Sergio Busquets y Jordi Alba se despiden con una última victoria en el Camp Nou

En un día de despedidas, la de Sergio Busquets y de Jordi Alba y la del Camp Nou, el Barcelona se impuso ante el Mallorca 3-0, con dos tantos de Ansu Fati y uno de Gavi, que se convirtió en el último goleador en el ya viejo estadio azulgrana.

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Con 45 segundos, el equipo de Xavi Hernández tuvo suficiente para ponerse por delante, tras una combinación entre Busquets, Robert Lewandowski y Gavi, que regaló el gol a Ansu Fati. La actuación del 10, que heredó el número de Lionel Messi, también sonó a despedida. La alegría con la que sus compañeros celebraron los goles y las miradas de Ansu hacia la grada denotaron algo más.

En cada uno de los goles se puso la mano en el escudo, mientras el público coreaba su nombre y él saludaba a la grada. Así lo hizo en el 1-0 y también en el 2-0, en una deliciosa dejada de Lewandowski, que Ansu definió con calidad.

Inicialmente, el árbitro mostró amarilla al mallorquinista, aunque rectificó a instancias del VAR. Barcelona tuvo ocasiones con continuas llegadas, sobre todo desde la derecha con Ousmane Dembélé, que siempre desbordó a su par y sembró incertidumbre dentro del área.

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Después de una serie de llegadas ante la meta de Greif, el Barcelona encontró el 2-0 en el 24. De nuevo fue obra de Ansu Fati, que anotó su octavo tanto en el campeonato, tras una acción al primer toque y de Lewandowski.

Iniciando el segundo tiempo, Jules Koundé remató de cabeza al travesaño, Lewandowski falló solo ante Greif en el 57 y Sergi Roberto no aprovechó después de una gran acción individual en el 60.

A partir de entonces, el Mallorca se animó más, aunque apenas creó peligro ante la meta de Ter Stegen, que consiguió un récord histórico, ya que solo le anotaron cuatro goles en el Camp Nou en todo el campeonato, lo cual supone el mejor registro en casa desde la inauguración del estadio en la temporada 1956-57.

El 3-0 llegó en el 70, en otra acción de Dembélé, que puso el balón en el corazón del área y Gavi controló y disparó con la izquierda y poco antes Lewandowski había rematado nuevamente al travesaño, ahora tras un lanzamiento de falta.

Las últimas emociones en el Camp Nou se vivieron con las sustituciones de Alba y de Busquets. Alba, con lágrimas en los ojos, se retiró en el 79 y cinco minutos después Busquets, uno de los jugadores más importantes de la historia del Barça, también se despidió.

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En un día de despedidas, la de Sergio Busquets y de Jordi Alba y la del Camp Nou, el Barcelona se impuso ante el Mallorca 3-0, con dos tantos de Ansu Fati y uno de Gavi, que se convirtió en el último goleador en el ya viejo estadio azulgrana.

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En cada uno de los goles se puso la mano en el escudo, mientras el público coreaba su nombre y él saludaba a la grada. Así lo hizo en el 1-0 y también en el 2-0, en una deliciosa dejada de Lewandowski, que Ansu definió con calidad.

Inicialmente, el árbitro mostró amarilla al mallorquinista, aunque rectificó a instancias del VAR. Barcelona tuvo ocasiones con continuas llegadas, sobre todo desde la derecha con Ousmane Dembélé, que siempre desbordó a su par y sembró incertidumbre dentro del área.

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Después de una serie de llegadas ante la meta de Greif, el Barcelona encontró el 2-0 en el 24. De nuevo fue obra de Ansu Fati, que anotó su octavo tanto en el campeonato, tras una acción al primer toque y de Lewandowski.

Iniciando el segundo tiempo, Jules Koundé remató de cabeza al travesaño, Lewandowski falló solo ante Greif en el 57 y Sergi Roberto no aprovechó después de una gran acción individual en el 60.

A partir de entonces, el Mallorca se animó más, aunque apenas creó peligro ante la meta de Ter Stegen, que consiguió un récord histórico, ya que solo le anotaron cuatro goles en el Camp Nou en todo el campeonato, lo cual supone el mejor registro en casa desde la inauguración del estadio en la temporada 1956-57.

El 3-0 llegó en el 70, en otra acción de Dembélé, que puso el balón en el corazón del área y Gavi controló y disparó con la izquierda y poco antes Lewandowski había rematado nuevamente al travesaño, ahora tras un lanzamiento de falta.

Las últimas emociones en el Camp Nou se vivieron con las sustituciones de Alba y de Busquets. Alba, con lágrimas en los ojos, se retiró en el 79 y cinco minutos después Busquets, uno de los jugadores más importantes de la historia del Barça, también se despidió.

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