Los tres colombianos en los Olímpicos de Invierno de Beijing 2022

La patinadora Laura Gómez y los esquiadores Carlos Quintana y Michael Poettoz. / COC

Hasta hace poco más de una década los Juegos Olímpicos de Invierno carecían de importancia para nuestro país. Por obvias razones, climáticas y culturales principalmente, ninguna de las 15 disciplinas de las justas se practica oficialmente en nuestro territorio.

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Sin embargo, por insistencia de un grupo de deportistas con raíces colombianas, o de compatriotas radicados en el exterior, el Comité Olímpico Colombiano se aventuró a avalar a los primeros para participar en los Juegos de Invierno y ahora tiene ya una coordinación encargada de promocionar estas especialidades.

Cinthia Denzler, hija de un empresario suizo que se radicó en nuestro país y pidió la nacionalidad para él y su familia, participó en la prueba de slalom gigante en Vancouver (Canadá) 2010, cuando terminó en la casilla 51. Y hace cuatro años, en Pyeongchang (Corea del Sur) 2018, estuvieron los esquiadores Sebastián Uprimny y Michael Poettoz, además de los patinadores Pedro Causil y Laura Gómez, vigésimos en sus respectivas competencias.

En las justas de Beijing 2022, que arrancan este jueves en la noche, participarán, en medio de estrictas medidas sanitarias por la pandemia del covid-19 y la nueva variante ómicrom, casi 3.000 deportistas de 90 países, entre ellos Colombia, que tendrá nuevamente a la antioqueña Laura Gómez, en la prueba Mass Start del patinaje de velocidad; a Michael Poettoz (nacido en Cali y adoptado por una pareja francesa), en el esquí alpino, y Carlos Quintana, en esquí de fondo.

Para apoyarlos en territorio chino estarán el dirigente Élder Navarro y Sebastián Uprimny, el hombre que lidera en el COC los deportes de invierno.

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“A pesar de que contamos con un deportista menos que hace cuatro años, ya tenemos un proceso. La pandemia afectó las clasificaciones, pero además de los tres que lograron cupo a Beijing, tuvimos cuatro o cinco deportistas más que estuvieron cerca: Laura Vargas en skeleton, uno en snowboard y un par de esquiadoras. Ya es mayor la cantidad de atletas trabajando. Ha sido un proceso lento, que arrancó en 2018 y que va a dar grandes resultados en 2026, cuando esperamos tener entre 10 y 15 representantes, porque vamos en la dirección correcta”, explica Sebastián Uprimny, un bogotano radicado en Estados Unidos que durante dos décadas labró su sueño de ser olímpico, y lo cumplió en Pyeongchang.

Ahora, como delegado, intentará ayudar a que sus compañeros cumplan los suyos: “Carlos Quintana inició su proceso en nieve en 2018 y va a participar en sprint y 15 kilómetros. Con él nos fijamos la meta de que sea el primero de los latinoamericanos; Michael Poettoz, a pesar de que sufrió un accidente hace dos meses, llega más maduro y con buena experiencia, y Laura tiene como objetivo clasificar a las finales, pasar la primera ronda”.

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Uprimny asegura que “el proceso de los patinadores, con altibajos, se ha mantenido desde 2015. En las demás especialidades arrancamos de ceros, pero ya hay trabajo del COC, más recursos y ayuda de solidaridad olímpica”, agrega.

En los Juegos Olímpicos de Invierno, que irán hasta el 20 de febrero y se podrán ver por Caracol Sports, solo habrá 33 deportistas latinoamericanos, entre ellos la brasileña Jaqueline Mourao, quien completará su quinta presencia en la prueba de esquí de fondo, además de las tres en ciclomontañismo en las justas de verano.

En la tabla de medallería general se espera un duelo cerrado entre las potencias del deporte invernal, Noruega, Alemania, Canadá y Estados Unidos, aunque China, como anfitriona, planea también meterse en la pelea.

Individualmente hay varios candidatos a coronarse como estrellas de los Juegos. En esquí alpino, la estadounidense Mikaela Shiffrin puede batir el récord de medallas. A sus 26 años, cuenta ya con tres preseas y dos títulos (eslalon en 2014 y gigante en 2018). En la rama masculina, el joven suizo Marco Odermatt (24 años) llega tras ganar la Copa del Mundo de Esquí y aspira a transformar en oro su talento y ganar en descenso, supergigante y gigante.

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El campeón olímpico en las dos últimas ediciones, el japonés Yuzuru Hanyu, sueña con convertirse en el primer patinador en lograr tres oros consecutivos desde hace casi un siglo.

Y el público chino tendrá a su propia heroína, la especialista de esquí acrobático Eileen Gu. Nacida en California y de padre estadounidense y madre china, Gu es la niña mimada de China, porque escogió representar a ese país a pesar de tener la doble nacionalidad.