Más allá del interés que pueden generar las multas derivadas del incumplimiento a las condiciones técnicas y mecánicas que debe tener un vehículo, está la preocupación porque el carro o la moto que se conduce se encuentre en las condiciones idóneas para evitar el riesgo de accidentes.
Parte de las principales inquietudes que tienen los conductores es si las llantas de sus vehículos se encuentran, o no, en buen estado.
Según la Norma Técnica Colombiana (NTC 5375) se considera que los rines y las llantas de un vehículo no cumplen con la normativa cuando:
- Falta una o más tuercas, tornillos o pernos en cualquier llanta del carro
- Hay deformaciones excesivas en cualquiera de los rines
- Hay fisuras en cualquiera de los rines
- Hay una inexistencia, deformación, fisura o riesgo de desprendimiento en los aros de los rines artilleros
- No hay una llanta de repuesto
- Se han despegado o rompieron las bandas laterales de una llanta
- Hay protuberancias o deformaciones en las llantas
Cualquiera de estos elementos, relacionados al deterioro de una llanta, es causa suficiente para adelantar el cambio de la misma, o de las mismas.
Sin embargo, uno de los elementos más comunes que justifican el cambio de una llanta es su desgaste natural, el cual se puede evidenciar en el desvanecimiento del labrado. Acá le explicamos cuándo cambiar una llanta, según el tipo de vehículo que conduzca.
Vehículos de hasta 3.500 kilogramos
Se deberá medir la profundidad en el labrado y en el área de mayor desgaste. Si este presenta una profundidad menor a 1,6 milímetros se debe realizar el cambio.
Vehículos de 3.500 kilogramos o superior
En estos vehículos el área de mayor desgaste no debe indicar una profundidad menor a 2 milímetros.
Motos
En motos el área de mayor desgaste del labrado no debe indicar una profundidad menor a 1 milímetro.
Puede que el fabricante de la llanta que usted utiliza indique una profundidad mayor a la mencionada por la normativa nacional, por lo que se recomienda revisar el manual o indicaciones aportadas por este. Recuerde, más allá de evitar sanciones y multas, se trata de cumplir con las condiciones de seguridad.
¿Cómo hacer la medición?
Puede que haya escuchado de algún amigo que para revisar el labrado de una llanta se puede usar una moneda de $500 (de las antiguas) para revisar la profundidad del labrado. En teoría, si el surco se encuentra por debajo de la parte dorada, es decir, en la parte plateada, es porque se debe hacer el cambio de la llanta.
Sin embargo, y como ya lo describimos párrafos atrás, no todos los vehículos cumplen con las mismas condiciones de profundidad, por lo que este método no solo puede ser equivocado, sino también impreciso.
Tampoco se puede usar una regla, pues no se garantiza que el grosor de la misma permita llegar hasta la parte más profunda del surco.
Lo más idóneo para realizar esta medición, para que usted mismo lleve el registro del desgaste de sus llantas, es utilizar un profundímetro, el cual es un elemento que en Colombia no cuesta más de $25.000, es pequeño y lo pude cargar en uno de los compartimentos de almacenamiento de su vehículo.
Hay unos que son manuales, otros son digitales. Para el uso adecuado de este instrumento le recomendamos leer su manual de instrucciones.
Multa por llantas lisas
Llevar las “llantas lisas” o desgastadas le puede acarrear una infracción tipo C, por la que deberá pagar una multa de 15 salarios mínimos diarios legales vigentes que, para 2023 equivale a $580.000.
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