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El compromiso no tuvo mayores emociones y fue el fiel reflejo del camino que llevo hasta la final a Portugal, el cual a partir de la fase de grupos no ganó un solo partido durante los 90 minutos reglamentarios..
Mientras tanto Francia fue quien dominó en todas las fases del juego, pero se encontró con una defensa bien parada y con un Rui Patricio impecable.
La gran noticia que dejó el partido se dio a los 25 minutos cuando Cristiano Ronaldo se vio obligado de abandonar el campo luego de sufrir un golpe en la rodilla. El capitán de la selección de Portugal se retiró envuelto en lágrimas al ser consciente que no podía hacer nada para ayudar a su combinado en el sueño de conseguir su primera Eurocopa.
Ya en la segunda parte, los dueños de casa arriesgaron un poco más pero no fue suficiente para abrir el marcador. Portugal, sin su figura se limitó apostar por lo que más sabe hacer, aguantar y dejar que los minutos pasen para dejar todo en manos en la definición desde los dos pasos.
Sin apenas noticias de Griezmann, que no volvió a disparar hasta el minuto 59, y mucho menos de Paul Pogba, probablemente el jugador que más se ha devaluado en esta Eurocopa, Didier Deschamps recurrió a Kingsley Coman en busca de algo que sacudiese la final.
Y fue Coman el que propició la mejor ocasión, un centro medido a la cabeza de Griezmann, que el delantero del Atlético, solo, peinó por encima del larguero al minuto 66.
Sin una idea clara de cómo evitar la avalancha final francesa, Fernando Santos sacó al campo a Joao Moutinho, para tratar de tener más tiempo el balón.
No lo logró y la movilidad de Coman por ambas bandas comenzó a crearle problemas. Otra jugada del atacante del Bayern, rematada por Olivier Giroud y rechazada con otra buena intervención por Rui Costa, este aviso, al minuto 75.
Portugal entendió que no le bastaría con defender y buscó la sorpresa en los último tramo del encuentro. Hugo Lloris tuvo que responder a un centro-chut de Nani y la consiguiente media volea de Quaresma, en el primer acercamiento de los de Santos en todo el segundo tiempo (m.80). Y acto seguido, Rui Costa, de nuevo salvador, repelió un duro remate de Sissoko, el mejor de su equipo.
La opción más clara se dio en el minuto 91 cuando André-Pierre Gignac estrelló el balón en el palo de la mano derecha del portero portugués. El rebote no pudo conectarlo Griezmann que se lamentaba junto a los miles de aficionados franceses que observaban el encuentro,
De esta manera, el campeón se decidirá en el tiempo extra. Terreno que Portugual conoce bastante en esta Eurocopa tras no haber ganado ningun partido después de la fase de grupos en los 90 minutos.
Pero la igualdad duró hasta la segunda parte del tiempo complementario. El reloj marcaba 109 minutos cuando el delantero portugués Éder sacó un remate fortísimo desde fuera del área que dejó sin chance alguna a Hugo Lloris, quien instantes previos había salvado a su combinado tras un cabezazo de Pepe.
El partido continuaba y Francia se volcaba totalmente al ataque, tanto así que Portugal tuvo en el contragolpe como ampliar el resultado en varias ocasiones. A pesar de esto, los locales no pudieron darle una alegría a toda la gente que lleno el estadio en Paris.
Mark Clattenburg, arbitro inglés, dio el pitazo final y así los lusos consiguieron su primera Eurocopa en la historia luego de haber sido subcampeones en la edición del 2004 cuando oficiaron como anfitriones.
Ficha técnica:
Portugal: Rui Patricio; Cédric, Fonte, Pepe, Guerreiro; Joao Mario, Willian Carvalho, Renato (Éder, m.79), Adrien Silva (Moutinho, m.66); Nani, Ronaldo (Quaresma, m.25).
Francia: Llorís; Sagna, Koscielny, Umtiti, Evra; Matuidi, Pogba; Sissoko (Martial, m.110), Griezmann, Payet (Coman, m.58); Giroud (Guignac, m.78).
Gol: Éder (minuto 109)
Árbitro: Mark Clattenburg (Inglaterra). Amonestó a los portugueses Cédric, Joao Mario, Guerreiro, William Carvalho y Rui Patricio a los franceses Matuidi, Koscielny y Pogba.