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Cuarenta años de la última aparición de Muhammad Alí en el ring

En Nassau, Bahamas, el 11 de diciembre de 1982, Muhammad Alí tuvo su última pelea como boxeador profesional.

Valentina Fajardo
11 de diciembre de 2021 - 08:45 p. m.
El 26 de junio de 1979, a sus 36 años,  en una carta dirigida a la AMB, Mohammed Ali anunciaba la renuncia a su título mundial y su retiro del boxeo. / Getty Images
El 26 de junio de 1979, a sus 36 años, en una carta dirigida a la AMB, Mohammed Ali anunciaba la renuncia a su título mundial y su retiro del boxeo. / Getty Images
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En la historia del boxeo han existido muchas estrellas, pero ninguna tan grande como Muhammad Ali, el estadounidense que marcó un antes y un después en la historia de este deporte. Ali presentó una carrera increíble en el cuadrilátero lo vio tener muchas peleas memorables y momentos que aún se mantienen. El peso pesado que emocionó al mundo con su estilo de boxear, enfrentó 61 combates, 548 rounds y ganó el 61% de sus peleas por knock-out y siendo derrotado tan solo en cinco ocasiones. Sin embargo, nada es eterno en el mundo. El 11 de diciembre de 1982, el gran Muhammad Ali dio sus últimos golpes como boxeador profesional.

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Desde sus años como amateur, el llamado de nacimiento Cassius Clay, ya sabía lo que era ganar. Además de ganar vario campeonatos estatales, el boxeador de Kentucky se llevó la medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Roma 1960 con solo 18 años. Cuando llegó al país, la Louisville Sponsoring Group, un grupo conformado por once hombres adinerados, cada uno invirtió 2,800 dólares para convertirlo al profesionalismo en 1961.

El resto del despeño de Muhammad Ali en el ring ya es una leyenda: entre 1960 y 1971, ganó un total de 29 peleas. Fue 25 de febrero de 1964, cuando se consagró como uno de los grandes al vencer a Sonny Liston en Miami. Después de siete sets, el ahora convertido al Islam Mohamed Ali, ganó por un por KO técnico y obtuvo el título mundial de los pesados. Ahora empezó ser considerado como el campeón de los pesos pesados entre 1964-1971. Ali estaba en lo más alto de su carrera, pero el gobierno de Estados Unidos tenía otros planes para él.

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En 1967, tres años, dos meses y tres días después de coronarse campeón, Ali se negó a sumarse al ejército estadounidense para hacer parte de la guerra de Vietnam. Fue condenado por evasión de reclutamiento, se le sentenció a cinco años de prisión y una multa de 10,000 dólares. Por si eso no fuese poco, la Comisión Atlética del Estado de Nueva York le quitó el título mundial de peso pesado ganado a Sonny Liston en 1964 y su licencia de boxeador.

A partir de ese momento, Muhammad Ali estaría alejado del cuadrilátero, lo que le permitió luchar de otras maneras, especialmente por los derechos de los afroamericanos en el país. Se estima que en ese periodo, perdió cuatro millones de dólares por peleas no realizadas. Sin embargo, en septiembre de 1970, después de tres años y cinco meses de prisión, un juez de Texas determino la sanción impuesta por la Comisión Atlética del Estado de Nueva York como “arbitraria e irrazonable”. Esto hizo que se le otorgaran de nuevo sus títulos y la licencia para boxear.

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A pesar de que tuvo unos años tiempos, Ali no era el mismo que el de hace unos años, pero seguía luchado como cuando era joven. En febrero de 1978, perdió el título ante Leon Spinks en Las Vegas, Nevada. En septiembre del mismo año con 36 años, fue la revancha contra Spinks, donde logró recuperarlo desde de una pelea de 15 asaltos en Nueva Orleans, Luisiana.

El 26 de junio de 1979, a sus 36 años en una carta dirigida a la AMB anunciaba la renuncia a su título mundial y su retiro del boxeo. Después de una derrota ante el estadounidense Leon Spinks, Ali cedió cuenta que sus victorias por knock-out eran menos frecuentes. Sin embargo, ni el mundo ni él estaban listos para decir adiós. Nueve meses después de la carta de retirada, en marzo de 1980, El Champ decidió volver al cuadrilátero. Sin embargo, esta no fue la vuelta deseada, Ali fue humillado por el tirulo del Consejo Mundial de Boxeo durante diez asaltos por su amigo y excompañero Larry Holmes el 2 de octubre de 1980.

Finalmente, llegaría el 11 de diciembre de 1981 el día de su última pelea. A pesar de que los fanáticos todavía admiraban a Ali, ya no era el gran favorito. El jugador de Kentucky, solo logró cuatro millones de dólares con sus promotores. El que ahora tenía el apoyo total de público era el jamaiquino de 27 años Trevor Berbick. En Nassau, Bahamas, Alí Cayó por decisión unánime en diez rondas y decidió que ahora si llegaba el momento del colgar los guantes. El 12 de diciembre de 1981, la retirada de Muhammad Ali se hizo oficial.

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Su retirada fue poco digna respecto a la grandeza de su carrera de más de 20 años. En 1984, tres años después de su última pelea, se le confirmó el Parkinson después de varias pruebas médicas. Los médicos especularon que podría haber contraído la enfermedad debido a demasiados golpes en la cabeza durante toda su vida deportiva. Aunque el Parkinson cambio el curso de su vida, esto no le impidió continuar con lo que venía haciendo desde hace años: luchar por la justicia social.

Muhammad Ali realizó varios viajes para el mantenimiento de la paz, el apoyo a UNICEF y las Olimpiadas Especiales y grandes esfuerzos de recaudación de fondos para la investigación del Parkinson. Después de su retiro, el mundo volvió a ver a Ali encender la llama olímpica en la ceremonia de inauguración de los Juegos Olímpicos de Atlanta 1996. El viernes 3 de junio de 2016, en un hospital de Arizona, El Grande murió a los 74 años un día después de haber sido hospitalizado.

El legado de Ali fue más allá del cuadrilátero. No es uno de los más grandes iconos en la historia del deporte, sino alguien que le dio voz a los que no la tenían en su época y la valentía a nuevas generaciones para seguir luchando por sus derechos. Hoy, cinco años después de su muerte, sigue siendo una leyenda del boxeo y su historia jamás será olvidada. En palabras del propio Muhammad Ali: ‘Yo fui el Elvis del boxeo, el Tarzán del boxeo, el Superman del boxeo, el Drácula del boxeo. El gran mito del boxeo’.

Valentina Fajardo

Por Valentina Fajardo

Comunicadora social y periodista e historiadora con énfasis sociocultural de la Universidad Javeriana. Principal interés en la historia deportiva, el fútbol y el tenis.@valfajardomvfajardo@elespectador.com

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