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El histórico futbolista y ahora dirigente del Bayern Múnich, Karl-Heinz Rummenigge, aseguró que el creciente número de partidos en el calendario futbolístico se debe a que los jugadores exigen “salarios cada vez más mayores”.
En una entrevista concedida a la revista deportiva ‘Kicker’, el retirado delantero incidió en que dicha reclamación fuerza “a los clubes a generar ingresos” también “cada vez mayores”, los cuales, según su opinión, vienen de disputar “más partidos”.
“Los jugadores y sus asesores han caído en esta trampa”, puso de manifiesto Rummenigge, a la vez que apresuró que “sería bueno que todos los involucrados se sentaran a la mesa y discutieran sin emociones qué mecanismos” necesitan “para lograr tiempos más serios y racionales, también en los negocios”.
Al igual que formuló la pasada semana Jan-Christian Dreesen, director ejecutivo del club bávaro, el exmandatario también se mostró partidario del nuevo formato del Mundial de clubes: “Este torneo, que se celebrará por primera vez de esta forma el próximo año, inspirará a la gente. Será un buen torneo, estoy convencido. Y solo se lleva a cabo cada cuatro años, algo que toca tener en la cuenta”.
Elogios a Kompany
Por otro lado, Rummenigge se mostró “muy contento en términos deportivos” con la tarea desarrollada en el arranque de temporada por el nuevo técnico, el belga Vincent Kompany, ya que, con él en el banquillo, asegura que han “encontrado el camino de regreso a una cultura positiva y divertida”.
“Me gusta esta alta presión. Me recuerda a los tiempos de Jupp Heynckes, Pep Guardiola, Carlo Ancelotti o Hansi Flick, cuando celebrábamos este tipo de fútbol divertido. Nuestro juego no solo ha vuelto a ser atractivo, sino que también se puede sentir la alegría de los espectadores en el estadio y de los jugadores”, apuntó el exjugador.
En ese sentido, remarcó que “se trata de un doble efecto que no estuvo presente la temporada pasada”, en alusión a la etapa del anterior técnico y nuevo seleccionador inglés Thomas Tuchel, y que “este es el gran logro de Kompany, que convenció a los jugadores con su forma de jugar al fútbol”.
Preguntado por cómo se fraguó la contratación del belga, Rummenigge puso énfasis en sus conversaciones con el entrenador del Manchester City Pep Guardiola, exentrenador del Bayern y del propio Kompany en el club británico, en las que recomendaba su fichaje.
“Max Eberl —director deportivo del club— me pidió que hablara con él, ya que soy muy amigo de Pep. Le dije a Pep que necesitaba un análisis que fuera auténtico y honesto. Luego hablamos por teléfono durante casi dos horas. Para abreviar la conclusión: dijo que estaba convencido al cien por cien de que Vincent Kompany era absolutamente el entrenador adecuado para el Bayern”, explicó
El que fuera Balón de Oro acentuó que “los frecuentes rechazos”, en alusión a las negativas recibidas por los técnicos sondeados por el Bayern tras la salida de Tuchel, “que desgraciadamente tuvo que aceptar Max Eberl hicieron que al final”, según Rummenigge, se lanzaran a por el entrenador que “exactamente” necesitaban.
“Hay dos factores decisivos: el equipo se divierte con su forma de jugar al fútbol y los aficionados también. El fútbol tiene que ser divertido. Precisamente por eso los niños juegan al fútbol en la calle. Y eso también se puede ver en nuestro equipo. A veces el destino te ayuda”.
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