Prueba superada: Brasil goleó a Bolivia en su debut en la Copa América

Con dos goles de Coutinho y uno de Everton, el seleccionado local se impuso 3-0 en un partido que solventó gracias a sus individualidades.

Redacción deportes
15 de junio de 2019 - 02:21 a. m.
Coutinho celebrando el segundo gol de los brasileños. / AFP
Coutinho celebrando el segundo gol de los brasileños. / AFP
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Acelerado, vehemente y sofocador. Así comenzó Brasil su debut frente a Bolivia en la Copa América 2019. Pero con los minutos, el rival se encerró y los locales perdieron la claridad de los primeros instantes, y aunque llegaron en par oportunidades el afán de marcar los hizo equivocarse, quitarse espacios entre ellos. Y los bolivianos se dedicaron a rechazar la pelota, a alejarla de su área. Y así se fue la primera etapa, con los jugadores brasileños abucheados por los hinchas, con las sonrisas de los visitantes por la labor decorosa hasta el momento.

Sin embargo, el equipo dirigido por Tite se fue adelante luego de que Néstor Pitana sancionara un penalti por una mano en el área boliviana. De hecho, el juez argentino no la vio por lo que recurrió al VAR para tomar una decisión. El video aclaró todo, Philippe Coutinho anotó el primer tanto y el panorama cambió no solo en la cancha sino en las tribunas.

Fue tal el envión anímico de los brasileños que tres minutos después, en el 53’, un centro de Firmino, que fue más un pase dirigido, terminó en la cabeza de Coutinho para el  2-0. Alegría en el banco, en las gradas y en el césped del Morumbí, pues el ir para adelante fue premiado.

Brasil, que no tuvo opciones en contra (Alisson fue un espectador más) tuvo premio por intentar por todo lado, por la derecha, por la izquierda, por el centro. Y Bolivia, muy a su estilo, no hizo nada, no tuvo con qué hacer nada. Y se limitó a no recibir más goles, a mantener la ventaja lo más modesta posible. Pero una jugada individual de Everton, hombre de Gremio, terminó en el 3-0 final. Un remate imposible para el portero Carlos Lampe, una anotación de otro partido

Los anfitriones, que fueron dueños del balón, como se esperaba desde antes que iniciara el duelo, se mostraron faltos de ideas, perdidos, pero, como la mayoría de veces, encontraron el camino gracias a sus individualidades, a sus instantes de brillo.

El marcador fue corto para una selección superior en cada línea, en cada nombre, en cada movimiento. Por ahora, sin gustar y en un encuentro que fue languideciendo, Brasil cumplió con el primer objetivo: ganar. Por ahora, Brasil extraña un poco a Neymar.

Por Redacción deportes

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