Los US$100 millones que enredan a dirigentes de Conmebol por Copa América

Luego de que siete dirigentes de la Fifa fueran detenidos este miércoles en Zúrich (Suiza) –debido a un caso de fraude, estafa y lavado de dinero investigado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos– este jueves trascendió que diez dirigentes de la Conmebol habrían cobrado presuntamente sobornos por la adjudicación de los derechos comerciales de las próximas cuatro ediciones de la Copa América.

Así lo dio a conocer el diario El País de España, tras revisar el documento con el que la fiscal general de EE.UU., Loretta Lynch, sustentó la investigación. En uno de los apartes, referidos a la Copa América, se dice que la empresa Datisa pagó 100 millones de dólares para sobornar en 2013 a los presidentes de las asociaciones nacionales de fútbol de los diez países que integran la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).

Según el documento, Datisa, la empresa que agrupa a las firmas Torneos y Competencias, Traffic y Full Play, “pagó sobornos por cerca de US$100 millones a Conmebol para quedarse con los derechos de transmisión y mercadeo de las próximas cuatro ediciones de evento”.

De acuerdo con el medio de comunicación, los pagos habrían se habrían realizado en 2013 y se habrían tranzado así: 20 millones por la firma del contrato y otros 20 millones por cada edición de la Copa América: de Chile 2015, EE.UU. 2016 –para celebrar el centenario del trofeo–, Brasil 2019 y Ecuador 2023.

Los 100 millones de dólares se habrían repartido de la siguiente manera: alrededor de 15 millones para el entonces presidente de la Conmebol, Eugenio Figueredo –uno de los siete arrestados este miércoles– otros 15 para el fallecido Julio Grondona, líder de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y una cifra similar para el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CFB), José María Marín, también detenido.

El resto del dinero se habría desembolsado en pagos de 7,5 millones para los jefes de las asociaciones de fútbol de Colombia, Luis Bedoya; los entonces jefes de las asociaciones del fútbol de Paraguay, Juan Ángel Napout, y de Perú, Manuel Burga; y para los actuales líderes de Bolivia, Carlos Alberto Chávez; de Chile, Sergio Jadue; de Ecuador, Luis Chiriboga y de Venezuela, Rafael Esquivel, otro de los encarcelados. 

Luego de que siete dirigentes de la Fifa fueran detenidos este miércoles en Zúrich (Suiza) –debido a un caso de fraude, estafa y lavado de dinero investigado por el Departamento de Justicia de Estados Unidos– este jueves trascendió que diez dirigentes de la Conmebol habrían cobrado presuntamente sobornos por la adjudicación de los derechos comerciales de las próximas cuatro ediciones de la Copa América.

Así lo dio a conocer el diario El País de España, tras revisar el documento con el que la fiscal general de EE.UU., Loretta Lynch, sustentó la investigación. En uno de los apartes, referidos a la Copa América, se dice que la empresa Datisa pagó 100 millones de dólares para sobornar en 2013 a los presidentes de las asociaciones nacionales de fútbol de los diez países que integran la Confederación Sudamericana de Fútbol (Conmebol).

Según el documento, Datisa, la empresa que agrupa a las firmas Torneos y Competencias, Traffic y Full Play, “pagó sobornos por cerca de US$100 millones a Conmebol para quedarse con los derechos de transmisión y mercadeo de las próximas cuatro ediciones de evento”.

De acuerdo con el medio de comunicación, los pagos habrían se habrían realizado en 2013 y se habrían tranzado así: 20 millones por la firma del contrato y otros 20 millones por cada edición de la Copa América: de Chile 2015, EE.UU. 2016 –para celebrar el centenario del trofeo–, Brasil 2019 y Ecuador 2023.

Los 100 millones de dólares se habrían repartido de la siguiente manera: alrededor de 15 millones para el entonces presidente de la Conmebol, Eugenio Figueredo –uno de los siete arrestados este miércoles– otros 15 para el fallecido Julio Grondona, líder de la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) y una cifra similar para el presidente de la Confederación Brasileña de Fútbol (CFB), José María Marín, también detenido.

El resto del dinero se habría desembolsado en pagos de 7,5 millones para los jefes de las asociaciones de fútbol de Colombia, Luis Bedoya; los entonces jefes de las asociaciones del fútbol de Paraguay, Juan Ángel Napout, y de Perú, Manuel Burga; y para los actuales líderes de Bolivia, Carlos Alberto Chávez; de Chile, Sergio Jadue; de Ecuador, Luis Chiriboga y de Venezuela, Rafael Esquivel, otro de los encarcelados.