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El gobierno expidió las “reglas de juego” para la venta de la participación que la Nación todavía tiene en Colombia Telecomunicaciones (Coltel), que comercialmente opera bajo la marca Movistar. A través del decreto 1215 de 2018, firmado por el ministro de Hacienda y el de Tecnologías de la Información y las Comunicaciones (TIC), el precio mínimo por acción fijado para la enajenación del 32,5 % de la compañía será de $2.075.
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Así, el recaudo esperado sería de $2,3 billones, por un total de más de 1.100 millones de acciones que tiene la Nación en Coltel. Según la norma, la venta se hará en dos etapas. La primera de ellas estará dirigida a “destinatarios de las condiciones especiales”, como por ejemplo trabajadores, extrabajadores, sus asociaciones, los sindicatos y pensionados de Coltel.
El decreto también expresa que ningún destinatario de las condiciones especiales (persona natural o no) podrá adquirir más de 5.541.347 acciones.
En la segunda fase se ofrecerán al público en general las acciones que no hayan sido adquiridas por los destinatarios de la primera fase.
La venta se realizará con la intermediación del Ministerio de Hacienda o a través de la Bolsa de Valores de Colombia.
El programa de enajenación tendrá una vigencia de un año, prorrogable por un año más, y su dirección estará a cargo de un comité técnico, integrado por representantes del Ministerio de Hacienda y el director del Departamento Administrativo de la Presidencia de la República o su delegado.
Hay que recordar que Coltel fue creada a propósito de la liquidación de la compañía estatal Telecom, que terminó en 2006. Entonces, Telefónica de España capitalizó la compañía y se quedó con la mitad más una acción de la compañía. En 2012 Movistar y Coltel se fusionaron (los servicios fijos y móviles). Hoy Telefónica cuenta con el 67,5 % de la empresa.
El debate sobre venta de la participación estatal se intensificó luego de que la OCDE recomendara que el Gobierno debe tener un papel de regulador mas no de operador en las comunicaciones.