El Espectador le explica cuál fue el balance de los Juegos Olímpicos de París 2024

Fueron dos meses en los que los amantes de los deportes vivimos una especie de paraíso. Por ahí leí un trino de alguien que contaba que su papá había pedido vacaciones para ver los Juegos Olímpicos. Un verdadero “quien pudiera”. También las habría pedido para ver la Copa América y la Eurocopa.

Fueron dos meses en los que los amantes de los deportes vivimos una especie de paraíso. Por ahí leí un trino de alguien que contaba que su papá había pedido vacaciones para ver los Juegos Olímpicos. Un verdadero “quien pudiera”. También las habría pedido para ver la Copa América y la Eurocopa.

¿Cuál fue el balance de los Juegos Olímpicos de París 2024? ¿Cómo le fue a Colombia y qué viene en materia deportiva para nuestro país? ¿Quiénes fueron las figuras? ¿Cuáles fueron las noticias positivas, las negativas? De esto y de todo un poco hablaremos en esta nueva entrega de El Espectador le explica. Arranquemos.

Soy de los que creen que tildar de histórico a todo lo que pasa en un evento como los Juegos Olímpicos es redundante, al menos obvio, pero puedo entender ese rótulo cuando ocurre algo que resulta realmente excepcional. La inauguración de los Juegos Olímpicos de París fue una cosa de otro mundo. Creo que algo así no se había hecho antes, no solo lo digo por la certeza de saber que una ceremonia de apertura nunca se había realizado por fuera de un estadio o de un recinto destinado para ello, sino porque la producción y el recorrido que Francia nos ofreció de su historia y su cultura fue algo digno de admirar y de recordar. Artístico por donde se le mire, más allá de los lentes de la moral y las creencias que cada uno se pone (en fotos: así fue la inauguración de los Juegos Olímpicos de París 2024).

Desde ahí ya pudimos notar que la organización estaría a la altura del evento deportivo más importante del mundo. Cerca de 4.800 millones de euros se invirtieron para que los más de 10.000 atletas y 215 delegaciones pudieran tener las condiciones necesarias para las competencias que se realizaron entre el 26 de julio y el 11 de agosto. De Colombia, recordemos que eran 89 deportistas, pero al final terminaron siendo 87, pues dos de ellos se bajaron por lesiones (Eider Arévalo y Jazmín Álvarez). Eran 51 mujeres y 36 hombres, siendo la primera ocasión en que hubo mayor presencia femenina en la delegación nacional. Esta vez, además llevábamos 18 deportistas más que los que llevamos a Tokio 2020.

Las justas empezaron y las primeras ilusiones y sensaciones de orgullo llegaron en las disciplinas de tenis y BMX. Camila Osorio llegó a los octavos de final y una de las primeras sorpresas fue la de Queen Saray Villegas, que le dio al país el primer diploma olímpico al quedar en el cuarto lugar. “En realidad estoy orgullosísima con lo que hice, un cuarto puesto no está nada mal, aunque lograr la medalla no estaba tan difícil”, dijo para El Espectador tras decir también que “Estoy convencida de que esto va a ayudar a que el BMX Freestyle crezca en Colombia. Cuarto puesto en unos Olímpicos, sin pista profesional. Llevamos tres años saliendo al exterior para buscar escenarios apropiados y fogueo. Seguro ahora será diferente. Tenemos mucho talento en el país y solo hace falta darle mayores facilidades para hacer deporte”.

Un poco de pedagogía antes de continuar. ¿Diploma olímpico? ¿Y eso qué? Bueno, esta es una distinción que se entrega a los ocho primeros puestos de cada prueba final en unos Juegos Olímpicos. Desde los primeros juegos de la era contemporánea, es decir, desde Atenas 1896, se entregaba a los tres primeros; luego, desde Londres 1948, se extendió a los primeros seis y desde Moscú 1980 a los ocho primeros.

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Pero sigamos. Los días pasaron y Colombia acumulaba diplomas, pero las medallas no llegaban. La primera presea llegó el 5 de agosto gracias a Ángel Barajas, que se convertía en el primer colombiano en ganar una medalla siendo menor de edad (tiene 17 años) y en hacerlo en gimnasia, una de las disciplinas de mayor prestigio en los Olímpicos junto al atletismo y la natación.

Fue específicamente en la prueba de barra fija que Ángel Barajas, que creció haciendo piruetas en su casa imitando a Sportacus, un personaje del programa Lazy Town, le dio una medalla de plata a Colombia en París 2024. “Pues la medalla no se ganó hoy, se ganó durante todos los años de entrenamiento y sacrificios. Hoy veo que valieron la pena. Pero la verdad es que arriesgué en la final, porque no tenía nada que perder. Ya había hecho la más difícil, que era meterme entre los ocho, así que hoy nos la jugamos, lo apostamos todo”, dijo Barajas para El Espectador.

Bajamos bandera un poco tarde, pero afortunadamente no fue la única medalla. Los días pasaron y no veíamos llegar las otras preseas. Nos lamentamos porque no ganamos con Mariana Pajón, con Yenny Arias, con Flor Denis Ruiz o Kevin Santiago Quintero, pero el deporte puede llegar a ser injusto en las instancias definitivas para unos y puede ser generoso para otros. Así es la vida también.

Fueron 14 diplomas olímpicos: Queen Saray Villegas (BMX freestyle), Ángel Hernández (gimnasia trampolín), Ingrit Valencia, Angie Valdés y Jenny Arias (boxeo), la selección femenina de fútbol, Mateo Carmona (BMX), Sandra Lorena Arenas (marcha), Martha Bayona y Cristian Ortega (ciclismo de pista), Luis Felipe Uribe (clavados), Luis Javier Mosquera (pesas), Valeria Araújo (heptatlón) y Flor Denis Ruiz (lanzamiento de jabalina).

Y fueron finalmente tres medallas más las que conseguimos. Las dos siguientes, también de plata, llegaron el viernes 9 de agosto en la disciplina que más preseas nos ha dado en la historia: el levantamiento de pesas o halterofilia. Primero apareció Jeison López, conocido como Goku, que obtuvo su medalla plateada al alzar 390 kilogramos en la categoría de 89 kg.

López, que luego de su presentación se quebró en llanto por la emoción, dijo en entrevista para este diario que “Cada momento deja una enseñanza. Cuando empecé vendía dulces en una chaza para poder vivir y hoy tengo una medalla olímpica. La vida es maravillosa y hay que aprender de ella. Hay que trabajar duro. Eso se paga”.

En la entrevista también aprovechó para reiterar el llamado a apoyar a los deportistas y al Chocó, su tierra natal: “El día que el departamento del Chocó tenga un mejor apoyo para los deportistas, créanme que no va a salir un deportista que sea medallista olímpico, sino que van a salir muchos. Tenemos mucho talento, no hay apoyo”.

De hecho, en el caso de López, Dilian Francisca Toro, gobernadora del Valle del Cauca -donde entrenó siempre como pesista- y Nubia Carolina Córdoba, gobernadora de Chocó, anunciaron que le darían a Jeison un premio de $50 millones por su medalla de plata, eso más lo que recibiría de parte del Ministerio del Deporte, pero ya hablamos de esas cifras.

No habíamos terminado de celebrar la medalla de Jeison López cuando apareció la de Mari Leivis Sánchez, que ganó también una presea de plata, pero en la categoría de los 71 kg. Qué bella imagen dejó Sánchez, que cuando tuvo su última salida, mientras alzaba la pesa, dejó ver su emoción y con los brazos arriba lloró de orgullo. “La verdad no fue fácil. Tuvimos que buscar este resultado que tanto estamos esperando la verdad, para eso trabajamos y gracias a Dios yo logré la plata. (…) La luché día tras día y aunque a veces estuve cabizbaja, lo superé. Yo ahorita no tengo ni palabras para explicar toda la emoción que siento de haber obtenido esta medalla”, aseguró Sánchez, quien le dedicó su medalla a Ismael Elías, su hijo. “Fue un esfuerzo dejar todo mi niño, a mi hijo para poder estar hasta acá estar aquí. Lo amo y que por él esta medalla”.

La última medalla llegó el domingo, el último día de los Juegos Olímpicos. Fue Tatiana Rentería, en la lucha libre de 76 kg, quien nos dio una presea de bronce. Tras su victoria, la luchadora también pudo hablar para este diario en zona mixta. “Pensé en ellos antes del combate. Me llamaron y me escribieron. Sabía que tenía que sacar esto adelante por ellos. Sobre todo, por mi hija que va a cumplir seis años. Ella es mi motor. Ella me pidió de cumpleaños la medalla”.

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Al igual que otros deportistas colombianos, Rentería también hizo un llamado para que tuvieran más respaldo por parte de los sectores públicos y privados en el país. “Con poco apoyo, y posibilidades para salir al extranjero a preparar estos Juegos, logré ser medallista de bronce. ¿Se imaginan lo que pasaría si nos apoyaran más? (…) Necesitábamos, por ejemplo, haber salido antes de Colombia. Teníamos que preparar con más antelación la competencia, pero nos faltó apoyo. Si lo hubiésemos tenido, les habría dado la medalla de oro. No hay que llorar sobre la leche derramada. Ojalá para los próximos Olímpicos, viendo lo que pasó, nos mejoren el apoyo a todos los deportistas. No es solo a mí, o la lucha, para todos”.

¿Cuánto recibió cada medallista por parte de MinDeporte? Bueno, según la Resolución 000636 del 25 de julio de 2024, “el medallista de oro en los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024 recibirá 343.200.000 pesos, lo que aumenta en más de 100 millones el total del estímulo por esta misma medalla en Tokio 2020. Por su parte, para los medallistas de plata el incentivo será de 191.100.000 pesos. Mientras que el bronce, quedó establecido 136.500.000 pesos”, informó la cartera semanas atrás.

El balance de Colombia no fue malo, pero tampoco el esperado. Ganamos cuatro medallas, una menos que en Tokio 2020, y estuvimos, por ende, lejos de nuestra mejor participación en unos Olímpicos, recordando que fue en Río 2016 cuando obtuvimos ocho medallas, tres de ellas de oro gracias a Mariana Pajón, Caterine Ibargüen y Óscar Figueroa.

Citaré a Mariana Pajón, que también estuvo en entrevista para El Espectador desde París, para hacer un comentario editorial: “Ojalá tuviéramos la cabeza fría y el sentido común para entender lo que es clasificar a unos Olímpicos, quiénes llegan acá, quiénes son capaces de llegar hasta acá. Estamos mal acostumbrados, porque queremos más, somos triunfalistas. A mí me hubiera gustado tener un diploma olímpico, me quedé cerca”.

Hubo comentarios de varios deportistas que sintieron que aquí en Colombia se les dio mucho palo. Pero quién mejor que Mariana Pajón para llamar a la sensatez. Aquí nos queda muy fácil juzgar desde la comodidad de la cama o del sofá, pero realmente no dimensionamos que cada deportista realiza un proceso de cuatro años, pasando por mundiales y justas regionales o continentales, para poder llegar a unos Olímpicos, que es a donde van los mejores del mundo. Creo que a veces nos falta no solo humildad para opinar, sino también un poco de serenidad y de empatía, quizá esta última palabra muy desgastada en el último tiempo, pero no puede ser que solo aplaudamos cuando las cosas salen bien. Y no, no creo que sea un asunto de premiar la derrota o de no cambiar la mentalidad. El deporte, quizá como la cultura o la educación, son sectores que muestran sus resultados a largo plazo, nunca distinto, así que el asunto siempre será de apostar a los procesos, de no dejar morir los impulsos y los caminos que abren quienes alguna vez fueron excepciones por ganar, pues solo así dejaremos de tener excepciones y pasaremos a tener figuras recurrentemente.

Y precisamente sobre este tema hay polémica, pues en medio de los Olímpicos de París, el Ministerio del Deporte, en cabeza de Luz Cristina López, anunció que habría un recorte equivalente al 69 % para el presupuesto de esta cartera en 2025, decisión que tuvo que ver con el déficit fiscal del país, lo que obligó a este sector y a otros a recortar su presupuesto, y con la baja ejecución de ese monto, pues este año apenas se había ejecutado el 12 %.

Ahora, hay que aclarar que ese totazo se ve así porque para este 2024 se destinaron $1,3 billones, uno de los presupuestos más altos de la historia en el deporte colombiano, precisamente por la preparación de los deportistas para los Olímpicos. Sin embargo, la reducción fue bastante considerable, pues solamente se destinaron $460 mil millones para el año entrante.

“Esperemos que se arrepientan, que vean que el deporte trae muchas oportunidades, que construye país y que así no se ganen medallas a los atletas hay que apoyarlos. Con un deportista están formando personas de bien, que aportan a la sociedad. La cultura, el deporte y la educación son fundamentales. Esa reducción afectaría mucho”, dijo Pajón. Y un mensaje similar dio Ciro Solano, presidente del Comité Olímpico Colombiano: “Yo tengo la certeza de que el Ministerio y la Presidencia de la República van a considerar esto. (…) El deporte colombiano merece apoyo, es un vehículo muy importante para unir al país”.

Pero bueno. No me despediré sin mencionar las estrellas que brillaron en París 2024. Francia, que sobre todo ganó por lo que representará para su capital la inversión que hizo para estos Juegos, tuvo a Léon Marchand como el ídolo de la delegación local, pues ganó cuatro medallas en estas justas, en tres de ellas con récord olímpico (400 metros estilo, 200 metros pecho y 200 metros mariposa).

Toda historia de un deportista tiene luchas y motivos de sobra para ser admirada, pero sin duda el caso de Simone Biles, la gimnasta estadounidense, es tema aparte. Además de su historia de vida, su esfuerzo por recuperar su salud mental mientras mantiene su forma física es digno de ser contado a través de los tiempos. Luego de haberse retirado de Tokio 2020 porque su cabeza no daba para más, esta vez retornó para no dejar dudas sobre su legado. Biles ganó cuatro medallas en estas justas, tres de oro y una de plata.

París 2024:

Medía noche en París con las estrellas del baloncesto

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Cuando dijeron que era “inapropiado” tener mujeres en los Olímpicos, ella luchó

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Mijaín López, el pentacampeón que dice adiós desde el Olimpo

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El ascenso olímpico de Novak Djokovic

Aunque no es nuevo, pero para no dejar de hablar de Estados Unidos, fue épica también la presentación del Dream Team de baloncesto. El show de LeBron James y de Stephen Curry fue de otro planeta. De hecho, por su oro, se definió el medallero de París 2024, en el que Estados Unidos nuevamente quedó en primer lugar.

Para enmarcar también lo de Novak Djokovic. De amores y odios. No admirarlo es terquedad. Más allá de su personalidad, el espíritu deportivo del serbio tendría que ser también narrado y puesto como ejemplo en la historia del tenis y del deporte en general. Lo había ganado todo. Solamente le faltaba el oro, y lo obtuvo frente a un Carlos Alcaraz que lamentó su derrota, pero que tendrá, mínimo, tres ediciones más para buscar la presea dorada. Nada le falta a Djokovic, que aún así lloró como si fuera la primera vez que ganaba una competencia.

Para destacar, la actuación de la gimnasta brasileña Rebeca Andrade, que ganó una medalla de oro y dejó una postal para la historia tras el reconocimiento de Simone Biles y Jordan Chiles al ganarles en la prueba de gimnasia artística femenina.

Un adiós y un legado también imborrable para Mijaín López, pentacampeón cubano de la lucha grecorromana. Para destacar también el caso de la boxeadora Cindy Ngamba, que le dio a la delegación de refugiados la primera medalla en la historia de los Olímpicos.

Se habló de limpieza social, de robos a deportistas, pero quizá el lunar que más se notó, porque no todo fue perfecto, fue el del Río Sena, que, aunque se hizo un trabajo considerable de descontaminación para las pruebas en aguas abiertas, no evitó que algunos competidores se enfermaran por nadar allí. El caso más crítico fue el de Claire Michel, una triatleta belga que se habría infectado con la bacteria e.coli.

“Ya veremos quién hará unos Juegos como estos”, aseguró Emmanuel Macron, presidente de Francia, al cierre de los Juegos Olímpicos, que le dio paso a Estados Unidos para la organización de las próximas justas, que serán en Los Ángeles en 2028.

¿Y el medallero? Tranquilos, no me iba a ir sin mencionarlo. Es la primera vez que el ganador se define por las preseas de plata, pues en esta ocasión tanto Estados Unidos como China quedaron con 40 medallas de oro, pero los norteamericanos obtuvieron 44 medallas plateadas contra 27 de los asiáticos (también sumaron 42 de bronce los primeros, para un total de 126 medallas, y 24 los segundos, para un total de 91 medallas). Japón completó el podio con 20 medallas de oro, 12 de plata y 13 de bronce, para un total de 45 medallas.

El mejor país de Latinoamérica fue Brasil, que quedó en el puesto 20 con tres medallas de oro, siete de plata y 10 de bronce. Colombia quedó en la casilla 66 con tres medallas de plata y una de bronce.

Gracias a Fernando Camilo Garzón, periodista, y Luis Guillermo Ordoñez, editor de deportes, por su cubrimiento de los Juegos Olímpicos de París 2024, así como a la sección en general por el trabajo coordinado de estas justas que nos dejaron más historias por contar y recordar.

No olviden que del 28 de agosto al 8 de septiembre se realizarán los Juegos Paralímpicos, que también serán en París. Colombia contará con 78 deportistas que estarán en diez disciplinas diferentes. Será la delegación más numerosa en la historia con 37 hombres y 31 mujeres. ¡Vamos, Imparables!

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