Este miércoles, el presidente de la República, Iván Duque, anunció que el Eje Cafetero fue elegido como la sede de los XXII Juegos Nacionales y VI Paranacionales de 2023. Cali acogerá los torneos de los deportes acuáticos y algunas poblaciones del norte del Valle los de otras disciplinas.
Los departamentos de Cesar, Meta, Tolima y Boyacá también habían presentado sus candidaturas, pero el comité evaluador prefirió la propuesta conjunta de Quindío, Risaralda y Caldas. El Eje Cafetero fue la región la mejor calificada por el grupo interno de trabajo de la dirección de posicionamiento y liderazgo deportivo de Coldeportes.
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Entre las bondades de la zona cafetera están su estratégica ubicación, en el centro del país, así como la infraestructura ya existente para albergar los 17 días de competencias. Las ciudades capitales, Armenia, Pereira y Manizales, así como sus municipios aledaños, cuentan con cerca de 362 hoteles (4.653 habitaciones y 7.670 camas), además de medios de transporte económicos y ágiles, además de un cuerpo de seguridad disponible para las justas de más de 5.000 policías.
El Eje Cafetero fue sede de los Juegos Nacionales en 1988 y sus ciudades han acogido, entre otros eventos, los Suramericano Sub 20 de Fútbol de 1987 y 2005, la Copa América 2001, el mundial sub-20 de la Fifa 2011 y los Juegos Bolivarianos 2005.
De acuerdo con la candidatura, los Juegos de 2023 tendrán una inversión de cerca de $109.354’000,000, de los cuales $60.144’700,000 serán recursos propios de los tres departamentos, mientras que el Gobierno Nacional aportará $49.209’300,000 a través de Coldeportes. Ese dinero se destinará a construcción y remodelación de escenarios, además de la organización.