Los Cubs regresan a una Serie Mundial por primera vez desde 1945
La novena de Chicago venció a Los Ángeles Dodgers en el sexto juego de la serie por el Campeonato de la Liga Nacional y enfrentará a los Indios de Cleveland en el 'clásico de otoño'.
Jesús Miguel de la Hoz
Chicago está de fiesta. La denominada ‘ciudad de los vientos’ celebra la clasificación a la Serie Mundial de los Cubs. “Está pasando” se leyó en una pancarta en el estadio Wrigley Field. Por fin los aficionados del equipo de Chicago volvieron a festejar un campeonato de la Liga Nacional. Pasaron 71 años. Desde aquel ‘clásico de otoño’ de 1945 que perdieron contra los Tigres de Detroit no jugaban una serie por el campeonato de las Grandes Ligas. Este sábado derrotaron a los Dodgers. De la mano del poder de su ofensiva hundieron al equipo de Los Ángeles en seis encuentros en la serie por el campeonato del ‘viejo circuito’.
El roletazo a Addison Russell del jugador de los Dodgers, Yasiel Puig, que terminó en una jugada de doble play que finalizó el partido, sacó lágrimas y gritos de alegría. Chicago dominó el último partido de la serie de principio a fin. El lanzador Kyle Hendricks se encargó de maniatar a la ofensiva de los Dodgers, mientras que los Cubs aprovecharon las oportunidades que se le presentaron para anotar. En la primera entrada ganaban 2-0 y le sacaron 30 lanzamientos al estelar lanzador, Clayton Kershaw, quien en el juego dos se había encargado de blanquear a Chicago y limitarlos a dos imparables.
Pero no fue solo bateo. La defensiva de los Cubs brilló a lo largo de la serie. A pesar de los dos errores en el juego cuatro y en el último encuentro, Rizzo, Baez, Bryant y Russell tuvieron una gran presentación en el cuadro, mientras que Dexter Fowler en el jardín central estuvo notable. Todos respondieron cuando fueron exigidos y esto le dio confianza al trabajo de los lanzadores, que fueron claves en las últimas dos victorias, con buenas presentaciones de Jon Lester y Kyle Hendricks.
Ahora se viene la Serie Mundial para Chicago. En Cleveland jugarán los primeros dos partidos entre Cubs e Indios. Para estos encuentros, la novena dirigida por Joe Maddon podría contar con un refuerzo importante: Kyle Schwarber, quien ha estado fuera en los últimos seis meses romperse dos ligamentos de la rodilla de su pierna izquierda. Es un bate importante que recupera la ofensiva de los Cubs. “Es un bateador especial”, dijo el presidente de operaciones de los Cubs, Theo Epstein, quien agregó “si llega a estar en buenas condiciones, como lo pensamos, creo que podría ayudarnos en la Serie Mundial”.
Chicago es el equipo candidato a coronarse campeón de la Serie Mundial, algo que no logran desde 1908. Pero al frente tendrán a un equipo de los Indios, dirigido por Terry Francona, que gracias al buen bullpen puede terminar amargando la fiesta en ‘la ciudad de los vientos’. Este ‘clásico de otoño’ será especial las dos franquicias buscan romper con años de sequía en las Grandes Ligas. Cleveland no es campeón desde 1948, mientras que los Cubs quieren acabar con 108 años de frustraciones.
Chicago está de fiesta. La denominada ‘ciudad de los vientos’ celebra la clasificación a la Serie Mundial de los Cubs. “Está pasando” se leyó en una pancarta en el estadio Wrigley Field. Por fin los aficionados del equipo de Chicago volvieron a festejar un campeonato de la Liga Nacional. Pasaron 71 años. Desde aquel ‘clásico de otoño’ de 1945 que perdieron contra los Tigres de Detroit no jugaban una serie por el campeonato de las Grandes Ligas. Este sábado derrotaron a los Dodgers. De la mano del poder de su ofensiva hundieron al equipo de Los Ángeles en seis encuentros en la serie por el campeonato del ‘viejo circuito’.
El roletazo a Addison Russell del jugador de los Dodgers, Yasiel Puig, que terminó en una jugada de doble play que finalizó el partido, sacó lágrimas y gritos de alegría. Chicago dominó el último partido de la serie de principio a fin. El lanzador Kyle Hendricks se encargó de maniatar a la ofensiva de los Dodgers, mientras que los Cubs aprovecharon las oportunidades que se le presentaron para anotar. En la primera entrada ganaban 2-0 y le sacaron 30 lanzamientos al estelar lanzador, Clayton Kershaw, quien en el juego dos se había encargado de blanquear a Chicago y limitarlos a dos imparables.
Pero no fue solo bateo. La defensiva de los Cubs brilló a lo largo de la serie. A pesar de los dos errores en el juego cuatro y en el último encuentro, Rizzo, Baez, Bryant y Russell tuvieron una gran presentación en el cuadro, mientras que Dexter Fowler en el jardín central estuvo notable. Todos respondieron cuando fueron exigidos y esto le dio confianza al trabajo de los lanzadores, que fueron claves en las últimas dos victorias, con buenas presentaciones de Jon Lester y Kyle Hendricks.
Ahora se viene la Serie Mundial para Chicago. En Cleveland jugarán los primeros dos partidos entre Cubs e Indios. Para estos encuentros, la novena dirigida por Joe Maddon podría contar con un refuerzo importante: Kyle Schwarber, quien ha estado fuera en los últimos seis meses romperse dos ligamentos de la rodilla de su pierna izquierda. Es un bate importante que recupera la ofensiva de los Cubs. “Es un bateador especial”, dijo el presidente de operaciones de los Cubs, Theo Epstein, quien agregó “si llega a estar en buenas condiciones, como lo pensamos, creo que podría ayudarnos en la Serie Mundial”.
Chicago es el equipo candidato a coronarse campeón de la Serie Mundial, algo que no logran desde 1908. Pero al frente tendrán a un equipo de los Indios, dirigido por Terry Francona, que gracias al buen bullpen puede terminar amargando la fiesta en ‘la ciudad de los vientos’. Este ‘clásico de otoño’ será especial las dos franquicias buscan romper con años de sequía en las Grandes Ligas. Cleveland no es campeón desde 1948, mientras que los Cubs quieren acabar con 108 años de frustraciones.