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Los consumidores de electricdad han pagado en promedio $25 por kWh por concepto de “restricciones asociadas con limitaciones de transmisión”, advierte un informe de la Asociación de Grandes Consumidores de Energía (Asoenergía) que preside María Luisa Chiappe.
El gremio del sector eléctrico explica que este es un componente que ha aumentado vertiginosamente a partir del año 2014, cuando estas restricciones costaban entre $3 y $5 por kWh. Las cifras revelan un crecimiento de 500% en solo cuatro años, indicó Chiappe, según un estudio realizado por el gremio.
El valor de las “restricciones asociadas con limitaciones de transmisión” es el sobreprecio por reemplazar energía económica por energía más costosa, explica Asoenergía.
Señala el informe que las restricciones surgen cuando resulta imposible llevar energía desde las generadoras con costos más bajos hacia las zonas donde se encuentra la demanda, por falta de capacidad de transmisión. Esto obliga a todo el país a pagar por energía proveniente de fuentes de generación más costosas que sí cuentan con la transmisión adecuada para cubrir la demanda.
La diferencia entre el costo de la energía por mérito, (energía proveniente de las fuentes menos costosas, seleccionadas originalmente por el operador del mercado en el “despacho ideal” y los precios de la energía generada por fuera de mérito (o energía generada por la fuente que finalmente abastece la demanda), es lo que produce el cobro de las “restricciones asociadas con limitaciones de transmisión”, explica el gremio del sector energético.
“En 2017, entre todos los colombianos, tanto residenciales como industriales y comerciales, pagamos alrededor de US$400 millones por concepto de estas restricciones en nuestras facturas de energía, un valor que supera el millón de dólares diario. En otras palabras, los consumidores de energía pagamos el equivalente a 1,7 veces el costo anual del sistema de transmisión instalado. La pregunta obvia es: ¿por qué no construimos las redes faltantes en lugar de incurrir en costos que sobrepasan con creces lo que costaría transmitir la energía a través de la red?”, advirtió la presidenta de Asoenergía.
Precisa el informe de prensa que según cifras publicadas por XM (el Administrador del Mercado de Energía Mayorista) el 90% de los sobrecostos por falta de líneas de transmisión corresponde al pago de la energía generada por “por fuera de mérito” por plantas ubicadas en el área de la Costa Caribe Colombiana. Estos datos demuestran que el principal cuello de botella en materia de transmisión se encuentra entre el interior del país y la Costa Caribe; por lo tanto el problema se solucionaría, en buena medida, reforzando la infraestructura de transmisión para llevar energía desde fuentes menos costosas localizadas al interior del país. De lo contrario estamos perpetuando una solución ineficiente que recarga la factura de energía de todos los colombianos.
“La UPME ha mostrado preocupación por el tema de las restricciones y, en diferentes oportunidades ha manifestado la voluntad de encontrar una solución. Pero se requiere un esfuerzo mancomunado de todas las autoridades del sector eléctrico para lograrlo, con la participación de otros ministerios que tienen responsabilidades relacionadas con este asunto", señala María Luisa Chiappe.
Asoenergía ha propuesto al Ministerio de Minas y Energía una mesa de trabajo entre el Gobierno y los gremios representantes de diferentes actores del sector eléctrico incluyendo la demanda de energía, así como otros ministerios, para buscar conjuntamente una solución a este problema, dijo la dirigente gremial.
“En resumen, el crecimiento descrito en el cargo por restricciones nos aleja más de las tarifas de energía electrica de nuestros socios comerciales, y recarga injustificadamente los costos de la actividad productiva. Si Colombia pretende ser un jugador relevante en el mercado internacional, debe incorporar criterios de competitividad en este sector", reiteró.