Deslizamientos en vía al Llano no serán solucionados en el marco del contrato vigente: Contraloría
Según el ente, la atención de los sitios críticos contemplada en el contrato con Coviandes se limita a limpiezas, sellados y reparaciones que no dan una solución definitiva.
Redacción Economía.
Este lunes, la Contraloría General de la República (CGR) informó que los continuos deslizamientos y cierres en puntos críticos de la vía Bogotá - Villavicencio no fueron incluidos en el nuevo contrato en ejecución y por lo tanto, mientras este siga vigente, no se les dará una solución definitiva. Así lo aseguró luego de haber realizado una auditoría de cumplimiento al corredor vial.
De acuerdo con el ente de control, la atención de sitios críticos o inestables de la vía “se limita a la limpieza de obras hidráulicas, sellado de fisuras y grietas, reparación de adoquín y señalización horizontal y vertical, excluyendo del alcance del concesionario la implementación de soluciones definitivas sobre esta infraestructura especial”.
También advirtió que la falta de soluciones de fondo para la vía es responsabilidad tanto de las entidades del Estado como del concesionario Coviandes.
Irregularidades en proceso de comparación
En el documento, la CGR también informa sobre el hallazgo de “deficiencias” en el proceso de comparación y selección que efectuó la ANI a la hora de elegir la iniciativa privada que incluía en su estructuración el sector 1 (Bogotá - El Tablón) y el sector 3 (Chirajara- Villavicencio) por encima de la iniciativa pública.
El ente asegura que no se evidencia por qué la propuesta seleccionada fue la privada, que se limita al sector 3, mientras que la pública buscaba atender el corredor en su totalidad para llevarlo a doble calzada.
Por otro lado, la entidad también destacó que en el contrato de concesión vigente se establece que se entregará a Coviandes “el recaudo de los tres peajes existentes en la vía, una vez el Contrato 444 de 1994 y su Adicional 01 de 2010 alcance el Ingreso Real Esperado” con lo que quedaría sin la posibilidad de financiar la construcción de la doble calzada del corredor entre Bogotá y Villavicencio con los ingresos provenientes del uso de la vía.
La CGR también encontró irregularidades fiscales por más de $2.000 millones, de los cuales $1.883 millones corresponden al pago de la comisión de éxito del proyecto Chirajara – Fundadores sin cumplimiento de los requisitos fundamentales para su reconocimiento.
El Espectador consultó al Ministerio de Transporte, que prefirió no manifestarse hasta estudiar los detalles del documento.
Este lunes, la Contraloría General de la República (CGR) informó que los continuos deslizamientos y cierres en puntos críticos de la vía Bogotá - Villavicencio no fueron incluidos en el nuevo contrato en ejecución y por lo tanto, mientras este siga vigente, no se les dará una solución definitiva. Así lo aseguró luego de haber realizado una auditoría de cumplimiento al corredor vial.
De acuerdo con el ente de control, la atención de sitios críticos o inestables de la vía “se limita a la limpieza de obras hidráulicas, sellado de fisuras y grietas, reparación de adoquín y señalización horizontal y vertical, excluyendo del alcance del concesionario la implementación de soluciones definitivas sobre esta infraestructura especial”.
También advirtió que la falta de soluciones de fondo para la vía es responsabilidad tanto de las entidades del Estado como del concesionario Coviandes.
Irregularidades en proceso de comparación
En el documento, la CGR también informa sobre el hallazgo de “deficiencias” en el proceso de comparación y selección que efectuó la ANI a la hora de elegir la iniciativa privada que incluía en su estructuración el sector 1 (Bogotá - El Tablón) y el sector 3 (Chirajara- Villavicencio) por encima de la iniciativa pública.
El ente asegura que no se evidencia por qué la propuesta seleccionada fue la privada, que se limita al sector 3, mientras que la pública buscaba atender el corredor en su totalidad para llevarlo a doble calzada.
Por otro lado, la entidad también destacó que en el contrato de concesión vigente se establece que se entregará a Coviandes “el recaudo de los tres peajes existentes en la vía, una vez el Contrato 444 de 1994 y su Adicional 01 de 2010 alcance el Ingreso Real Esperado” con lo que quedaría sin la posibilidad de financiar la construcción de la doble calzada del corredor entre Bogotá y Villavicencio con los ingresos provenientes del uso de la vía.
La CGR también encontró irregularidades fiscales por más de $2.000 millones, de los cuales $1.883 millones corresponden al pago de la comisión de éxito del proyecto Chirajara – Fundadores sin cumplimiento de los requisitos fundamentales para su reconocimiento.
El Espectador consultó al Ministerio de Transporte, que prefirió no manifestarse hasta estudiar los detalles del documento.