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Virus y estadios vacíos
La pandemia provocó una suspensión inédita del torneo americano. El 12 de marzo la Conmebol anunció el parón de la Libertadores por el embate del covid-19, que empezaba a golpear a Sudamérica.
Para entonces se habían jugado dos fechas de la fase de grupos que dejó juegos memorables: el 0-0 en el clásico de Porto Alegre entre Gremio e Internacional, que terminó con ocho expulsados, o la goleada 8-0 de River Plate al Binacional peruano.
El balón volvió a rodar el 15 de septiembre, aunque con las vibrantes barras sudamericanas lejos de las gradas.
La final en el mítico Maracaná, de Rio de Janeiro, será sin público, aunque la Conmebol estimó que estarán presentes alrededor de 5.000 personas entre árbitros, jugadores, técnicos, asistentes, dirigentes, staff operativo, seguridad, técnicos, periodistas, acreditados por los patrocinadores e invitados especiales.
Tercera final brasileña
El clásico paulista entre Santos y Palmeiras será la tercera final brasileña en la Libertadores. La primera fue en 2005, cuando chocaron Athletico Paranaense y Sao Paulo, con victoria para el tricolor paulista. La segunda fue en la edición siguiente, en 2006, entre Sao Paulo e Internacional, con triunfo del colorado gaúcho.
Solo hay otro antecedente de una final entre equipos del mismo país: el superclásico argentino River-Boca, en 2018, que se disputó en Madrid. Los millonarios alzaron la Copa.
¿Reconquista europea?
Si Palmeiras gana, el portugués Abel Ferreira se convertirá en el tercer técnico europeo en alzar el trofeo americano. Su compatriota Jorge Jesús la ganó con el Flamengo en la edición pasada. El croata Mirko Jozic fue el primero, en 1991, con el Colo Colo chileno. Las otras 58 ediciones fueron ganadas por entrenadores sudamericanos.
Por la doble corona
Alexi Stival “Cuca” podría sentarse en una exclusiva silla: la de los trece técnicos con dos o más Libertadores en su vitrina. El DT del Santos ganó su primera Copa con el Atlético Mineiro de Ronaldinho en 2013.
Cuatro compatriotas suyos consiguieron esa hazaña: Lula con el Santos de Pelé (1962, 1963), Telê Santana con Sao Paulo (1992, 1993), Paulo Autuori con Cruzeiro (1997) y Sao Paulo (2005) y Luiz Felipe Scolari con Gremio (1995) y Palmeiras (1999).
El máximo ganador, desde los banquillos, es el argentino Carlos Bianchi: tres con Boca Juniors y una con Vélez Sarsfield.
Premio récord
El ganador de la edición 61 de la Libertadores recibirá 15 millones de dólares, la cifra más alta de la historia de la competición, indicó el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez.
El campeón recibirá en total 22 millones, si se suman los premios recibidos a lo largo de la competición.
Transmisión histórica
La final se transmitirá a 191 países, un hito para el fútbol sudamericano, según la Conmebol. El cotejo además podrá ser visto en vuelos comerciales y cruceros.
Tetracampeón brasileño
El Peixe podría convertirse en el primer tetracampeón brasileño de la Libertadores. Santos ganó las ediciones de 1962, 1963 y 2011, y empata con Sao Paulo y Gremio como los máximos vencedores de Brasil.
De ganar, aún estará lejos del mayor ganador, el argentino Independiente de Avellaneda, con siete. Lo siguen Boca, con seis, y Peñarol de Uruguay, con cinco.
Tercer venezolano
Salvo algún imprevisto, el 10 del Santos, Yeferson Soteldo, será el tercer venezolano en disputar una final de Libertadores. El movedizo atacante de 23 años, internacional con la Vinotinto, es titular indiscutible del once de Cuca.
Soteldo grabará su nombre junto al del portero Rafael Dudamel, subcampeón con el colombiano Deportivo Cali en 1999, y del mediocampista Alejandro “El Lobo” Guerra, campeón con Atlético Nacional de Medellín en 2016.