La desigualdad en América Latina está en su pico. La crisis socioeconómica que enfrenta la región, principalmente por problemas estructurales, como su alta dependencia al sector primario, junto con la informalidad y los impactos de la pandemia de COVID-19, traerá próximos desafíos para la región.
De acuerdo con un informe de Oxfam, una organización internacional enfocado en labores humanitarias, la región enfrenta una de las tasas más altas de desigualdad. Cerca de 98 milmillonarios acumulan “una riqueza combinada de $US480.800 millones, equivalente al PIB de Chile y Ecuador juntos”.
Ana María Upegui, directora ejecutiva de Oxfam Colombia, hizo un llamado a implementar medidas fiscales y políticas para la construcción de una sociedad más inclusiva y resiliente frente a los desafíos globales.
El informe apunta que la población 1 % más rica del mundo acumula la mayoría de riqueza, “mientras que 50 % más pobre lucha por sobrevivir”, lo que pone en tela de juicio la eficacia de los sistemas tributarios actuales.
La organización criticó la incapacidad de los sistemas en cumplir las promesas de bienestar económico, y recomendó un ajustarlos con un enfoque estructural:
- Reducción de desigualdades interseccionales.
- Promover la justicia climática.
- Fomentar la corresponsabilidad del trabajo de cuidados.
Asimismo, sugirió reformas que apliquen un impuesto progresivo a los más ricos; gravar rentas y ganancias; revisar y transparentar los incentivos tributarios agresivos para las grandes empresas; poner límites a la evasión, y gravar las ganancias extraordinarias de las grandes empresas.
Desigualdad en Colombia
Solo en Colombia, la población 1 % más rica concentró una tercera parte (33 %) de la riqueza, mientras que la mitad más pobre conservó 4 %. Además, la riqueza de los millonarios ha crecido. Hoy existen 4 milmillonarios con un patrimonio neto acumulado de US$25.000 millones, 25 veces más que hace dos décadas, cuando solo había un milmillonario con un patrimonio de US$1.100 millones.
Mientras tanto, la condición de las mujeres de comunidades indígenas y afrocolombianas alcanza 64,6 % y 47,3 % de pobreza, respectivamente, dijo Sandra Patricia Mojica Enciso, Directora de Influencia de Oxfam Colombia.
Según la entidad, estos datos permiten formular políticas públicas afines a las necesidades de las poblaciones y el medio ambiente, como la redistribución de la riqueza. “Aunque todas las personas enfrentamos la misma tormenta, lo hacemos en barcos muy diferentes, haciendo énfasis en la necesidad de políticas con enfoque de derechos humanos que den respuesta a las necesidades de las poblaciones en situación de vulnerabilidad”, se lee en el informe.
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