Covid-19 impactará “moderadamente” finanzas de subnacionales, según Fitch
La calificadora aseguró que sus escenarios ya contemplan elementos de estrés sobre el balance operativo y el endeudamiento de los entes territoriales. También se refirió a la creación del Fondo de Mitigación de Emergencias (FOME).
Redacción Economía.
Fitch Ratings aseguró este martes que no espera cambios en las calificaciones a escala nacional de los municipios y departamentos del país. Se debe, en parte, a las medidas preventivas adoptadas para evitar su expansión.
Según la calificadora, si bien la emergencia por coronavirus traerá retos y presiones sobre los entes territoriales en materia de ingresos e incremento del gasto, sus escenarios ya contemplan elementos de estrés sobre el balance operativo y el endeudamiento. “Por lo anterior, las entidades cuentan con balances operativos holgados y niveles de endeudamiento moderados, lo que les otorga cierto margen de maniobra para absorber potenciales impactos fiscales”, indicó mediante un comunicado.
Aclaró que las calificaciones internacionales de Bogotá, Medellín y Barranquilla están ligadas a la calificación soberana del país.
Fitch espera que las transferencias de la Nación a las entidades territoriales mediante el Sistema General de Participaciones (SGP) se mantengan en las próximas vigencias fiscales. Sin embargo, asegura que es probable que la disponibilidad de capital para cofinanciar proyectos de inversión se reduzcan durante esta coyuntura, aumentando las necesidades de endeudamiento de las entidades en los próximos años. Este escenario ya ha sido contemplado por la calificadora.
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Sobre los ingresos tributarios, Fitch opina que los efectos de la desaceleración de la actividad económica dependen de la duración de las medidas de aislamiento preventivo y la detención de actividades no esenciales. “Los departamentos podrían ver una caída en sus ingresos ligados a consumos de cerveza, licores y cigarrillos, lo cual afecta la financiación de la salud, considerando que son impuestos mayormente cedidos para este fin”, indica.
En cuanto a los gastos, la calificadora dice que su incremento dependerá de las decisiones de política social de los gobernantes locales, quienes enfrentan presiones políticas y sociales para mitigar la pobreza en los sectores más vulnerables de la población durante la emergencia.
“Una vez superada la medida de cuarentena preventiva, los subnacionales podrían ser fundamentales para la reactivación de la actividad económica y el empleo en sus territorios mediante los programas de inversión”, añadió.
Considera que las presiones de gasto adicionales podrían provenir de las pérdidas generadas en los sistemas de transporte masivo, que verán sus ingresos reducidos debido a las restricciones a la movilidad. También señaló que las empresas de servicios públicos podrían requerir de más apoyo, dada la flexibilidad brindada por el Gobierno para el pago de servicios de las familias más vulnerables, así como también los hospitales públicos.
Finalmente, la calificadora se refirió a la creación del Fondo de Mitigación de Emergencias (FOME) con recursos del Fondo de Ahorro y Estabilización (FAE), establecidos en el decreto 444 de 2020.
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“Fitch espera que esta medida no impacte el cumplimiento de los compromisos de deuda con cargo a recursos de regalías. Lo anterior tiene en cuenta que la Nación se compromete a compensar los montos que sean necesarios para realizar los desahorros del FAE, de acuerdo con lo establecido en la Ley 1530 de 2012, y a retornar los recursos utilizados en partidas anuales de $1 billón a partir de 2023”, puntualiza.
El decreto establece que los recursos del Fondo Nacional de Pensiones de las Entidades Territoriales (Fonpet) que sean destinados al FOME serán restituidos por el Gobierno Nacional en un plazo máximo de 10 años.
* “Estamos cubriendo de manera responsable esta pandemia, parte de eso es dejar sin restricción todos los contenidos sobre el tema que puedes consultar en el especial sobre Coronavirus".
Fitch Ratings aseguró este martes que no espera cambios en las calificaciones a escala nacional de los municipios y departamentos del país. Se debe, en parte, a las medidas preventivas adoptadas para evitar su expansión.
Según la calificadora, si bien la emergencia por coronavirus traerá retos y presiones sobre los entes territoriales en materia de ingresos e incremento del gasto, sus escenarios ya contemplan elementos de estrés sobre el balance operativo y el endeudamiento. “Por lo anterior, las entidades cuentan con balances operativos holgados y niveles de endeudamiento moderados, lo que les otorga cierto margen de maniobra para absorber potenciales impactos fiscales”, indicó mediante un comunicado.
Aclaró que las calificaciones internacionales de Bogotá, Medellín y Barranquilla están ligadas a la calificación soberana del país.
Fitch espera que las transferencias de la Nación a las entidades territoriales mediante el Sistema General de Participaciones (SGP) se mantengan en las próximas vigencias fiscales. Sin embargo, asegura que es probable que la disponibilidad de capital para cofinanciar proyectos de inversión se reduzcan durante esta coyuntura, aumentando las necesidades de endeudamiento de las entidades en los próximos años. Este escenario ya ha sido contemplado por la calificadora.
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Sobre los ingresos tributarios, Fitch opina que los efectos de la desaceleración de la actividad económica dependen de la duración de las medidas de aislamiento preventivo y la detención de actividades no esenciales. “Los departamentos podrían ver una caída en sus ingresos ligados a consumos de cerveza, licores y cigarrillos, lo cual afecta la financiación de la salud, considerando que son impuestos mayormente cedidos para este fin”, indica.
En cuanto a los gastos, la calificadora dice que su incremento dependerá de las decisiones de política social de los gobernantes locales, quienes enfrentan presiones políticas y sociales para mitigar la pobreza en los sectores más vulnerables de la población durante la emergencia.
“Una vez superada la medida de cuarentena preventiva, los subnacionales podrían ser fundamentales para la reactivación de la actividad económica y el empleo en sus territorios mediante los programas de inversión”, añadió.
Considera que las presiones de gasto adicionales podrían provenir de las pérdidas generadas en los sistemas de transporte masivo, que verán sus ingresos reducidos debido a las restricciones a la movilidad. También señaló que las empresas de servicios públicos podrían requerir de más apoyo, dada la flexibilidad brindada por el Gobierno para el pago de servicios de las familias más vulnerables, así como también los hospitales públicos.
Finalmente, la calificadora se refirió a la creación del Fondo de Mitigación de Emergencias (FOME) con recursos del Fondo de Ahorro y Estabilización (FAE), establecidos en el decreto 444 de 2020.
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“Fitch espera que esta medida no impacte el cumplimiento de los compromisos de deuda con cargo a recursos de regalías. Lo anterior tiene en cuenta que la Nación se compromete a compensar los montos que sean necesarios para realizar los desahorros del FAE, de acuerdo con lo establecido en la Ley 1530 de 2012, y a retornar los recursos utilizados en partidas anuales de $1 billón a partir de 2023”, puntualiza.
El decreto establece que los recursos del Fondo Nacional de Pensiones de las Entidades Territoriales (Fonpet) que sean destinados al FOME serán restituidos por el Gobierno Nacional en un plazo máximo de 10 años.
* “Estamos cubriendo de manera responsable esta pandemia, parte de eso es dejar sin restricción todos los contenidos sobre el tema que puedes consultar en el especial sobre Coronavirus".