Luis Quiñones y otros boxeadores que han muerto tras un combate
En la madrugada de este viernes se confirmó la muerte de Luis Quiñones, boxeador santandereano que llevaba casi una semana en coma después de un combate en Barranquilla. Fue ingresado el pasado fin de semana a la Clínica del Norte en la capital del Atlántico, después de perder el conocimiento en la pelea en la que disputaba contra José Muñoz el título nacional welter junior.
En la madrugada de este viernes se confirmó la muerte de Luis Quiñones, boxeador santandereano que llevaba casi una semana en coma después de un combate en Barranquilla, fue ingresado el pasado fin de semana a la Clínica del Norte en Barranquilla, después de perder el conocimiento en la pelea en la que disputaba contra José Muñoz el título nacional welter junior.
El pugilista, que perdió por nocaut el duelo, se desplomó en el último de los ocho asaltos de la pelea. Inmediatamente, lo sacaron en camilla hacia la clínica General del Norte, donde permaneció los últimos días con varias intervenciones neuroquirúrgicas, que por la gravedad de su estado de salud, no fueron suficientes para salvarle la vida.
“Te nos adelantaste mi hermano del alma, ahora estás en el regazo de tu padre celestial, al que tú adorabas y servías, te amo mi hermano Luis Quiñones, por siempre y para siempre en nuestros corazones”, escribió su hermano, Leonardo Quiñones.
Una vez más, se abre el debate sobre las consecuencias que trae este deporte, pues Quiñones no ha sido el único que ha muerto tras una pelea de boxeo.
Simiso Buthelezi, un boxeador africano, también murió este año luego de un episodio de coma derivado de una pelea. Con solo 24 años, se enfrentaba contra Siphesihle Mntungwa por el título de peso ligero de la Federación Mundial de Boxeo de África, y terminó lanzando golpes al aire en una de las esquinas del cuadrilátero.
En 2021, Jeanette Zacarías Zapata, boxeadora mexicana de 18 años, falleció cinco días después de haber sido noqueada en un combate.
En la madrugada de este viernes se confirmó la muerte de Luis Quiñones, boxeador santandereano que llevaba casi una semana en coma después de un combate en Barranquilla, fue ingresado el pasado fin de semana a la Clínica del Norte en Barranquilla, después de perder el conocimiento en la pelea en la que disputaba contra José Muñoz el título nacional welter junior.
El pugilista, que perdió por nocaut el duelo, se desplomó en el último de los ocho asaltos de la pelea. Inmediatamente, lo sacaron en camilla hacia la clínica General del Norte, donde permaneció los últimos días con varias intervenciones neuroquirúrgicas, que por la gravedad de su estado de salud, no fueron suficientes para salvarle la vida.
“Te nos adelantaste mi hermano del alma, ahora estás en el regazo de tu padre celestial, al que tú adorabas y servías, te amo mi hermano Luis Quiñones, por siempre y para siempre en nuestros corazones”, escribió su hermano, Leonardo Quiñones.
Una vez más, se abre el debate sobre las consecuencias que trae este deporte, pues Quiñones no ha sido el único que ha muerto tras una pelea de boxeo.
Simiso Buthelezi, un boxeador africano, también murió este año luego de un episodio de coma derivado de una pelea. Con solo 24 años, se enfrentaba contra Siphesihle Mntungwa por el título de peso ligero de la Federación Mundial de Boxeo de África, y terminó lanzando golpes al aire en una de las esquinas del cuadrilátero.
En 2021, Jeanette Zacarías Zapata, boxeadora mexicana de 18 años, falleció cinco días después de haber sido noqueada en un combate.