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La selección de Colombia ya está lista para medirse con Brasil en Barranquilla este jueves, por la quinta fecha de las Eliminatorias al Mundial de 2026, que se realizará en Estados Unidos, México y Canadá. Faltan algunas horas para que empiece a rodar la pelota.
Gracias a su exitosa historia y figuras, los brasileños son el rival más difícil para los colombianos en la fase de clasificación, pues son los únicos contrincantes que el combinado nacional jamás ha vencido rumbo a una Copa del Mundo.
De ganar, claramente, sería un resultado inédito el que se daría en Barranquilla, un precedente importante para la selección colombiana de fútbol. El último duelo entre ambos terminó en empate (0-0) y desde la eliminatoria rumbo a Alemania 2006 que la tricolor no cae como local ente la canarinha.
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Es común decir que el clima de La Arenosa favorece a la selección de Colombia, pues las altas temperaturas pueden afectar a los jugadores que no están acostumbrados a dichas condiciones, influyendo en su rendimiento, resistencia y concentración.
Se espera que esta noche la capital del Atlántico tenga una temperatura que oscile entre los 27 y 29 grados a las 7:00 p.m., hora en la que sonará el pitazo inicial entre la tricolor y la canarinha en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
De acuerdo también con los pronósticos del clima, la posibilidad de que se presente una precipitación es de apenas el 7% y se espera que el viento corra a una velocidad de 6 km/h. Se proyecta, además, que la humedad se incremente con el paso de las horas y llegue al 87%.
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La alta humedad reduce la eficacia de la sudoración como mecanismo de enfriamiento, así como también genera que los jugadores perciban una sensación de fatiga más alta y produce más estrés, por lo que afecta también la toma de decisiones.
Ahora bien, Brasil cuando juega en su patio, lo hace en condiciones similares a las de los colombianos. Por ejemplo, las fechas de esta eliminatoria en las que hizo de local disputó los compromisos en Cuiabá y en Belem, ciudades con climas parecidos al de Barranquilla.
Dicho lo anterior, es probable que las condiciones meteorológicas no jueguen contra los verdeamarillos un papel tan influyente como con selecciones habituadas a climas más frescos y secos como Chile, Ecuador o Bolivia.
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