Arriendos que más han subido están en estratos 1, 2 y 3: Fedelonjas
El gremio de agentes inmobiliarios explica que el comportamiento se debe a la alta demanda, pero menor oferta.
Redacción Economía.
La mayor demanda, pero menor oferta de alquileres en los estratos 1, 2 y 3 es lo que, según Fedelonjas, produjo que los cánones en esos segmentos se incrementaran más que en los 4, 5 y 6. Estos últimos “tienen un comportamiento más estable pues son menos las familias que demandan este tipo de viviendas”, explicó María Clara Luque, presidente del gremio de agentes inmobiliarios.
Fedelonjas resaltó que, según datos del DANE, en los últimos 12 meses (a enero) los cánones de arrendamiento de varias ciudades presentaron un crecimiento superior a la inflación, “lo que evidencia el buen momento de la vivienda usada como inversión”.
Le puede interesar: Inflación anual tuvo una variación de 3,15 % en enero
En el total nacional, los gastos de alojamiento variaron 4,51 %, es decir, 1,36 puntos más que la inflación (3,15 %). “Esto se da porque al desocupar las viviendas, los propietarios quedan en libertad de fijar el precio del alquiler y la alta demanda ha impulsado el incremento de los cánones”, afirmó Fedelonjas.
En enero, las ciudades en donde más creció el costo del alquiler fueron: Popayán (0,52 %), seguida por Medellín (0,51 %), Florencia (0,42 %), Barranquilla (0,38 %), Cúcuta (0,32 %), Armenia (0,31 %), Valledupar (0,29 %) y Cali (0,27 %).
Le puede interesar: ¿Cómo es el colombiano de la nueva canasta familiar?
Los que crecieron por debajo del total nacional (0,25 %) fueron Pereira (0,24 %), Ibagué (0,23 %), Bogotá (0,2 %), Cartagena (0,18 %), Pasto (0,17 %), Manizales (0,16 %), Villavicencio (0,15 %), Tunja y Montería (0,1 %) y Bucaramanga (0,02 %). En tanto que Santa Marta (-0,11 %) y Riohacha (-0,07 %) tuvieron un decrecimiento en los precios de los alquileres.
“Alrededor de cinco millones de hogares colombianos viven en arriendo en zonas urbanas. Debido a que las familias ya no están dispuestas a vivir en los extramuros de las ciudades, porque no están dispuestas a sacrificar su calidad de vida ni la de sus hijos, la demanda por viviendas en arriendo es una opción muy rentable y que va en aumento”.
La mayor demanda, pero menor oferta de alquileres en los estratos 1, 2 y 3 es lo que, según Fedelonjas, produjo que los cánones en esos segmentos se incrementaran más que en los 4, 5 y 6. Estos últimos “tienen un comportamiento más estable pues son menos las familias que demandan este tipo de viviendas”, explicó María Clara Luque, presidente del gremio de agentes inmobiliarios.
Fedelonjas resaltó que, según datos del DANE, en los últimos 12 meses (a enero) los cánones de arrendamiento de varias ciudades presentaron un crecimiento superior a la inflación, “lo que evidencia el buen momento de la vivienda usada como inversión”.
Le puede interesar: Inflación anual tuvo una variación de 3,15 % en enero
En el total nacional, los gastos de alojamiento variaron 4,51 %, es decir, 1,36 puntos más que la inflación (3,15 %). “Esto se da porque al desocupar las viviendas, los propietarios quedan en libertad de fijar el precio del alquiler y la alta demanda ha impulsado el incremento de los cánones”, afirmó Fedelonjas.
En enero, las ciudades en donde más creció el costo del alquiler fueron: Popayán (0,52 %), seguida por Medellín (0,51 %), Florencia (0,42 %), Barranquilla (0,38 %), Cúcuta (0,32 %), Armenia (0,31 %), Valledupar (0,29 %) y Cali (0,27 %).
Le puede interesar: ¿Cómo es el colombiano de la nueva canasta familiar?
Los que crecieron por debajo del total nacional (0,25 %) fueron Pereira (0,24 %), Ibagué (0,23 %), Bogotá (0,2 %), Cartagena (0,18 %), Pasto (0,17 %), Manizales (0,16 %), Villavicencio (0,15 %), Tunja y Montería (0,1 %) y Bucaramanga (0,02 %). En tanto que Santa Marta (-0,11 %) y Riohacha (-0,07 %) tuvieron un decrecimiento en los precios de los alquileres.
“Alrededor de cinco millones de hogares colombianos viven en arriendo en zonas urbanas. Debido a que las familias ya no están dispuestas a vivir en los extramuros de las ciudades, porque no están dispuestas a sacrificar su calidad de vida ni la de sus hijos, la demanda por viviendas en arriendo es una opción muy rentable y que va en aumento”.