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El presidente de River, Rodolfo D'Onofrio, desafió el miércoles a su par de Boca, Daniel Angelici, a que desista de pedir los puntos del suspendido partido de vuelta de la final de la Copa Libertadores por violentos incidentes: "Dejá de presentar carillas (folios) y vení a jugar".
"Terminá con esto, dejá de presentar carillas, vení a jugar"
— TyC Sports (@TyCSports) November 28, 2018
D'Onofrio durísimo con Angelici. pic.twitter.com/JAHd8HwEno
Ambos clubes están pendientes de un fallo del Tribunal de Disciplina de la Conmebol en Asunción, después de agresiones a los fubolistas 'xeneizes' cuando llegaban en autobús el sábado al estadio riverplatense Monumental, que forzaron la suspensión del juego. El partido de ida había finalizado 2-2 en el estadio boquense la Bombonera.
La Conmebol decidió el martes que la revancha se debe jugar fuera de Argentina, en país a designar, el 8 ó 9 de diciembre, porque las condiciones de seguridad no están dadas.
La base del argumento de Angelici para que la Conmebol descalifique a River y le otorgue la Copa a Boca es que fueron atacados sus jugadores.
Dicho reglamento se aplicó contra Boca y en favor de River en un partido de vuelta de octavos de final de la Libertadores en 2015.
- Aquel partido 'picante' -
En aquel entonces, los jugadores de River fueron atacados con gas pimienta en la manga dentro de la cancha al salir al segundo tiempo (0-0). El responsable fue un hincha, con la complicidad de otros. Boca perdió los puntos y fue descalificado del torneo. Había perdido 1-0 el encuentro de ida.
El argumento de River ante el nuevo incidente que frustró el mayor superclásico argentino de todos los tiempos es que no se lo puede culpar por una agresión ocurrida a ocho calles del estadio, en un sector donde falló de manera insólita el dispositivo de seguridad policial. Decenas de hinchas lanzaron piedras y botellas contra el bus y lastimaron a los jugadores.
Por el fallido operativo policial renunció el ministro de Seguridad de Buenos Aires, Martín Ocampo.
D'Onofrio pide que el partido se juegue en el estadio Monumental y que el país "demuestre que lo puede organizar".
Boca dijo que no aceptará jugar en ningún lado y que si no le dan la razón llevará la protesta al tribunal de disciplina (TAS) de la FIFA.
- Que convoque Macri -
En otra crítica indirecta a Angelici, D'Onofrio recordó que el presidente de Boca firmó el sábado, en presencia del presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, un documento en el que se comprometían las partes a jugar el domingo el encuentro en el Monumental. D'Onofrio dijo que el presidente argentino, Mauricio Macri, exmandatario boquense, desea que el partido se juegue en el estadio de los 'millonarios'.
"Señor Presidente, convoque al presidente de Boca y dígale que el partido debe jugarse en Argentina. No somos unos vándalos", dijo el mandamás de River elevando el tono de voz, reflejo de su estado emocional.
Los tiempos del laberinto jurídico en que se encuentra la escandalosa final son incómodos a raíz de que el campeón de la Libertadores debe jugar el 18 de diciembre su primer partido por el Mundial de Clubes en Japón.