Mafe Herazo: la barranquillera que le dio sabor al tenis
Nacida en la costa del país, la tenista se ha dedicado a dejar el nombre de su región en alto. Este miércoles Colombia enfrenta a Perú en la segunda jornada en Cúcuta.
Valentina Fajardo
En todos los deportes, Colombia siempre se tiene a un representante de la costa, y el tenis femenino no es una excepción. En la rama femenina la encargada de representar a Barranquilla ha sido la tenista de 26 años María Fernanda Herazo. Llegó al deporte blanco por pura casualidad, ya que ni su padre ni su madre lo jugaban, pero siempre la impulsaron a que practicara algún deporte. Primero intentó con el patinaje y después con el baloncesto, pero fue gracias a dos raquetas y los muebles de su sala que terminó inclinándose por el tenis.
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En todos los deportes, Colombia siempre se tiene a un representante de la costa, y el tenis femenino no es una excepción. En la rama femenina la encargada de representar a Barranquilla ha sido la tenista de 26 años María Fernanda Herazo. Llegó al deporte blanco por pura casualidad, ya que ni su padre ni su madre lo jugaban, pero siempre la impulsaron a que practicara algún deporte. Primero intentó con el patinaje y después con el baloncesto, pero fue gracias a dos raquetas y los muebles de su sala que terminó inclinándose por el tenis.
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“Empecé a pasar la pelota y mi papá sintió ganas de llevarme a clases a ver qué tal me desempeñaba con el tenis”, recuerda Herazo. “Me fui disciplinando hacia el tenis competitivo, y era algo que en verdad me gustaba. Gracias a Dios mis papás siempre me apoyaron, me llevaban a los torneos, viajaban conmigo, estaban muy pendientes. La constancia siempre fue de nosotros, no solo mía, sino también de ellos”.
En sus primeros años no fue fácil lograr un equilibrio entre el tenis juvenil y el bachillerato. Sin embargo, siempre fue afortunada y el rector del colegio donde cursó sus estudios fue flexible con ella, a pesar de las múltiples fallas a causa de los entrenamientos.
Sus profesores le permitieron los espacios de religión, ética y educación física para escaparse y seguir con su formación deportiva. A pesar de que le costó, eventualmente se acostumbró a vivir esa doble vida, la que más adelante le permitió viajar al exterior y participar de los torneos de Grand Slam júnior.
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Una vez obtenido su título de bachiller se enfocó en el tenis y todos sus años de arduo entreno fueron frutos cuando se llevó el título del Abierto de Barranquilla de 2013. “De pequeña veía a las jugadoras y me decía: ‘Quiero estar aquí, debo ser tenista profesional’. Ese año que gané me convertí en la primera jugadora profesional nacida en Barranquilla en toda la historia. Ese fue un hito en la ciudad”.
Gracias a esa victoria empezó a recibir patrocinios, lo que ayudó mucho en su siguiente etapa. Recibió apoyo en sus viajes para disputar torneos internacionales, donde llegó a compartir con jugadoras extranjeras como la húngara Naomi Totka, la británica Anna Brogan y la brasileña Laura Pigossi.
El año de brillar: 2022
Para María Fernanda todos los triunfos en su carrera tienen un significado distinto, pero el más significativo fue el obtenido en los Juegos Suramericanos de Asunción, el año pasado.“La medalla de oro en Paraguay es de esas cosas que me han llenado el corazón. No solo por participar en nombre de Colombia, sino por la sensación de ver a todos esos atletas a mi alrededor”, dice la tenista.
“Uno ve a todos los deportistas que van en busca del oro, llenos de ilusión y esperanza. Al inicio era hasta irreal verme con la medalla colgada y después lograr procesar de que fui la única que logró cumplir ese sueño”.
Además, su rival en ese último partido fue la local Verónica Cepede, quien estaba lista para retirarse en esos juegos. Naturalmente, durante todo el evento la tribuna estaba con la paraguaya, llenando cada una de las sillas y cantando para que su figura del tenis lograra subirse al primer escalón del podio.
A pesar de este ambiente, Herazo logró arrebatarle la presea dorada a Cepede sin permitirle acabar con su carrera por lo alto.
A diferencia de la paraguaya, por ahora la barranquillera no tiene en sus planes bajar la raqueta, es más, ni siquiera esto está en sus planes a mediano o largo plazo, especialmente porque ahora el tenis es un deporte que tiene mucha más longevidad. Una de las figuras que mantiene viva sus ganas de seguir es la leyenda Serena Williams, que esperó a los 40 años para decirles adiós a las canchas.
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“Nunca he considerado eso, pero soy consciente de que en algún momento una lesión me podría sacar. Sin embargo, eso no está en mis planes”.
Al ser consciente de que hay algo más allá del tenis, Mafe se ha encargado de hacer una vida aparte del deporte blanco. Es por esto que decidió estudiar comunicación social en la UNAD. Además, una vez terminada su carrera deportiva espera poder cumplir uno de sus sueños y convertirse en madre.
Pero ese es un plan que tendrá que esperar un buen tiempo, porque por ahora se encargará de disfrutar el tenis y seguir dando lo mejor de sí en cada partido.
El mensaje a las nuevas generaciones
Consciente de la venida de un recambio generacional, hay dos cosas que María Fernanda considera clave en la formación de las futuras tenistas: un grupo de apoyo -compuesto por entrenadores, amigos y familiares - y acompañamineto psicológico para los momentos difíciles durante los torneos.
“Es bueno que las niñas que vienen tengan claro que el tenis es un deporte de mucha paciencia y perseverancia”, enfatiza Herazo. “Hay muchos torneos en los que al final de cuentas son más los partidos que te enseñan que los que ganas, y no es fácil manejar eso dentro de la cancha. Si no tienes las herramientas serán más difíciles de procesar”.
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Afortunadamente, en sus primeros años contó con un equipo sólido que siempre la ayudó, pero fue algo que necesitó de presupuesto e inversión por parte de sus padres. Ese grupo de personas estuvo a su lado en sus buenos y malos momentos, que estaban ahí tanto en los días de gloria como en los pasos oscuros por el circuito WTA.
“Las nuevas generaciones deberían tener apoyo mental para contrarrestar situaciones difíciles de la vida, algo que no tuve antes. Pienso que ahora hay posibilidades y las chicas deben dar siempre lo mejor y no afanarse”.
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