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A pesar de que el Balón de Oro es un título individual, sumar uno al palmarés de un equipo es un motivo para presumir la forma de jugar fútbol en un país. Gracias a los seis Balones de Oro de Messi con el Barcelona y los cinco de Cristiano Ronaldo ganados con la camiseta del Real Madrid, LaLiga es la primera división de fútbol europea con más de estos premios con un total de 59 trofeos.
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Sin embargo, 14 de los 44 jugadores ganadores han salido de equipos de la Serie A de Italia. A diferencia del caso español, los futbolistas están repartidos en tres clubes distintos: La Juventus, el A. C. Milán y el F. C. Internazionale, más conocido como el Inter de Milán. En los sesenta Omar Sívori, jugador del equipo de Turín, y Gianni Rivera, del Milán, fueron los primeros en ganarlo en 1961 y 1969, respectivamente. Pero durante las décadas de los ochenta y los noventa, trece de los veinte ganadores del Balón de Oro eran jugadores de alguno de estos tres equipos demostrando la hegemonía del fútbol italiano en Europa.
Juventus fue el equipo italiano que empezó con el periodo de control del premio en 1982. Paolo Rossi, delantero nacido en Prato, firmó con el club después de haber ganado el Mundial de España 1982 con la selección de Italia. Los seis goles marcados en siete partidos, le otorgaron el título de goleador y mejor jugador de la Copa del Mundo. Estos reconocimientos lo hicieron merecedor del Balón de Oro, veintiún años después de que un jugador del club lo ganara por última vez.
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El francés Michel Platini fue el primer jugador en la historia en ganar tres veces consecutivas el Balón de Oro. El primero de ellos lo obtuvo en 1983, el año siguiente de que Rossi ganara el galardón. El año más meritorio fue en 1984. El jugador de la Juve, fue campeón de Europa con la selección de Francia y anotó en los cinco partidos disputados en el torneo, con un acumulado de nueve goles. El último Balón que ganó en su carrera le fue otorgado tras haber sido campeón con la Juventus en la Liga de Campeones. En el minuto 75 de la final contra el Liverpool F.C., le dio la gloria al club por primera vez.
Roberto Baggio cerró el ciclo de jugadores italianos de ‘Las Cebras’ en ganar el premio. Durante las calificaciones para el Mundial de Estados Unidos 1994, el equipo de Italia fue el primero en su grupo y Baggio contribuyó con cuatro goles que le darían un boleto a la selección a la Copa Mundo el año siguiente. Además de esto en junio de 1993, año en el que se le fue otorgado el Balón de Oro, el delantero ganó con el club la Copa de la UEFA 92-93, algo que no pasaba desde 1990. Al superar a Eric Cantona y Dennis Bergkamp, Baggio se llevó su primer y único Balón de Oro a finales de 1993.
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El último de los jugadores de la Juventus de la década de los noventa en ganar fue el francés de ascendencia argelina Zinedine Zidane. En diciembre de 1998, a casi cinco meses del triunfo de la selección francesa en La Copa Mundo de Francia, le fue concedido el Balón de Oro. Adicional al triunfo en el mundial, Zidane hizo parte del equipo que ganó la Serie A, en las temporadas de 96-97 y 97-98.
El centrocampista Pavel Nedved fue quien ganó el último Balón de Oro con el equipo de Turín. Nedved ya había ganado el Balón de Oro de la República Checa en tres ocasiones, pero le faltaba el otorgado por la France Football. En la tabla final del Balón de Oro del 2003, el checo sobrepasó al jugador del Arsenal Thierry Henry y al italiano Paolo Maldini con una puntuación total de 190 puntos. Con Nedved se acabó el paso de la Juventus por el palmarés del premio.
Cuando Arrigio Sacchi llegó a dirigir el A.C. Milan, no hubo más que títulos y elogios para el club. El equipo del italiano contaba con jugadores como Franco Baresi, Roberto Mussi y el trío holandés de Frank Rijkaard, Ruud Gullit y Marco Van Basten. Estos últimos le darían un nuevo significado a la dorsal diez y nueve del Milan. Con el fichaje de Gullit, en julio del 1987, acabó la sequía de Balón de Oro para el equipo. El exjugador del PSV Eindhoven ganó el premio en su primera temporada con el Milan.
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Sin duda, la estrella de ‘los inmortales de Sacchi’ era Marco Van Basten.1988 fue el año del éxito del jugador, tanto así que se llevó su primer Balón de Oro. En Italia el Milan se llevó los dos títulos más importantes, la Serie A y la Supercopa Italiana. Van Basten también hizo parte de la selección holandesa ganadora de la Eurocopa de Alemania 88, en la cual quedó como goleador con un total de cinco anotaciones. La sumatoria de estos títulos le permitieron llevarse el premio superando a sus compañeros Franco Baresi y Frank Rijkaard.
El año siguiente, en 1989, ‘San Marco’ también fue el ganador del premio entregado en París. El principal motivo fue la Liga de Campeones 1988-1989; una de las mejores campañas del Milan en la historia del torneo. Su desempeño llevó al equipo a la final jugada en Barcelona contra el equipo rumano Steaua de Bucarest, partido que terminó cuatro goles a cero a favor del equipo de Van Basten. El delantero también fue el goleador de esta edición de la competición con diez goles en total. La Supercopa europea y la Intercontinental del 89, también fueron para los ‘Riojinegros’.
Las ediciones de 1990 y 1991, no fueron para el holandés debido al desempeño de dos jugadores en especial. En el primer año de la década de los noventa, fue para el alemán Lothar Matthäus, ganador del mundial de Italia 1990. El otro fue el delantero del Olympique de Marsella Jean-Pierre Papin, tras haber ganado la liga francesa y quedar como subcampeón de la Liga de Campeones 90-91.
Después de la salida de Sacchi como director y el ingreso de Fabio Capello, las cosas empezaron a cambiar. En la temporada 91-92, el Milan no logró mantener la Supercopa Italiana tras haber sido eliminados por la Juventus en semifinales. Sin embargo, en 1992, el equipo de Van Basten logró ganar la Serie A y de la mejor manera posible: en todo el torneo no perdió ni un solo partido. El holandés se volvió a consagrar como el máximo anotador con un total de 25 goles, lo que le permitió ganar su tercer y último Balón de Oro.
En 1995, cuando los jugadores de otros continentes empezaron a ser nominados al Balón de Oro, el liberiano George Weah fue el primer no europeo en ganar el premio. Esta entrega es una de las más controvertidas en la historia del galardón. Todo apuntaba que el ganador sería Alessandro del Piero, joven promesa de la Juventus ganador de la Serie A, Copa y Supercopa de Italia en la temporada 1994-1995. En cambio el trofeo fue para Weah, el recién llegado del Paris Saint-Germain al Milan, donde jugó cinco temporadas.
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Tuvieron que pasar nueve años para que un jugador del Milan volviera a ser condecorado como el mejor futbolista del año. En la entrega del Balón de Oro del 2006, seis jugadores del club fueron nominados y fue Andriy Shevchenko quien se llevó el trofeo. En el último año, el delantero de la selección de Ucrania, había ganado una Serie A y la Supercopa de Italia. Adicionalmente, Shevchenko hizo parte del equipo que le dio la sexta Liga de Campeones del club.
Ricardo Izecson dos Santos Leite, o simplemente Kaká, le dio al Milan su séptimo Balón de Oro. Con 25 años, el brasileño fue campeón de la Liga de Campeones y se consagró como el goleador de esa edición con diez anotaciones en total. También, en esa temporada ganó con el club la Supercopa de Europa y el Mundial de Clubes en Japón. Kaká, le arrebató el trofeo Cristiano Ronaldo, la naciente estrella del Manchester United.
El Inter de Milán solamente aportó dos jugadores de los catorce provenientes de la Serie A. El primero de ellos fue el mediocampista Lothar Matthäus ganador en 1990. El capitán de la selección de Alemania Occidental, llegaba de anotar cuatro goles en el mundial de Italia 1990 y llevarse el título después ganar la final ante Argentina. Matthäus quedó en el primer lugar en la clasificación final del Balón de Oro, por encima de su compañero de selección y equipo Andreas Brehme.
El otro jugador de los Nerazzurri es Ronaldo, el jugador más joven en ganar el Balón de Oro. El brasileño acababa de pasar por dos años de ensueño que veían de la mano de dos grandes títulos: la medalla olímpica de bronce en Atlanta 1996 y la quinta Copa América para Brasil en Bolivia el 29 de junio de 1997. A finales del 97, le fue entregado el premio en París. Cinco años más tarde, en el 2002, Ronaldo volvería a ganar el Balón de Oro, aunque esta vez con la camiseta del Real Madrid.
Kaká fue el último jugador de la Serie A en ganar el Balón de Oro, ya que a partir del 2008 llegaron Cristiano Ronaldo y Lionel Messi. El portugués y el argentino empezarían con un dominio total de este premio que, a la fecha, sigue vigente. Exceptuando la edición del 2018, donde el galardón fue otorgado al croata Luka Modric.
Para la entrega del Balón de Oro este 29 de noviembre hay cuatro grandes favoritos y todos de ligas distintas. El principal es Lionel Messi, jugador del Paris Saint-Germain, actual líder del fútbol francés. También la estrella de la Bundesliga, Robert Lewandowski ganador de La Bota de Oro 2020-2021. El delantero del Real Madrid Karim Benzema, nominado en diez ocasiones al Balón de Oro. Por último está Jorginho, ganador de la Eurocopa 2020 con Italia y la Champions League junto al Chelsea de Inglaterra.
