Lille, Mónaco y Leicester City son tres de los ejemplos de pequeños equipos que han derrotado a conjuntos grandes del fútbol moderno.
Foto: Agencia AFP
En medio de la polémica desatada en los últimos meses por la propuesta de la Superliga, que buscaba marcar una distancia entre los llamados equipos fundadores y los clubes más pequeños de Europa, el fútbol, con el triunfo del Lille contra PSG en la liga de Francia, nos demostró, una vez más, que en cualquier torneo, disputa o partido importa más la competitividad que el dinero.
Por Fernando Camilo Garzón - @FernandoCGarzon
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