Unión Berlín y la “ostalgia” del fútbol alemán
El conjunto berlinés enfrenta esta tarde, desde las 3:00 p.m., al Saint-Gilloise belga por la vuelta de los octavos de final de la Europa League. Este 2023 tienen una oportunidad única de dejar un precedente tanto nacional como internacional.
Daniel Bello
En el fútbol moderno, especialmente en Europa, es frecuente que los equipos tradicionales monopolicen los títulos más importantes. Es normal que en las consideradas cinco grandes ligas los campeones sean los mismos de siempre, sobre todo en Alemania. Aun así, este deporte nos recuerda cada tanto que sigue siendo un deporte de once contra once, y que figurar también es algo que los más humildes pueden lograr sobre el césped.
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En el fútbol moderno, especialmente en Europa, es frecuente que los equipos tradicionales monopolicen los títulos más importantes. Es normal que en las consideradas cinco grandes ligas los campeones sean los mismos de siempre, sobre todo en Alemania. Aun así, este deporte nos recuerda cada tanto que sigue siendo un deporte de once contra once, y que figurar también es algo que los más humildes pueden lograr sobre el césped.
Por eso, la temporada del Unión Berlín no ha pasado desapercibida. Un equipo que hace menos de un lustro parecía estancado en la segunda división germana, hoy es un onceno que lucha por dar el batacazo a nivel nacional e internacional. Por lo pronto, el Union Saint-Gilloise belga es el próximo escalón a superar en esa escalera rumbo a la consagración en Europa League. La ida entre ambos finalizó en empate (3-3).
Los retos son algo que le gusta a este onceno, que este año ha visto a sus rivales directamente a los ojos. Vienen de eliminar al histórico Ajax en la ronda de play-offs y a nivel local, durante un par de jornadas, le arrebataron la punta de la Bundesliga al poderoso Bayern Múnich. Pese a que aún queda mucha tela por cortar en la temporada, Unión Berlín ha despertado orgullo en los simpatizantes de un país que ya no existe: la República Democrática de Alemania (RDA).
El equipo obrero
Este modesto equipo nació a comienzos del siglo pasado en la capital alemana y caracterizado como un reflejo de la clase obrera. Su color, entonces azul, se asemejaba al que utilizaban los trabajadores de la industria metalúrgica. En sus inicios no tuvo protagonismo deportivo y después de la Segunda Guerra Mundial fue refundado. Por esa misma razón, también se les conoce como Die Eisernen (Los de hierro).
En los sesenta, cuando Alemania estaba dividida en dos como consecuencia de su derrota, muchos de los integrantes del equipo huyeron a la parte occidental, la entonces República Federal, para refundar el club. Los que se quedaron en el este, donde el Partido Comunista era la autoridad, tuvieron un leve crecimiento hasta que el muro fue construido.
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Como integrante de la extinta Oberliga, la máxima categoría de fútbol de la RDA, Unión Berlín no destacó. No solo nunca fue campeón, sino que era considerado un equipo de media tabla. Lejos estuvo de la grandeza de su rival de patio, el Dínamo de Berlín, que era el equipo de la Stasi (el órgano de inteligencia de la extinta república).
Cuando la Guerra Fría terminó y Alemania volvió a ser una, los equipos de la Oberliga pasaron a formar parte del sistema de ligas del este. La mayoría de ellos tuvo que empezar desde el ascenso y muchos se perdieron en el ostracismo durante los últimos años e incluso hubo equipos que desaparecieron.
Aún hay dos Alemanias
Cuando el muro cayó y los alemanes no tuvieron una frontera entre sus paisanos, décadas de separación tuvieron secuelas. A diferencia de los territorios de “lado capitalista”, los exhabitantes de la RDA estaban quedados en temas como infraestructura o ingresos. Por la desigualdad entre este y oeste, los “excomunistas” se sentían ciudadanos de segunda clase en su país.
Con la victoria de occidente en la Guerra Fría, el bando perdedor tuvo que pagar los platos rotos. Muchas empresas tradicionales del este desaparecieron con la llegada de las multinacionales y el modelo de negocio que tenían los equipos de la extinta Oberliga los obligó a transformarse o perecer.
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Lo que era la Alemania del este, hoy es un recuerdo. Poco sobrevive de ese mundo en la actualidad y el Unión Berlín es un ejemplo de ello. Este modesto equipo es un ejemplo de la Ostalgie, que se refiere a la nostalgia de aspectos de la cultura y la cotidianidad que desaparecieron tras la Reunificación en el este (Ost en alemán).
Los grandes del fútbol de la RDA que todavía existen están perdidos en el ascenso alemán. El Unión, que estuvo cerca de quebrar a mediados de los noventa, fue rescatado por inversionistas y tras varios años entre tercera y segunda división, logró en 2019 el ascenso a la Bundesliga bajo la dirección del suizo Urs Fischer (aun en el cargo) y se convirtió junto al RB Leipzig en los únicos equipos de la extinta Alemania del este en participar en la élite teutona.
Una nueva rivalidad
Con el RB Leipzig hay una especie de corazón dividido en el este. Por un lado están los que sienten que ese equipo representa al este porque fue el primero que en mucho tiempo llegó a la primera división. Sin embargo, para los ‘ostálgicos’, ese equipo “compró su éxito”, pues al ser adquirido por la multinacional Red Bull en 2009, no se le puede considerar un equipo tradicional. Al ser los únicos representantes del oriente alemán, entre ambos equipos se ha cultivado una especie de rivalidad.
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El enfrentamiento más reciente entre ambos fue en las redes sociales. En enero, en la previa de un partido de Bundesliga, el Unión Berlin posteó, como es habitual, su alineación titular en twitter. A modo de broma, la cuenta del Leipzig respondió “¿Isco?”, como burla al fallido fichaje del español por parte de la escuadra berlinesa. Los de hierro no se quedaron callados y respondieron “¿Tradición?”, en una contundente referencia a la corta historia (14 años) del combinado sajón.
Mientras Leipzig y Unión escoltan al Bayern Múnich y al Borussia Dortmund en la lucha por la Bundesliga, los berlineses saben que hay otro reto entre manos: la Europa League. Después de hacerse con los servicios de Josip Juranovic y Aissa Laidouni (ambos de buen desempeño en Catar 2022) y potenciar a futbolistas como Sheraldo Becker y Diogo Leite, era claro que a diferencia de su pasado en la Oberliga, la apuesta era más que participar: ser un contendiente.
Unión Berlín representa hoy a una Alemania que por mucho tiempo se sintió excluida del espectáculo deportivo del país. Die Eisernen son un símbolo identitario no solo para las personas que vivieron y crecieron al este de un muro que ya no existe, sino a todo un universo de personas que se sienten olvidadas por las regiones más pudientes.
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