y 36 asistencias en 110 encuentros, consolidándose como uno de los máximos referentes del fútbol nacional.
James Rodríguez es una gran figura, pero también una paradoja. Su talento siempre fue incuestionable, pero su carrera, que tocó la cima, también estuvo marcada por caídas inesperadas. El país que un día vibró con su magia aún sueña con verlo renacer, porque en el corazón de todos los colombianos, el 10 siempre tendrá un lugar especial y, sin duda, será clave en el Mundial de 2026.
Junior de Barranquilla quiere al 10 de la selección
Fuad Char, uno de los principales accionistas de Junior de Barranquilla, aseguró este martes a la emisora W Radio que el empresario Christian Daes, dueño de la compañía Tecnoglass, que fabrica vidrios, es el enlace con el ‘10′ y está impulsando la negociación.
”Él (Daes) está viniendo a Barranquilla y me aseguró ayer que es posible que James venga a Barranquilla. Si no (llega) esta tarde, sería mañana para conversar con él y definir su contrato”, afirmó el directivo, quien se mostró optimista por fichar al exjugador del Real Madrid.
Char manifestó que el entrenador del Junior, el venezolano César Farías, “está entusiasmadísimo” por el eventual fichaje del futbolista de 33 años.
”Él quiere coger a James, trabajarlo, ponerlo en un estado físico, no para correr 70 metros, sino para utilizar su inteligencia, su magia, para poner la pelota donde quiera. Estamos tratando de que Farías converse con James también una vez (el futbolista) llegue a la ciudad”, expresó.
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